Una de las giras que más expectación ha levantado en estos primeros meses del año, ha sido la de UDO y Primal Fear, un tour que se convertía en un pequeño festival con la incursión en el cartel de Bullet y en las últimas semanas, de Messenger.

Los germanos UDO nos suelen hacer una visita al año, en el 2.013 no faltaron y nos dieron un repaso compartiendo cartel con otro peso fuerte como son los alemanes Blind Guardian, no tanto Primal Fear, que su paso por la península en los últimos años han sido escasas, pero recordamos grandes actuaciones como en el Metal Way de Gernika o de Zaragoza. Y a Bullet les tenemos más vistos, sus incursiones por estas tierras son asiduas y el pasado mes de julio coincidimos con ellos en el Luarca Metal Fest, a parte, giraron en marzo con los barceloneses '77, y si nos retomamos años atrás, estuvieron en el Sonisphere de Madrid.

A primera hora de la tarde acudimos a la Sala Santana 27 de Bilbao, había bastante gente esperando, es más, la entrada final de público fue masiva, seguramente rozamos el lleno, cosa que muy pocas veces podemos contar.

Puntuales a las seis y cuarto de la tarde aparecieron los alemanes Messenger, en un escenario reducido, solamente ocupando los primeros metros, delante de las baterías principales, y es que es habitual que las bandas invitadas a las grandes giras tengan que acostumbrarse a tocar en esas condiciones, también nos solemos encontrar con un sonido pésimo, pero esta vez no fue así, sonaron decentemente, sin acoples ni demás historias, así da gusto!!.

Desconocidos para nosotros, nos encontramos de golpe con una propuesta clásica de power metal épico, con claras influencias hacia Helloween, Majesty, Gamma Ray o Kamelot. Set list corto, su tiempo de actuación era de 25 minutos, poco tiempo para darse a conocer por esta zona. Su cantante apareció en escena con una capa y un bastón, que lo iba moviendo constantemente mientras nos presentaba las canciones de su nuevo trabajo “Starwolf – Pt. 1: The Messengers”, editado por Massacre Records.

Temática musical embarcada en historias de ciencia ficción, creadas por la propia banda con la ayuda del novelista Victor L. Pax, como “Raiders of Galaxy” con la que comenzaron y abre su nuevo disco, o “Salvation” donde en la grabación contaron con la participación de  Ralf Scheepers, cantante de Primal Fear pero en el directo no se produjo tal colaboración, una pena.

La banda se mostró sólida pero no nos entró el gusanillo de curiosidad de conocerles más a fondo, no fueron capaces de poner un pincelada de diferencia, por tanto, no despuntaron, parece ser que las bandas nuevas se ciñen a patrones clásicos sin atisbos de novedad que explotar en directo, es decir, más de lo mismo.

Por otro lado estuvieron los Bullet que a pesar de seguir otra escuela clásica encaminada a lo que bien hacen los incansables AC/DC, se metieron en este cartel repleto de power metal y heavy metal, géneros dispares pero siempre amigos. La banda sigue subiendo como la espuma su popularidad ha aumentado en los últimos meses y creo que se merecían con creces formar parte de un tour digno de mención.

Los suecos pasaron como un huracán sobre el escenario, mascaron ese buen rollo general que ocasionan sus actuaciones, llenas de riffs explosivos, guitarras al aire y cachondeo englobado con la salida de cada uno de sus himnos. Muy activos desde principio a fin, desfilando bombas sonoras que impactaban directamente sobre el público.

Su vocalista Hell Hofer, un tipo bonachón, dicharachero y personaje, nos entretuvo con sus gestos y su capa, tipo cercano que no dudó ni un momento en saludar a las primeras filas. Desfilaron de su set list grandes platos, “Stay Wild”, “Highway Pirates”, Turn It Up Loud”,  Midnight Oil” o “Bite The Bullet”, un himno final con el que se despidieron de forma ejemplar, consiguiendo una vez más, público y devotos en general.

Siguiendo el orden establecido, los siguientes serían Primal Fear, una de las bandas que en los últimos años están firmando unos discos que nos tienen muy enganchados, y claro, en esta gira no podíamos faltar, queríamos escuchar en directo como suenan las nuevas canciones de su reciente disco “Delivering the Black”.

Nada más salir a escena nos dimos cuenta que su cantante estaba sufriendo los primeros síntomas de una gripe común, ataviado con una chupa negra al más puro estilo de personal de seguridad para no coger frío, supongo, actitud que no perdonamos y por eso le mostramos una tarjeta roja por esos feos detalles, ¿somos profesionales o que somos?.

La última vez que les vimos en directo fue en la edición del 2.011 del Wacken Open Air, allí se marcaron un conciertazo!!.

En la actualidad cuentan con dos grandes guitarristas como son Tom Naumman y Alex Beyrodt, que a lo largo del concierto brillaron con luz propia, marcándose entre ellos duelos magistrales que aún flotan en nuestra mente, una forma de dar un buen espectáculo sin depender de la voz principal, capaces de destacar ellos solitos.

Tocaron diez temas del tirón, se nos hizo corto sin duda y tras irse del escenario todos pensábamos que volverían para hacer un último bis, incluso los técnicos de escenario les estaban esperando, pero al final no fue así. No penséis que el bolo fue pésimo, ni mucho menos, creo que a grandes rasgos la nota pasó del sobresaliente, la sucesión de los temas marcadamente rápidos no nos dejó tiempo ni para respirar.

Empezaron su descarga con “Final Embrace” y “One Night In Decemer” entre los temas nuevos, “Chainbreaker” también estaba allí como único superviviente de su primer disco, sin olvidarse de la balada “Fighting The Darkeness” dando un poco de oxígeno a nosotros y a ellos.

Una de las anécdotas de la noche fue cuando alguien del público tiró una txapela al escenario con las letras bordadas del Athletic Club, que sin dudarlo, el cantante se la puso mostrando su lado sonriente con rostro de felicidad.

El último de los temas fue “Metal is Forever”, un himno en toda regla que todo parroquiano del metal vive de forma apasionada.. Una vez más impecables!!!!

UDO cerraban la noche como todo buen cabeza de cartel tenía que hacerlo, dios mío, que noche!!!. Recordaremos por muchos años la visita de Udo  Dirkschneider como una de las veladas más gratas y célebres a la que hemos asistido en los últimos meses, está en un estado de forma increíble, además la banda que le acompaña refuerza sin duda la presencia del mítico cantante, un buen concierto rematado en la recta final por el recuerdo a una banda que fundó, Accept, os suena?

Como guitarristas, allí estaba Kasperi Heikkinen de Amberian Dawn que en su día vimos con dicha banda, y  Andrey Smir de Paul DiAnno o Blaze Bayley, que visitó hace años la Sala Azkena de Bilbao, una pareja espectacular, dueños de su propio protagonismo dejando a veces al pequeño alemán en un segundo plano, tampoco nos queremos olvidar de su teclista, Ulli  Köllner, madre mía, que energía aporreando las teclas.

Inicio del concierto con los temas de su nuevo disco “Steelhammer”, como bien llevaba el propio Udo serigrafía do en su camiseta negra, canciones de reciente creación que iban entrado como “King Of Mean” o “A Cry Of A Nation”, más los carismáticos de sus discos más celebras, por ejemplo, “Heart Of Gold” del año 91 o “They Want War” del 87 de su disco Animal House”, canciones que funcionan a la perfección y que Udo sabe cómo mantenerlos con garra y devoción.

Nos pilló por sorpresa que tocaran “Basta Ya”, corte en castellano alojado en su último disco con el que cuenta con la colaboración de Victor García de Warcry, una vez más el teutón implicado al máximo en temas sociales, si no lo sabíais, su residencia habitual está en Mallorca. Luego vino el “momento balada” de la noche, “In The Darkness”, que nos puso los pelos como escarpias, canción que oxigena la energía acumulada de la banda y respira bella melodía.

Los músicos seguían cumpliendo con su cometido en la recta final, a esas alturas los guitarristas eran libres y se paseaban por el escenario como si fuera su casa, un espectáculo total de virtuosismo que les llevó a tocar sus guitarras por detrás de sus nucas, o unir los instrumentos en forma de cúspide más la aportación del bajista, es decir, una recta final extraordinaria y perfecta donde los clásicos “Mean Machine” del año 89, “Go Back To Hell” del 88 y “Timebomb” hacían acto de presencia, con este último tema terminaron, ahora venían los bises.

Bises esperados sin duda, manteniendo el honor de banda y la devoción por Accept, no fallaron “Metal Heart”, “Balls to the Wall”, “I’m a Rebel” y “Fast as a Shark” que la vieja guardia cantó al unísono, da gusto ver como la parroquia más pureta acude a este tipo de eventos, es como volver a estar con los viejos amigos.

Una vez más, UDO conquistó Euskadi!!!!!
 
Steelhammer
King Of Mean
Future Land
A Cry Of A Nation
Heart Of Gold
They Want War
Never Cross My Way
Basta Ya
In The Darkness
No Limits
Mean Machine
Metal Machine
Go Back To Hell
T imebomb

Metal Heart(Accept)
Balls To Te Wall
I' m a Rebel
Fast as a Shark