¡Voluntad indómita!

Hay golpes en la vida que aunque nos hagan sentir que nada vale la pena y destruyan todas nuestras ilusiones, estimulan el fortalecimiento de nuestro interior profundo y, por consiguiente, nos impulsan hacia delante con mayor pujanza, notoriamente reforzados, con la certeza absoluta de poder lograr cualquier meta que nos propongamos. Los abulenses Dünedain han sabido recomponerse del duro palo que les supuso la marcha de su compañero Jacin, manteniendo viva la llama de la esperanza, merced al continuo desarrollo de una voluntad de acero, similar a ese enorme pájaro envuelto en llamas, el Ave fénix que renace de sus cenizas cuando todos le dan por literalmente muerto.

Ya lo dijo una vez el Poeta y pensador estadounidense Ralph Waldo Emerson  la confianza en sí mismo es el primer secreto del éxito. Más tiempo del justo y necesario han requerido para volver a pisar tierras guipuzcoanas, no obstante, no pecaron como otros muchos de haber caído en una espiral de agotamiento, sin saber cómo salir de ella y dando la impresión de pesarles el culo y ahogándose en sus propios himnos, sino que destaparon una prometedora base en la que construir su futuro, siguiendo la resplandeciente senda del heavy metal tradicional y el power metal melódico.

Eran las ocho y media y alrededor de cincuenta personas se reunían en el Doka para contemplar la primera actuación de la tarde-noche los hernaniarras Dirty Eyes que aparecieron discretos en el escenario, entregándose directamente a los instrumentos y sin presentaciones, entrando directamente en materia encadenando los cortes de su primer EP "Rock Is Getting Harder", con la mejor tradición en cuanto a calidad se refiere, la electricidad resplandeciente del hard rock más clásico, adjunta a una actitud encaminada siempre a la diversión y una leve transgresión de la gramática del rock universal, relegando cualquier floritura innecesaria en beneficio de unos riffs puramente melódicos y gran versatilidad instrumental para no resultar monocordes, buscando en la esencia de la música la herramienta óptima para llegar al alma del oyente, melodías que nacen, crecen y se esparcen, “Rock Is Getting Harder”, Crazy Night” o “Take Them Away” , a pesar de contener ciertos altibajos propios de un grupo que busca su horizonte.

Y si eso no fuera poco, obsequiándonos con dos suculentos homenajes a Velvet Revolver en “Sucker Train Blues" y Skid Row en “Youth Gone Wild¨ ¡Un manjar de dioses, para no perderles de vista y esperar de ellos grandes cosas!

Por mucho que digan en medios más puristas, es evidente que el heavy metal nacional continúa gozando de muy buena salud y si bien hay que reconocer que los pesos pesados no nos están dando muchas alegrías, continuamente van apareciendo nuevos valores que prometen buenos resultados.

A los irundarras Blast Wave se le podría considerar como los nuevos salvadores del heavy metal ya que lejos de tirar por el camino corto, repitiendo una y otra vez unas mismas estructuras, como suele estar hoy en día muy de moda, se decantan por mostrar una destreza musical inigualable y el visible percatamiento, desde el escenario, de un pleno entendimiento y fluidez entre ellos, escapando de cualquier encorsetamiento.

Siguen en plena forma, como pudimos comprobar de nuevo, la mayoría de los temas fueron ejecutados con la misma pulcritud que fueron grabados en estudio, tanto para su maqueta "Flames Are Getting Closer" como su próximo debut en larga duración; y con absoluta emoción, algo que escasea alarmantemente en la actualidad. En su repertorio no faltaron “Destruction”, “Woman In Sin”, “The Traveler” o “Rise Of The Phoenix”, representando la quintaesencia de lo que debería ser el heavy metal químicamente puro, una impenetrable muralla de sonido, no exenta de melodía ni arreglos bastante complejos, encargándose de todo ello un par de guitarras endiabladas, una garganta incendiaria, en la más pura tradición Kai Hansen y una base rítmica sin grietas, toda una personalidad fornida y definida derivado de su forma fresca y desinhibida de entender el género.

Se permitieron el lujo de cerrar, por todo lo alto, con una grandiosa versión de los británicos Iron Maiden "The Evil That Men Do”,  que desató la histeria de aquellos fieles al estilo heavy metal clásico y tradicional.  ¡Una firme promesa!

De absolutamente espectacular se puede calificar la evolución que están teniendo los abulenses Dünedain en sus últimos trabajos. Su anterior trabajo “Mágica” los confirmó como una banda única que iba más allá del power metal melódico en el que estaban encajonados y el próximo disco seguramente que será con el que sin lugar a dudas darán un gran paso para convertirse en una de las bandas más destacadas de la escena heavy metalera.

El primero en colocarse fue Miguel Arias , detrás de sus timbales, Jesús Izko y Mariano hicieron posteriormente su acto de presencia y el último en acoplarse, Tony Delgado , que fue quien se llevó una ensordecedora ovación. Ya con sólo el tema con el que abrieron “Buscando el Norte” dejaron constancia de una madurez musical adecuada para no caer en el orgullo espiritual, en una mediocridad encontrada y no buscada, todos estaban rindiendo a un nivel altísimo y principalmente el vocalista que aparte de ser un maestro en el arte de escarnecer al más pintado, una versatilidad vocal que le permite moverse en grandes registros, sabe como contagiar altas dosis de optimismo para mantener la ilusión por la vida o la cotidianidad.

La peña empezaba ya rugir ante la llegada un tema tan asombroso como “Fiel a Mi Libertad”, incluido en su disco "Buscando el Norte II", cuyas texturas grandilocuentes en directo refuerzan considerablemente el mensaje que han querido transmitir a través de él, “Que la balanza de nuestro interior sea fiel a nuestra libertad” , seguido de un tema especial “Noche de Sueños”, condesando vitalidad, frescura y el esfuerzo por obtener un acabado de mayor viveza y consistencia, Tony equilibrando melodía y potencia, a la vez que elevaba su sentir emocional a una real devoción, una entrega en cuerpo y alma, provocando que sus ojos brillasen y delatarán lo que su corazón sentía en ese instante, una felicidad personal al sentirse muy querido por la concurrencia en “La Rosa Negra, el dolor perecedero que deja un amor indivisible o esa lucha sin cuartel en busca de los sueños,“1.000 Golpes”, su reciente single.

Dentro del universo musical pocos artistas muestran tantas posibilidades vocales como él, una capacidad de mutación realmente sobrecogedora que contribuye a que el disfrute del concierto sea de lo más llevadero, te lo pone todo tan cerca que no es necesario tener que estar predispuesto o forzar una atención, todo fluye, hubo momentos únicos e irrepetibles, medio baladas cuyas letras se te pegan a la piel, “La Tierra De Los Sueños” o “La Luz De Mi Oscuridad y otras mucho más peleonas, de deleite generalizado, intercaladas con palabras cargadas de intenciones para armarse de coraje ante cualquier situación que nos cause miedo, en “Valor” “Hay que tener cojones para hacer algo distinto que no sea lamer pollas a los putos políticos de mierda o hacer caso a lo que te dicen los telediarios”  o en “El Año De La Rabia”, dedicada con todo el desprecio a los militantes del Partido Popular, “Basta de falsas esperanzas, estafas, burlas, de desprecio a nuestras vidas, a nuestra dignidad y a nuestros derechos”.

La parte más cañera de la actuación llegó a los ¾ de la misma con “Mi Alma Sigue En Pie”,   pronunciados cambios de ritmo, arreglos brillantes, armonías vocales exquisitas y un lirismo optimista y vital para hacer frente a la cruda realidad en la que vivimos, y “Por Los Siglos De Los Siglos”, corte power metalero en toda regla, con su consiguiente dosis de épica y un gran estribillo para ser cantado al unísono y conquistando el corazón del oyente por la vía directa, en un final apoteósico con “Corazón De Invierno”, una composición que contiene un parte instrumental grandiosa, sobresaliendo unos muy técnicos y progresivos riffs de guitarra, en donde el tándem guitarristico (Tony y Mariano) dio rienda suelta a toda su imaginación con punteos y acabados de una profusa energía y total elegancia. Una cita del novelista francés André Maurois se fundamenta en la ilusión eterna para convertir los sueños en realidad, no perder la fe y la esperanza en momentos difíciles, ser positivo para impregnar de elevadas vibraciones todo lo que nos rodea. Dünedain son todo un ejemplo de espíritu indomable, “Unidos Por El Metal”, en busca de la armonía en las virtudes de sus almas, su razón de ser. ¡Ilusiones renovables, elevadas a la segunda potencia!

- Buscando el norte
- Fiel a mi Libertad
- Noche de sueños
- Jugando a Ser Dios
- La Rosa Negra
- 1.000 golpes
- El principio del Fin
- Valor
- La Tierra de los Sueños
- El Año de la Rabia
- Mágica
- Mi Alma Sigue en Pie
- Una Razón
- La luz de mi Oscuridad
- Por los Siglos de los Siglos
- Corazón de Invierno