El espectáculo que dieron Los Trogloditas destacó por su actitud y por su aptitud, les vimos muy rockeros, muy auténticos y muy sinceros, disfrutando sobre el escenario y dando lo mejor de sí mismos. Consiguieron que pasáramos una noche excelente de Rock & Roll, sin remilgos y sin concesiones.
Aquella noche también sonaron temas más antiguos y un tanto más míticos como “María”, “El rompeolas” o “Rock suave”. Canciones como éstas y más de una veintena tuvieron la culpa de crear un concierto breve, ya que el grupo iba a toda la hostia tocando, pero muy intenso.
Casi al finalizar el bolo Los Trogloditas hicieron mutis por el foro, haciendo como que se iban, pero luego volvieron para dejarnos con cuatro últimos temas. El broche de oro a una excelente actuación lo pusieron las míticas “El ritmo del garaje” y “Cadillac solitario”.
Desde estas líneas también quería destacar la labor de El Pirata al piano, a la guitarra acústica, a la trompeta y al saxo. Este artistazo con mayúsculas le da un rollo envidiable a los temas y se convierte en imprescindible en la banda.
En definitiva, como he leído por ahí, hay sitio para los dos, para Loquillo y para Los Troglodias, pero como ahora estamos hablando de Los Trogloditas comentaré que tienen un futuro prometedor por delante. |