Después de pasar una tarde estupenda en el Mongolfest nos acercamos hasta el Clandestino en Pontejos para seguir disfrutando de la noche, teníamos muchas de ganas de ver a Peligro de Muerte y a Miguel Costas. Un redecorado local que antes se llamaba La Tina y que se ha puesto como objetivo promover la música por la zona programando casi todos los fines de semana buena música, les podéis seguir en Facebook.

Los primeros en romper el hielo fueron los locales Peligro de Muerte, banda de versiones que cumplió con su labor a la perfección, supo calentar al público y pusieron muy bien los puntos sobre las ies. Lo que duró su actuación, que fueron más o menos tres cuartos de hora, se nos pasó volando y nos entretuvieron de la mano de grandes clásicos, como “Veteranos de la kale borroka” de Lendakaris Muertos, “Johnny” de La Polla Records o “Generales anormales” de Distorsión, entre otras muchas.

También nos dejaron un tema propio, canción que lleva por título “Control de alcoholemia”, este tema la verdad es que no está nada mal, personalmente opino que Peligro de Muerte debería crear más canciones propias.

En una canción de cuyo nombre no me consigo acordar, pero sé que era de Tijuana in Blue, salió a colaborar Juanma, vocalista de los Escapaos, y María salió a aportar su granito de arena en “Me gusta ser una zorra” de Las Vulpes.

El bolo acabó con “Mierda de ciudad” de Kortatu.

Ahora eso sí, cuando le tocara el turno a Miguel Costas lo iba a tener facilito ya que Peligro de Muerte nos había animado a todos.

Y por fin salió al escenario el señor Miguel Costas arropado por una gran banda y nos dejó con los temas más recientes y también con los más clásicos. El público bailaba como enloquecido, como si estuvieran poseídos por el mismísimo demonio.

Empezó la actuación con “Día de matanza” y de ese disco casi nuevo, porque hagamos memoria ya es del año pasado, y lleva por título “Alguien tenía que hacerlo”, pues bien de ese trabajo recién salido del horno (comparado con el resto) nos dejaron también “Di que no” y “María”. Y de “Condenados a Miguel Costas” nos dejó “Hasta los güevos” y “Yo estoy bien, tú estás gordo”.

Pero daba igual que la canción fuese de hace seis años o de hace 20 que el público las bailaba todas y las coreaba con la misma intensidad.

De los grandes clásicos que sonaron aquella noche cabe destacar “Assumpta”, “Bailaré sobre tu tumba”, “Vamos muy bien”… Y para rematar la faena, como no podía ser de otra manera, Miguel Costas acabó su actuación con la mítica “Miña terra galega”, un broche de oro a una espectacular actuación.

Pasamos una buena noche de la mano de Peligro de Muerte y de Miguel Costas. Esperamos repetir pronto.