El Drogas volvió a Bilbao consiguiendo que las cuatro horas que duró su espectáculo fueran una auténtica lección de humildad y trabajo, son más de cuarenta años sobre los escenarios, y a sus 56 tacos, Enrique Villarreal sigue comiéndose el escenario. En esta gira levan un set list de cuarenta canciones, repasando en profundidad la trayectoria musical de Barricada, Txarrena e incluso La Venganza de la Abuela.
Se puede decir que la cita en el Antzoki es anual, no falla, y siempre se monta una auténtica fiesta, es como si fuera un ritual musical al que hay que acudir sí o sí, además en esta gira están regalando con la entrada un ep de cuatro temas de Barricada, “En la Silla Eléctrica”, “Barrio Conflictivo”, Mañana Será Igual” y “Matilde Landa”.
No hay que olvidar que este año El Drogas viene en varios formatos dependiendo del lugar y espacio que visite, está El Drogas Rhythm & Blues Band, El Drogas y la (des)memoria Band y El Drogas tal como todos conocemos. El Drogas Rhythm & Blues Band es un formato creado para auditorios, teatros y casas culturales, y aparte de la banda formada por Enrique Villarreal “El Drogas”, Txus Maravi, Brigi Duke y Flako Txarrena, se añade la presencia del teclista Germán San Martín y Serva Barón a los coros, como bien dice la palabra, puro Rhythm & Blues con las canciones de siempre pero con otros matices diferentes. Luego El Drogas y la (des)memoria Band acoge los temas que se escribieron en el disco “La Tierra está Sorda” de Barricada, inspiradas en la Guerra Civil y en la memoria histórica.
El concierto empezó pasadas las ocho y media de la tarde, a muchos les pilló todavía entrando al Kafé, había una larga cola la verdad. Como banda invitada estaba Ángel Casto & Los Honestos, una parodia divertida de los propios músicos de El Drogas (Enrique, Flako, Brigi e Infiernito), que se meten en su papel de grupo popero con jerséis de cuello alto, pelucas y estilismo pijo, con un pequeño set list de siete canciones de temática religiosa, melodías estilísticamente correctas, es decir, hacen de sus propios teloneros, magnífico!!
Angel Casto & Los Honestos
Tras acabar y retirar el biombo que cubría el escenario y sonar de música ambiental cantos religiosos, empezaría lo bueno, pero antes comprobamos de primera mano como el público estaba repleto de la vieja guardia, que seguramente acudieron a la conocida sala para revivir la banda sonora de su adolescencia. Una forma fantástica de hacerlo, muchos acudieron con sus hijos!
El recorrido comenzó a las nueve y media de la noche y la fiesta se alargó hasta a la una de la mañana, tiempo intenso repleto de himnos generacionales e historia viva de nuestro rock. El bueno de Enrique siempre cantando sobre historias cercanas, que bien ha sabido plasmar en su último trabajo “Demasiado Tonto en la Corteza”, formado por tres discos y que ha resultado tan bien que hace unas pocas semanas lanzaron una edición limitada de 500 copias en formato vinilo.
Canciones que recogen la rabia de la calle generada ante la incompetencia y corrupción de nuestros queridos y amados políticos, más los banqueros y la familia real que también hay que dar de comer aparte, o el lado humano enfocado al Alzheimer, todo en una senda de glam rock y rhythm and blues.
Arrancaron con el tema “Como Son”, Enrique se enfundó una guitarra eléctrica ocultando su faceta habitual y liberal, no siendo la única vez que recurriría a las seis cuerdas, luego continuaron con “Nos hace Morir” y “Lentos Minutos” en su versión más eléctrica, más dos temas que vinieron con guitarra acústica, “Collar Abandonado” y “Cordones de Mimbre”. Tras aparcar el instrumento vino “Sofokao”, ambiente caliente por Barricada que no fue la única que apareció en este primer bloque de actuación, “Tentando a la Suerte” se sumó a la fiesta, además fue coreada por el respetable a más no poder.
“A gusto” fueron las palabras que se repitieron constantemente durante el concierto, recibiendo el cariño del público y ovación por la larga trayectoria de El Drogas, y es que en Bilbao siempre ha salido por la puerta grande. Poco a poco los medios tiempos iban cogiendo protagonismo, como “Sueños Rotos”, reciente videoclip o “En Punto Muerto”, tema que abre su último disco, siguen espolvoreando el lado humano de la enfermedad, nos hace ponernos en la piel de una persona que sufre Alzheimer, se borran los recuerdos, desaparece la memoria.
“Demasiado Tonto en la Corteza” y “Sin Reservas” dejaron espacio a más temas acústicos como son “Collar Abandonado” dejando unas palabras para recobrar la vigencia de la memoria histórica. “Frío” versión del desaparecido grupo Alarma, continúo elevando las temperaturas para luego coger rápidamente la ira de la parte femenina, “Están para Violarlas”, una canción polémica generada de las controvertidas palabras del alcalde de Valladolid, un trago largo que hierve siempre que se escucha.
El Drogas
“Olvido y Rebeldía” y “Oveja Negra” fueron cantadas por todo el público, uno de los momentos álgidos de la noche, manteniendo en todo momento los recuerdos vividos de épocas pasadas gracias a una banda como fue Barricada a la que hemos querido mucho y siempre recordaremos. “Fue 24D ¿y Que?” de La Venganza de la Abuela, fue la única que rescataron de dicho proyecto, lógico si tenemos en cuenta que solo editaron un disco, también interpretaron “No das Pena”, con esos sonidos del western rock que hilaban fino dejándonos engañados durante minutos.
A estas alturas el ecuador del concierto le estábamos dejando atrás, pero aún faltaban temazos como “Lentos Minutos”, donde se aborda la pérdida de derechos y libertad individual cuando uno es arrestado y no te dejan la llamada de rigor, o el recuerdo a la infancia en “Debajo de aquel árbol” de los Barri, que según pasan los meses, es piedra importante del renovado set list de la banda.
Y seguidos aparecieron tres himnos generacionales, “Animal Caliente”, “Barrio Conflictivo” y “En Blanco y Negro” que fueron recibidos con total ovación. A continuación fue la primera salida de la banda del escenario, pero rápidamente regresaron para dar salida al primer bloque de los bises, con seis canciones, entre ellas “Empujo Pa Aki”, “No Hay Tregua” o “Todos Mirando” que nos iba llenando de felicidad. La traca final explotó con “Peineta y Mantilla” tema escrito a nuestra querida Cospedal, y “Victima”, letra escrita con puntilla y punzón.
Y la segunda tanda de bises estuvo compuesta por tres TEMAZOS en mayúsculas, “En La Silla Eléctrica” himno que todos conocemos, “Azulejo Frío” quizás sea el tema más especial de Txarrena, y “Otros Tragos” que redondeó la larga velada, en este tema la banda en bloque se subió hasta la segunda planta del Antzokia para luego desfilar, en estos momentos Brigi Duke tenía una guitarra acústica aparcando por un momento sus labores de batera.
Concierto explosivo sin duda, un repaso a una larga carrera donde El Drogas parece incombustible.