Hay noticias que te alegran el día, la de esa semana en concreto fue el despertarse y descubrir que esa misma noche, bien cerquita de casa y gratis tocaba Loquillo. No tuvimos que pensarlo demasiado para acercarnos hasta las fiestas de San Ginés de la localidad cántabra de Colindres.
Pasadas las once y diez de la noche, casi con una puntualidad británica, el comienzo estaba previsto a las 23:00, Loquillo y toda su banda salieron a un escenario que no se les quedó pequeño pero que supieron llenar a la perfección.
El público no parecía demasiado numeroso, sin embargo la cosa engañaba, y es que la actuación era en una campa muy grande, con lo que había muchísimas personas allí congregadas, pero se estaba bastante a gusto, sin agobios y sin mucho problema para disfrutar tranquilamente de la actuación.
El concierto fue dividido en dos partes, separadas por un breve intervalo de tiempo en el que el grupo hizo mutis por el foro cuando llegó la medianoche. Empezaron muy potentes e intrépidos con “Rock and Roll actitud”, “Línea clara” y “El hijo de nadie”. Y así fueron pasando los minutos, precedidos de una actitud envidiable, como siempre, con un sonido que ralló la perfección y con unas luces que parecen mecer las canciones como hacen las olas con la espuma del mar. De las extraordinarias cualidades de los músicos de esta gran banda ya queda poco o nada que decir.
En esos primeros cuarenta y cinco minutos también pudimos escuchar otros grandes himnos como “El hombre de negro”, “Cruzando el paraíso”, “El rompeolas”, “Feo, fuerte y formal” o “El ritmo del garaje”, entre otras. |
Pasada la hora bruja, la banda reanudó su actuación con la festiva “Contento”, a la que sucedieron casi una decena más de canciones. Temas todos ellos también con un regusto añejo, como por ejemplo “Quiero un camión” o “Esto no es hawai”, después de lo cual El Loco presentó a toda la banda y añadió un comentario que ya le hemos escuchado en otras ocasiones: “sumamos, no restamos”, pero esta vez con un cambio importante, la ausencia del gran Jaime Stinus que dejó la banda hace unos meses, y la presencia de Mario Cobo (Nu Niles). ¿Os acordáis cuando Loquillo señala a su productor en la conocida frase " invertiré mucha pasta me dice mi productor" del tema "Rock & Roll Star?, antes apuntaba con el dedo a Jaime, ahora hace lo propio con Josu García, que ha sido el encargado de producir el último disco "Código Rocker".
El broche de oro de una buena actuación (aunque sinceramente, no la mejor que hemos visto de ellos) la pusieron las archiconocidas “Rock & Roll Star” y “Cadillac solitario”.
Y así llegamos a la una menos veinte de la noche, después de más de veinte dos canciones y después de un bolo extraordinario para cualquiera que se precie, pero tal vez un poco “normalito” para tratarse de quien se trata. De todos modos, siempre es un gran placer ver sobre el escenario a animales que son capaces de devorar todo lo que se les ponga por delante. |