Todo empezó un 27 de febrero en el Black Bird de Santander, Jimmy Barnatán y su fie escudero Sergio González como representante de la banda The Cocooners, presentaron en sociedad el álbum “MotorClub” a puerta cerrada, entre amigos y periodistas musicales. Ese fue el inicio, por delante tenían una extensa gira, primero compartiendo cartel con el magnífico Carvin Jones, y luego, pateándose el país en la gira “Sol”, patrocinada por la conocida marca de cerveza.

Durante dicha gira, The Cocooners, banda que respalda al bueno de Barnatán, estuvo representada por Sergio González a la guitarra, Freddy Simons a la batería y Angel Camacho al bajo (ex The Bon Scott Band).

Y todo inicio tiene su fin, la banda quería despedirse de su público para dar carpetazo a uno de los mejores años de Jimmy Barnatán, y como no, el lugar elegido para tal magno evento fue el Black Bird de Santander el jueves 10 de septiembre, con una buena entrada para ser entre semana y contando con varias colaboraciones para ocasión.

The Cocooners son más de los que habíamos nombrado, y no se querían perder este concierto por nada del mundo para aportar su granito de arena, allí estaban listos para colaborar Dani Simons al bajo (otras veces le hemos visto con el contrabajo) y Rubén Rodríguez a la batería y percusión. También había otro tipos de sorpresa, con la entrada se iba a regalar la novela de Jimmy “New York Blues”, pero lamentablemente los libros no llegaron a tiempo.

Respecto a lo musical, buena dosis de rock blues que paso de la hora y media de actuación, con un constante tránsito de The Cocooners por el escenario que hizo las delicias del público, incuso Jimmy se atrevió a volver a tocar el piano situado en la parte de atrás del Black, creando un momento íntimo e irrepetible, bajo un silencio sepulcral (a veces), para poder escuchar su voz sin amplificar.

Jugó con nosotros, nos hizo saltar, movernos, agacharnos y mantenernos así hasta que todo el mundo lo hiciera, rugió como un león amaestrado, bailó mientras su cara se alimentaba de diversos gestos, y es que este pequeño gran hombre es todo un frontman y controla la actuación de principio a fin, bueno, no toda, que tuvo que decir en alto varias veces que le trajeran un whisky porque nadie le hacía caso jejeje.

Empezaron fuertes, a las primeras de cambio apareció uno de sus singles más aclamados, “Bad News”, para continuar con otros como “The Devil's Song” o uno de los temas que más me gustan de su “MotorClub”, “The Gangster that you need”, esta vez sin la guapísima Virginia Labuat que colabora en el disco.

Nos disparo son su mítico “Boom Boom” y nos hizo retroceder al pasado con la cover “Road House Blues” de los míticos The Doors, un concierto completo marca de la casa que finalizó con una gran fiesta sobre el escenario, no sin antes ofrecernos lo que comenté en párrafos anteriores, dos o tres canciones al piano con los sentimientos a flor de piel.

Concierto de Jimmy Barnatán en el Black Bird es todo un clásico, nunca defraudan.