La gente que no tiene complejos suele resultar mucho más atractiva, las personas que van por la vida derrochando energía sin importar mucho el fin último, sin plantearse el futuro como si se tratase de una batalla que hay que ganar a toda costa. Las personas que montan un grupo para pasárselo bien, que saben lo que hacen, pero que tampoco se obsesionan, que disfrutan con la música al fin y al cabo. Esas bandas resultan tremendamente seductoras, o por lo menos para mí lo son.
 
El otro día vimos a un grupo de esos. Unos músicos que se han juntado en un nuevo proyecto llamado Yey Sax. Todos ellos ya han formado parte de otras bandas, pero rezuman frescura y se nota en su música que si bien no son mancos, ni cojos tampoco, no tienen unas pretensiones de esas que asustan. Yey Sax es un grupo para tomarse en serio, pero no uno de esos que hay que ver en directo sin intercambiar ni una sola palabra con el de al lado por si se ofenden.
 
Pues bien, Yey Sax llenaron la Sidrería Viento Norte de Astillero esa noche, en una velada en la que presentaron su primer trabajo, "Sin alicatar". Un concierto gratuito y que se llenó de un montón de amigos y conocidos, y también de caras menos habituales. Sin teloneros, que tampoco hace falta, y sin trampa ni cartón, la banda presentó su colección de canciones. Entre ellas estuvieron, "Libre", "Goyo y mar" y "Jimmy el tuerto". También hubo un hueco para unas más que acertadas versiones de Segismundo Toxicómano, Parabellum, EUKZ ("Bis a bis") o Mala Reputación ("Las 2:00"). Las versiones de lujo, no todo el mundo las clava y hay veces que piensas: "madre mía, ¡¡cómo se han atrevido a hacer esto!!". Pero este no era el caso, sino más bien todo lo contrario. Y por si esto fuera poco contaron con el apoyo de Chaves (vocalista de Faltos de Riego).
 
La verdad, es que pasamos un rato estupendo con Yey Sax, poco más podemos pedir. Seguiremos atentos a su evolución. Aquella noche nos dejaron con buen sabor de boca y la actuación se nos pasó volando, señal de que la banda cumplió con las expectativas y supo poner una nota de color a la noche. ¡¡Nos vemos en la próxima!!.