Curiosamente y pese a que llevan en activo casi 30 años nunca había visto en directo a Porretas, y era una de mis asignaturas pendientes de bandas estatales: afortunadamente esta noche podía verlos.

El concierto tenia lugar en pleno centro de El Astillero, localidad que durante sus fiestas es la capital del rock en Cantabria.

Como casi todos los actos que tienen lugar con motivo de cualquier fiesta, el evento no comenzó a la hora lo cual, y sin que sirva de precedente, agradecí, porque me costo mucho poder aparcar en dicha localidad.

A eso de las 23.20 estaban sobre las tablas Bode en el centro del escenario a la guitarra y a la voz, Pajarillo al bajo y a la voz, Luis a la batería y el más nuevo de todos, Sócrates, a la guitarra, mientras sonaba a modo de intro “Always look on the bright side of life”, de la película “La vida de Brian”.

El concierto comenzó reivindicando su barrio con “Hortaleza”, para seguir con desgraciadamente aun vigente “Jodido futuro” y muy oportunamente interpretar “Si nos dejáis”, con la que se empezó de animar el personal. Comenzaba fuerte la velada.

Porretas siguen sacando buenos discos y prueba de ello fueron “Cuando sales con los colegas” de su anterior disco y “Bankiarrota” y “En mi barrio”, de su ultima referencia; entre medias sonó “Vive y deja vivir”.

Lógicamente el recuerdo a Robe, casi cinco años después de su pedida estuvo presente con “Y aún arde Madrid”, en la que intercalaron una parte del “Hotel California” de The Eagles, para volver a su actual disco con “En las cunetas”.

La fiesta se estaba animando tanto arriba como abajo del escenario y aun lo hizo más con “Dos pulgas en un perro”, “El deudor del condado de Hortaleza” o “Tripis”, llegando uno de los momentos más esperados con “Si lo sé me meo”.

Con “Atrapa un ladrón” recordaron por última vez su actual disco, para volver a descargar más clásicos como “Haciendo el ganso”, “Joder que cruz;” o “Si los curas comieran chinas del río”, junto a alguna más actual como “El gran engaño”.

Una de las canciones más conocidas de la banda es “La del fútbol”, con la que todos nos pusimos a botar y saltar ya que es imposible quedarse quieto con esta canción.

Tras un amago con el “Thunderstruck” de AC/DC, nos regalaron un medley con versiones del “Pongamos que hablo de Madrid” de Sabina, “Esto es un atraco” de Burning, “Diga qué le debo” de Siniestro, “Peligrosa María” de Los Suaves, “Juego Sucio” de Obús, “Txus” de La Polla Récords o el clásico “Saca el güisqui Cheli” de Desmadre 75, canciones y grupos que han servido de influencia a la banda.

Tras una breve retirada volvieron para terminar la faena con su canción quizás más conocida como es “Marihuana” y acabar el concierto con la autobiográfica “Porretas”. Tras más de hora y media se despedían de todos los presentes de nuevo con “Always look on the bright side of life”.

La verdad es que disfrutamos de un concierto muy ameno y en un ambiente muy festivo, dejándonos con ganas de más, con esa buena mezcla de cachondeo y diversión, pero sin olvidar el lado más reivindicativo. La próxima vez que vuelvan seguro que repito.

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