Un año más me acerque a la localidad de Hinojedo para disfrutar del Rock In Hinojedo que tiene lugar con motivo de las fiestas de dicha localidad. Para esta ocasión la organización había apostado fuerte al traer cuatro bandas de mucha calidad: In Wolf We Trust, Emboque (que son vecinos del pueblo), Sez-Naus (que viven en la vecina localidad de Suances) y Vendaval, procedentes de Asturias.

Este año era especial ya que a partir de este año el festival pasará a apellidarse “Memorial Uco” en memoria de un vecino del pueblo muy amante del rock y al cual se le estuvo homenajeando durante buena parte del festival con imágenes y recuerdos.

Antes de empezar a hablar de las actuaciones quisiera decir dos cosas:

En la parte negativa que el festival se demoró por causas que desconozco durante más de 45 minutos lo que hizo que acabase a altas horas de la madrugada, algo que siendo un viernes y teniendo que trabajar al día siguiente me molesto bastante

En la parte positiva el escenario era espectacular con un juego de luces que llamaba la atención y con un sonido bastante bueno durante todo el festival; la verdad es que costaba quitar los ojos del escenario.

La banda que abría la velada fue In Wolf We Trust, banda a la que hacia mucho tiempo que no veía en directo y que desde la última vez han cambiado de bajista y solo cuentan con Adolfo como guitarra; eso no les hace perder fuerza en escena sino que salen adelante con mucha solvencia.

Como suele ser habitual en la banda alternaron canciones propias como “El viejo lobo” con la que iniciaron o “El peso de la verdad”, con versiones como la que hicieron del mítico “Smoke on the Water” de los Deep Purple.

Una de la versiones que nunca falta en sus directos es el “Hocus Pocus” de Focus, antes de la cual Adolfo nos volvió a demostrar su calidad con un breve solo de guitarra.

El concierto seguía avanzando con su canción “Déjame”, para seguir con la versión del “Rock and roll, hoochie koo” de Rick Derringer.

Con una dedicatoria al recordado Juanma “El Rata”, asiduo de sus conciertos por la zona de Buelna, demostraron la calidad instrumental que tienen y es que si algo son es una banda con una calidad contrastada.

Encararon la recta final con la versión del conocido “We’re an american band” de Grand Funk Railroad, para seguir con “Declaración de principios”, donde Polaco demostró una vez más lo gran vocalista que es.

Concluirían su actuación con el conocido “Highway Star” de Deep Purple, para la que Adolfo se hizo cargo de los teclados y Mario Emboque tomo la guitarra; una auténtica delicia.

Concierto corto pero intenso de In Wolf We Trust, a los que espero volver a ver muy pronto.

No hubo que esperar mucho para que subiesen los asturianos Vendaval, banda a la que estoy enganchado desde la primera vez que les vi ya hace 10 años y a los que les he visto casi todas las veces que han venido a tocar por aquí.

Y es que si en disco te gustan en directo son geniales. Como suele ser habitual repasan los 4 discos que tienen hasta la fecha, aunque parece que dentro de poco tendrán un quinto disco.

Arrancaron con “Guerra civil”, un autentico trallazo de su primer disco, para seguir con “Mares de cristal”, canción que abría su anterior disco “Estigmas”, donde Txema empezó a demostrar no solo lo gran cantante que es sino lo bien que se desenvuelve en el escenario.

Era momento de recordar su actual disco con “Buscando una señal”, en la que me llamo la atención la gran pegada de su batería y “Mi compasión”, canción que en directo es un himno para no dejar de cantar.

Retomaron su primer disco con esa maravillosa canción que es “Ítaca”, y a petición de algún seguidor recordaron el disco “Estigmas” con ese temazo que es “Mírame”.

Vendaval y Emboque han fraguado una bonita amistad a base de compartir escenario y prueba de ello fue la colaboración de Raúl Emboque en “Prisionero”, tras la cual y también de su último disco sonaría “El condenando”, con un Txema que volvió a dejarnos con la boca abierta.

La sorpresa de la noche vino con la versión que se marcaron del “Hail and kill” de lo americanos Manowar, que hizo las delicias de los metalheads allí presentes.

Desgraciadamente el concierto tocaba a su fin con dos canciones del disco con el que yo los conocí, “Mi otra mitad” del 2005: la preciosa “Santa Compaña” y su tema estrella y con el que me enganche a la banda “Muerte al alba”.

Otra vez lo logró Vendaval; consiguieron que me lo pasase genial y que disfrutase de una hora de una de esas bandas que, inexplicablemente, no son más conocidas.

Emboque no solo jugaban en casa sino que además Raúl estaba metido en la organización de las fiestas; también eran muy amigos de Uco, y que mejor manera que empezar el concierto con una introducción de sus amados Iron Maiden, tras lo cual, y con explosiones desde el escenario, comenzar el concierto con “Caminar”.

La verdad es que se agradece ver a la banda en un escenario en condiciones no como les había tocado en recientes ocasiones; nuevamente interpretaron “Ritual”, que parece haberse asentado en el repertorio de la banda y recuperaron “Al mismo nivel”, que no habían tocado en las anteriores veces que les había visto.

Con “El ganador” revindicaron la única canción inédita de su más reciente “A tempo de Rock”, para seguir con recordando el 15 aniversario de su disco “Déjame entrar” con “Revolución”, la canción que le da titulo, “El último desertor”, que fue una de las sorpresas de la noche y “Se apaga el sol”, que en esta ocasión fue dedicada a Uco.

La actuación de los de Hinojedo iba avanzando sin darnos cuenta y como siempre encandilando a la gente y sobre todo con temazos como “Aníbal”, una de sus mejores canciones, o “El héroe”, pertenecientes ambas al “Voy a por ti”, de la que también sonó la canción que le da titulo.

 Con motivo de este concierto Emboque además de las novedades ya referidas, nos dedicaron una gran sorpresa que, aunque no era la primera vez que lo hacían no deja de ser una maravilla: la versión del “Stairway to Heaven” de los Led Zeppelin, dedicada a todos los seres queridos que los presentes habían perdido recientemente; ni que decir tiene que oír semejante belleza interpretada por tales música no deja de ser sino una maravilla para los oídos. Sin palabras.

No se podían despedir sin interpretar su versión del “Burn” de los Deep Purple, para la cual contaron con la colaboración de Iván de Vendaval a los teclados, que enriqueció de manera brillante la canción.

Así acababa una actuación de Emboque entrañable, en la que echamos de menos “El ojo del huracán” (creo que es la primera vez que les veo desde que la sacaron y no la tocan), pero que a cambio nos depararon sorpresas agradables, en otra actuación sublime de la banda.

Ya era de madrugada cuando comenzaron su actuación Sez-Naus, lo cual hizo que mermara la presencia de gente en la carpa en la que se celebraba el evento.

Pero a grandes males grandes remedios y los de Suances se pusieron a la faena con “Nada tienes”, de la que han editado hace poco un video, “Cuadros” y “Sol”.

Con esto podía ser suficiente para animar nuestros ya cansados cuerpos, pero la banda tiene repertorio para que nos olvidemos del cansancio con canciones como “Todo suma”, “Romper con todo” y “Carroñeros”.

La primera colaboración de la noche vino por partida doble ya que Raúl Emboque y Danny de Granada Goblin subieron a cantar ese temazo que es “Sandy Hook”.

Como ya muchos sabéis la banda acaba de editar hace unos meses “Retales#2” de las que sonaron sus 4 canciones incluidas “El aprendiz” y “Pornonuclear”, para la que contaron, como en el disco, con la colaboración de Paula a las voces rapeadas.

No hay un concierto de Sez-Naus sin su versión del “Killing in the name” de los Rage Against The Machine, para la que volvió a subir a Danny de Granada Goblin, sacando las ultimas fuerzas de los asistentes.

Su actuación acabo con ese himno que es “Crea tu puto mundo”, tras menos de una hora de actuación y pasadas las 3 de la mañana.

Sez-Naus sacaron adelante un buen concierto pese a las horas que eran, pero es que estos chicos lo dan todo siempre. Y así termino esta grañidísima edición del Rock In Hinojedo, que si olvidamos el retraso, fue una edición perfecta con 4 grandes bandas que dieron muy buenas actuaciones.

El año que viene volveré.