Cuando a principios de este año estaba reseñando el disco "Please welcome" de los barceloneses Imperial Jade, no podía dar crédito a lo que mis oídos estaban escuchando, sabía que probablemente iba a ser de lo mejorcito que recibiésemos en todo el 2016, y finalmente así ha sido.
De este modo, es sencillo imaginarse que cuando me enteré de que la banda venía a tocar, a la Sala Black Bird Club de Santander, se me puso una sonrisa de oreja a oreja, y no dudé ni un solo segundo de que era en ese concierto en donde debía estar. Esta cita era complicada, ya que ese mismo día coincidían unas cuantas cosas, algo que es positivo en cuanto al reflejo de que la gente consume cultura, pero también supone un hándicap en muchas ocasiones para las bandas. En cualquier caso, quisieron acompañar a Imperial Jade unas cuantas personas, y eso se materializó finalmente en que hubiese un buen aforo, y también, obviamente, en un ambiente cálido y acogedor.
Sin querer resultar exagerada, recomiendo con los ojos cerrados, a cualquiera que me pregunte, la escucha de ese primer disco de Hardrock de Imperial Jade, realmente asusta que sea una obra primogénita y son un grupazo de los pies a la cabeza. Además, en directo también son bastante recomendables, aunque sí que es cierto que su música tiene unos tintes añejos y pesados, no es el tipo de conciertos a los que suelo acudir. En el bolo tuve la sensación de estar en los años 80, en un ambiente muy diferente al que acostumbro, y también sentí la impresión de estar asistiendo al principio de algo grande. Para mí fue una actuación diferente y especial, algo que sin duda alguna hay que vivir en primera persona.
El "Please Welcome Tour" de Imperial Jade aterrizó en Santander dejándonos una buena muestra de temas de rock clásico, de rock "elegante" y contundente, en forma de canciones como "Time machine", "Satyr", "Highway" o "Camel ryde", por citar algunas de las composiciones que pudimos escuchar aquella noche en vivo y en directo.
No me quiero extender más ya que tampoco tiene mucho sentido repetirse, y como suelen decir: Las cosas claras y el chocolate espeso. Imperial Jade es una de esas bandas que hay que ver en directo sí o sí, te guste más o menos el Hardrock, es indiscutible que son excelentes y que les sobra calidad. Así que la próxima vez que estén cerca de tu ciudad: ¡Vívelo, que no te lo cuenten!.