Interpretó “Hard time Blues”, canción que da título a su actual trabajo, y, tras cambiar de guitarra, siguió en el actual disco con “Down by the river”, con una gran exhibición del gran Javier Vargas, que no importaba mucho que canción interpretase: nos dejaba a todos con la boca abierta.
El propio Javier fue el encargado de presentarnos a Vanesa Harbek, que se situó en el centro del escenario y que sería la encargada, no solo de tocar la guitarra sino de cantar el siguiente tramo de canciones, que arrancó con la versión del “Spoonful” de Willie Dixon.
Desde el principio aquello tomo otro cariz, ya que con ella en escena la gente se animó aún más, entre otras cosas, gracias a las ganas y a lo metida que se la vio en su interpretación de clásicos como el “Ya Ya Ya (Looking for my baby)” de The Nite Riders o el “Rock me baby” del gran B.B. King.
Tras interpretar “Riding high” consiguió ser aclamada por los presentes, lo que la animo aún más a realizar una gran versión del “Hard to Handle” de Otis Redding.
Sin embargo, nadie se olvidaba que ahí estábamos para ver a Javier Vargas y en “I just want to make love to you” de Willie Dixon, el maestro volvió a lucirse.
Nos recordaron que este era el primer concierto del año para la banda, y para tal ocasión rescataron “Blues business”, que hacía mucho que no tocaban, para seguir con “I Got You (I Feel Good)” de James Brown, músico admirado por el guitarra como él mismo nos contó.
El concierto entraba en su recta final, pero antes sonaron “I'm tore down” de Freddie King y un “Hit the Road Jack” de Percy Mayfield, que fue coreada por la gente a estancia de una Vanesa que se la veía muy motivada.
Se despidieron de todos con el “Blues local” de Pappo, interpretada por Luis Mayo y que, como es habitual fue muy bien recibida.
Sin embargo, no se quisieron marchar sin que sonase “Black cat boogie”, y dejarnos a todos con la gran versión del “Love me two times” de los míticos The Doors.
Concluían así casi dos horas de concierto, con una banda que rayo a gran altura como ya pudimos ver el pasado año y que con la presencia en estos conciertos de Vanesa, consiguen enganchar aún más a la gente; luego habrá quien técnicamente pueda valorar más o menos su aportación, pero a mí me gusto su forma de cantar y su presencia escénica.
Como ya dije en la crónica del pasado año, ni me los perdí en esta ocasión ni me los perderé cuando vuelvan, porque ver a la Vargas Blues Band es una maravilla, si te gustan el blues y las guitarras.
¡¡Muy grande!!
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