En una sala But con más aforo del que esperaba para ser un jueves rozando las ocho y media, saltaron a las tablas unos alocados Masked Intruder al ritmo de “The most beautiful girl” con un sonido absolutamente desastroso que afortunadamente pudieron recuperar. En esta ocasión los coloridos encapuchados habían dejado en casa a su guitarrista, Green Intruder, y se trajeron a su amiga Mary de gira en su lugar, cosa que les parecía alegrar en exceso porque ya sabes ¡es una chica!

Además, supieron acompañar temas como “25 for Life”, “I fougth the law” o “I don’t wanna be alone tonight” con la divertida performance de un policía que acabó semidesnudo y pateándose entre el personal. El bloque final vino de la mano de “Stick em up” y “I don’t wanna say goodbay”, demostrando que el pop-punk ñoño y vacilón puede ser un aperitivo perfecto incluso entre semana.

Los chicos de las camisas hawaianas están presentando “Rake it In: Greatest Hits”, que saldrá a la venta el próximo 7 de Abril con Fat Wreck Chords, donde recogen 17 de sus mejores versiones y no todos los días tenemos la suerte de que un grupo americano decida estrenar gira por nuestras tierras.

Y mucho menos si es una super banda de la talla de Me First and the Gimme Gimmes, en la que militan figuras como Joey Cape y Dave Raun (Lagwagon), Scott Shiflett (Face to Face), Spike Slawson (Swingin' Utters -Uke-Hunt) y un Jay Bentley (Bad Religion) que logró que nos olvidáramos de la ausencia del bajista de NOFX, Fat Mike, que suele ser jugador titular en esta liga. Y es que los Me First son un super grupo no solo por contar entre sus filas con jugadores de lujo, incluyendo a los que deja en el banquillo, sino por su capacidad de reinventar temas y de crear trampantojos musicales en los que crees estar escuchando una canción cuando realmente escuchas otra. Por no decir que lo mismo se las cantan en italiano, español, un disco entero en japonés e incluso pueden joderte un bar mitzvah. Una auténtica gozada.

Comenzaron con cariño y “Summertime” (George Gershwin), pero hasta el quinto tema, “All my loving”, no consiguieron enganchar del todo con el público, no sé si fueron los Beatles, los Manolos o los problemas de sonido con los que Shiflett y Cape habían arrancado. Le siguió el clásico caribeño popularizado por Beach Boys, “Sloop John B”, “Danny's Song” de Loggins & Messina (¿de verdad ya han pasado 20 años del “Have a Ball”?) y la fantástica “Take me Home, Country Roads” de John Denver, que dio paso a al bolero “Miénteme” (Armando «Chamaco» Domínguez Borrás) sonando en el Ukelele de Spike Slawson, que no dejó de continuar la broma mexicana previa a su paso por nuestro país.

Tras el pequeño bajón que nos llegó con tanta tranquilidad recuperamos altura con “I believe I can fly” (R. Kelly), tocamos el cielo con “Over de Rainbow” (de la BSO de El Mago de Oz) y desplegamos nuestras alas junto a “Rocket man” (Elton John). A esas alturas la sala no podía dejar de cantar, de bailar o de volar por los aires, beber no mucho, la sala But sigue siendo algo prohibitivo, y eso que se te reseca el gaznate cuando te pasas un concierto cantando clásicos a grito pelado.

Remataron con un encore de auténtico lujo “I will survive” de Gloria Gaynor ¡que se note que somos divas!, “Jolene” (Dolly Parton), “Sweet Caroline” (Neil Diamond) para cerrar con la pastelera End of the Road (Boyz II Men), demostrando que hasta los más punkies tenemos nuestro corazoncito.