Siempre es de agradecer que, locales donde habitualmente no se celebran conciertos, se sumen a esa iniciativa de promover la música en directo y más en lugares tan huérfanos de ellos, como es el área de Torrelavega.

La verdad es que no sabía ni por donde caía el Bar Amable en Viérnoles, así que unos días antes me di una vuelta por la zona para ubicarlo y así poder ir a tiro echo el día del concierto.

La ocasión era más que obligada porque teníamos el placer de ver en directo a dos bandas muy amigas entre si y que daban sus primeros conciertos del año, presentando cambios en las formaciones desde la última vez que les vi.

Antes de hablar del concierto, decir que el local, pese a no ser muy grande, es bastante apto para llevar a cabo conciertos, ya que es bastante cuadrado y con muy buena visión; además el trato de las responsables del local, así como sus razonables precios en la bebida, hacen de él un lugar más que recomendable.

Los primeros en pisar el escenario fueron Sartenazo Cerebral, que celebraban el primer año de su segundo disco “Actividades extraescolares”, y que para esta ocasión contaban con nuevo bajista.

Si la anterior vez que les vi fue con su actual disco recién editado, para esta vez le llevaban más rodado y eso se notó en el peso que dicho disco tuvo en el setlist del mismo.

Tras un empiece en el que recordaron su primer disco con “La repera”, “Neurocausto” y su himno “Typical cachopo”, llegó el turno para “Me estoy ahogando locamente”, de su actual disco y durante el cual se fue momentáneamente la luz.

Ya con todo normalizado, llegó la primera versión de la noche, “Solo otra vez” de Cicatriz, que fue muy bien recibida por los presentes, antes de seguir con otro par de canciones de su primera obra homónima del 2014 con “Tecnológicamente muy superior” y “El cazador cazado”.

Como ya nos anunciaban en su actual disco, “Los punkis tenían razón”, después de la cual nos llevaron de vuelta a su anterior disco con “Rata de dos patas”. A partir de aquí se centraron en su actual trabajo con “Otra canción de amor”, “Explotación adiario SL”, “Con Fe Sionex” y “T.I.B”, una de las más canciones que más gustan de este disco.

Un leve descanso para tomar aire nos llevó a otra de mis favoritas, “Matando el rato”, esa acida critica a los políticos que nos gobiernan, y que fue seguida por “Madreñazo al sistema”.

La segunda versión de la noche fue para la popular “Carne pa la picadora” de La Polla Récords), y que, lógicamente, fue muy celebrada, antes de regresar al anterior disco con “Un día de perros”.
De vuelta a su actual disco, sonó la corta “Comunicado oficial del ministerio de sanidad”, para seguir con “Legítima defensa”, tras la que nos anunciaron que tenían merchán para quien lo quisiera, para seguir con “Nos vemos en NaBarra, de su anterior obra.

Tras la cachonda “Alopecia ter minal”, hicieron su último paso por su anterior obra con “De bar en bar”, antes de despedirse de todos con la versión del “Condenado” de RIP. Cuando ya estaban recogiendo, y a petición popular, interpretaron “Órdago a la grande” a modo de improvisado bis.

Una hora intensa y bien aprovechada por los asturianos que saben cómo hacernos divertir y al mismo tiempo reflexionar.

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No hubo que esperar mucho para ver en las tablas a Los Escapaos, a los que había visto a finales del año pasado, en el que fue su último concierto con su anterior formación y por tanto estaban de estreno esta noche.

¿Y qué mejor forma de debutar para Cholo al bajo y Cristian a la guitarra, que hacerlo con un doblete? Si, así es, esta noche actuaban, después de este concierto, de madrugada en Osorno; cosas que pasan en el mundo de Los Escapaos. Lógicamente, su último disco, “Con la cruz a cuestas”, fue el que tuvo más peso desde que sonaron, tras una intro, “Sisi emperatriz” y “Cicatrizes”.

Un breve recuerdo al pasado nos llevó con “Pecera de cristal” y “Generaciones” al “Piso mierda, luego existo”, del 2014, para retomar a su actual disco con “Yonkiroll”, para la que contaron con la colaboración del Rata de Sartenazo.

Sin dejar su actual disco, siguieron con la popular “Cocidu”, antes de interpretar la primera versión de su actuación, que fue el “Ciutat podrida” de La Banda Trapera Del Rio. Una nueva vuelta a su anterior disco con “Psicólogo listo” y “Duelo al sol”, con “Antídoto”, de su actual trabajo entre medias, sirvió para que la gente se empezase de animar algo más.

Pero si aún había alguien que estuviera quieto, ahí sonó “Guaynais” su particular versión de La Burla, antes de interpretar las canciones que restaban de su actual disco, empezando por la que de la título, “Con la cruz a cuestas”, seguida de “Precios de locura” y “La tradición continuará”, interpretando así todo su nuevo disco salvo una.

Para mi sorpresa y alegría, han recuperado “Enchironao” de su primer disco, que fue seguida de “Pazos”, del mismo disco y cuya intro fue cantada por todos los presentes, antes de recuperar “Futuro”, que estaba en su maqueta “Cinco contra el calvo”, aunque luego fue recuperada para su segundo disco.

Ya en la recta final del concierto sonaron dos temazos de su segundo disco como son “Uno menos” y la muy coreada “Me enamore de una del PP”, para la que Santi tuvo que cambiar de guitarra por la rotura de una cuerda. Su hora de concierto concluyó, como siempre suele ser habitual, con “Siempre oh!”, con la que los de Cabezón daban por concluida su hora de actuación.

Se vio a la banda muy engrasada para ser el primer concierto, y con los nuevos integrantes muy amoldados a la dinámica del grupo. Esperemos que sea así y que Los Escapaos sigan dejándonos conciertos tan buenos como el de esta noche.

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Y con la sensación de habérmelo pasado muy bien, con dos grupos haciendo muy buenas actuaciones y pasándoselo ellos tan bien en grande, me fui del Bar Amable, lugar al que espero volver en poco tiempo, ya que espero que sigan programando música en directo.