Llegamos a la sala con la incógnita de la entrada que nos encontraríamos, Suzio 13 venía de hacer un parón y Rude Pride suele tocar bastante por Madrid, por lo cual no sabíamos el tirón que habría en taquilla, pero lo que está claro es que a la gente le mola lo bueno.

Por una vez tengo que comerme mis palabras en cuanto a que la gente se espera a ver el segundo grupo, y no entra a ver a los primeros, quedo más que claro que este público es fiel, y mucho.

Rude Pride, saltaron al escenario de la sala Caracol con una muy buena entrada y con ganas de que la gente se pegara una buena paliza de cantar y bailar, y a fe que lo consiguieron. Con Rude Pride estamos en uno de esos casos que, si vinieran de Londres o de Manchester, por ejemplo, estaríamos hablando de una banda que llenaría salas a 25 ó 30 pavos sin dudarlo.

El crecimiento de esta formación, la verdad, es que es espectacular, cada vez que los veo, y van tres, lo tengo más claro, ni siquiera algún que otro problema técnico que sufrieron, no consiguieron parar el espectáculo.

Escuchamos temas como, “Crisis sons”, “No trust”, ”Outta my way”, ”No problem”, ”Golden fists” o “Flag on fire”, que no dieron tiempo a que la gente se enfriara ni un segundo, aunque uno de los momentos álgidos fue su buenísima versión del archiconocido “Historia Triste” donde la gente enloqueció con esta canción que para muchos de nosotros es un verdadero himno.

En definitiva, Rude Pride está en boca de muchos y es por méritos propios porque son ,como diría aquel, muy buenos y mucho buenos…

Llegaba el turno de Suzio 13 que hace un tiempo nos dieron el disgusto de anunciar un parón momentáneo, y digo disgusto porque cuando uno se encuentra bandas tan diferentes y buenas, jode mucho perderlas de vista así por así.

Nos traían todos sus temas más conocidos, conscientes de que la gente tenía ganas de volver a disfrutar de ellos, y vaya que lo consiguieron. “Amigos”, “Cobardes”, “No caminaras solo” ,”IV reich”, “La unión hace la fuerza”, “Bonnie & clyde”, “Bailando en mi locura”, son solo unos ejemplos de lo que nos ofrecieron en bastante más de una hora de concierto, tampoco voy a decir cuánto exactamente, porque cuando uno se lo pasa bien, siempre se hace corto.

Lo que está claro es que Suzio 13 vinieron para demostrar que en realidad nunca se fueron. Con un concierto lleno de rabia, buena música y reivindicaciones, Suzio dejó muy claro que por derecho propio, tienen que ser uno de los grupos punteros de este panorama musical.

Si todo el concierto estuvo a una gran altura, los 20 minutos finales, la verdad, es que fueron apoteósicos, acompañados por una excepcional sección de vientos y por las geniales voces de Jessa y Vienna a los coros, el concierto ya se salió de madre. Consiguió poner la Caracol (que por cierto estaba muy cerquita del lleno) a bailar al unisonó, si es que quedaba alguien sin bailar hasta ese momento.

Siento reiterarme, pero es que no puedo decir otra cosa... BIENVENIDOS de nuevo a Suzio 13 porque está claro que un grupo tan bueno no podían dejarnos huérfanos de excelente música.

Espero tener más ocasiones de ver tanto a Rude Pride como a Suzio 13, y si es juntos, el placer será doble. Rude Pride y Suzio 13, nunca caminaréis solos, seguro!!!