Aunque había oído hablar de ellos, recuerdo que fue hace dos años, que también visitaron la sede de la Asociación Cultural Octubre, cuando realmente me fijé en Talco.

Mucha expectación había levantado la visita de los italianos a la ciudad de Torrelavega y eso que mucha gente se enteró a última hora, pero eso no impidió que casi se llenase la nave donde tenía lugar el evento. Era curioso observar entre los presentes a mucha gente poco habitual en otro tipo de conciertos, lo cual siempre es bienvenido, aunque nos gustaría verlos en otros eventos no tan masivos, pero por algo se empieza.

Quien ha visto a Talco en directo sabe que, desde que arranca su actuación, no va a parar de bailar y saltar, y eso pudimos ver nada más salir el sexteto, con una introducción de fondo, mientras saludaban a los presentes y comenzaban con “Tortuga”, una de sus canciones más populares y con la gente entregada de primeras.

Sin tiempo para descansar, siguieron con “Il tempo”, el tema con el que comienza su último disco “Silent Town” del 2015, una canción propicia para botar, unida sin pausa con “L'odore della morte”, tema que abría su primer disco, allá por el 2004, y que provocó tal desfase, que uno de las pantallas de sonidos cayó por el empuje de la gente, afortunadamente sin consecuencias.

El desmadre no paraba, lo cual es lógico con canciones como “Tarantella dell'ultimo bandito”, tras la cual, y después del agradecimiento a los presentes, llegó uno de los momentos más esperados de la noche: el himno al “St. Pauli”, con toda la sala cantando y entregada totalmente.

Nueva vuelta a los orígenes de la banda con “Testamento di un buffone”, con la gente ya sudando por la energía desprendida, para seguir en ese “Combat circus” del 2006 con “Il passo del Caciurdo” y la bailable “La carovana”, una de los temas con los que se dieron a conocer.

El recuerdo a aquel gran jugador que fue Maradona llegó con “La mano de Dios”, para el que contaron con un amigo a los coros, que iría apareciendo sucesivamente durante la velada.

Tras solventar algún problemilla con la batería, siguieron con “La sedia vuota”, nueva revisión de su segundo disco y con toda la gente cantando, antes de que llegase el desmadre con la popular “Bella ciao”.

Una nueva vuelta al pasado con “A la patchanka”, nos trajo con “El Sombra”, perteneciente a su reciente álbum y que fue muy coreada por los presentes.

Era imposible no parar de bailar y de saltar con canciones como “La parabola dei battagghi”, no solo por su música, sino por el buen rollo que trasmite el grupo desde arriba, que parecen divertirse tanto como nosotros abajo.

Tras un mini descanso para tomar aire, siguieron con “Dalla pallida Mirò”, otro de los temazos que están presentes en su último y maravilloso disco, antes despedirse de todos con “Danza dell’autunno rosa”, otro tema de esos que no puedes parar de cantar.

Con la gente pidiendo su vuelta y gritando el conocido vacile a favor de UPyD, la banda regreso con “Corri”, que según pudimos deducir de sus palabras, fue una de las primeras canciones que compusieron como banda hace más de 15 años.

Prosiguieron con “Punta Raisi”, con la gente volviéndose loca, antes de ejecutar esa imprescindible que es “La mia città”, unida como si fuera una con “Ancora”. Se despidieron de todos definitivamente, dejándonos primero con “Neverdad”, con todo el mundo botando, antes de marcharse con “La torre”, en la que se produjo un enorme pogo en la sala.

Y así, con toda la banda despidiéndose desde el escenario, acababan la poco más de hora y cuarto que duró la actuación de los italianos, a los que, si hay que ponerlos alguna pega, es que el concierto se nos hiciese tan corto, no porque tocasen poco, que tienen muchos grandes temas que se quedaron afuera, sino por lo bien que nos lo pasamos.

Uno de los debates que se oían a la salida era si eran mejores Talco o la Banda Bassotti, la verdad es que creo que son dos grupos tan parecidos como diferentes, pero, eso sí, necesarios ambos para trasmitir ciertos mensajes (ahí quizás gane la Banda Bassotti) y hacernos bailar (ahí puede que lo haga Talco); pero como todo es cuestión de gustos y para que escoger si los tenemos a los dos.

Desde luego Talco es una banda que no para de crecer y que en nuestro estado tiene muchos seguidores y, con actuaciones como los de este viernes, se entiende el por qué.

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