La pena, volvió a ser la afluencia, a pesar de que la entrada no estuvo nada mal (para ser un martes, finales de agosto) pero ni mucho menos se llenó como yo esperaba para ver a estas auténticas leyendas. "Buffalo Soldier", "No Woman, No Cry", "Exodus", "Jamming" o "Is This Love" fueron algunos de los temas que sonaron e hicieron bailar a la gente, metiéndonos en una especie de viaje al pasado mezclado con buen rollo que se dejó notar en todo momento.
No quiero dejar pasar la ocasión sin agradecer a la organización y a los responsables de seguridad de la sala, que en todo momento hicieron que nuestro trabajo fuera lo más cómodo posible e incluso dejándonos unos segundos en el lateral del escenario para conseguir pillar a esos músicos que prácticamente no se les veía.
El concierto la verdad es que transcurrió dentro de los parámetros esperados, sin grandes aspavientos ni sorpresas, pero siempre dentro de un sonido y una calidad impresionante, cosa que la gente agradeció muchísimo, ya que la media del publico era lo que reclamaba … buena música y un concierto para disfrutar en tranquilidad y buen ambiente.
La verdad es que fue un concierto muy correcto en todos los aspectos, un concierto de esos que tendremos en la retina y en la memoria años, porque por momentos, el espíritu libre de Bob Marley se dejó ver por el ambiente de la sala acompañado de la fuerza de su león, dándonos un empujón más a poder confiar en la lucha y el amor en este mundo tan deshumanizado.
Todos y cada uno de los presentes salimos de allí con el convencimiento de ser los próximos Buffalo Soldier. |