La M.O.D.A. (La Maravillosa Orquesta del Alcohol), presentó en Bilbao el pasado miércoles 4 de octubre, su nuevo disco, "Salvavida (de las Balas Perdidas)", un nuevo trabajo que aparece tras el descanso merecido de la formación burgalesa que se dio una paliza con su anterior disco "La Primavera del Invierno", que finalizó con una grabación en directo en Madrid por todo lo alto en la Joy Eslava.
 
Con este nuevo trabajo han lanzado una extensa gira por la península, con tres fechas en Madrid en las que han colgado el cartel de entradas agostadas rápidamente, y eso que aún quedan semanas para que pisen la capital.
 
Y mientras tanto, están promocionando el disco por varias Fnacs del país, incluida la de Bilbao, allí nos dirigimos y nos sorprendimos que dos horas antes del comienzo del show había una larga cola que bordeaba y se prolongaba por la Gran Vía de la capital bizkaina, buen síntoma, en Bilbao tienen bastantes seguidores se nota que por aquí y por las inmediaciones han tocado, como hace dos veranos en Santurtzi junto a Morat, o en el Bilbao BBK Live, tampoco nos olvidamos de su paso por las fiestas de Astrabudua o Durango, y varias veces en el Kafe Antzokia.
 
Nuevo camino que abordan con un cambio importante en sus filas con un nuevo guitarrista, que seguramente forme piña con el resto y estos siete músicos de la fría ciudad de Burgos, nos dejen buenos recuerdos durante los años venideros.
 
Nada más salir, el público les recibió con una gran ovación, y había tanta gente que pidieron que el que pudiera, que se sentara para que los de la parte de atrás vieran algo y no colapsaran la Fnac. En total tocaron ocho canciones de su nuevo trabajo, muchas teniendo en cuenta que son once las pistas que le componen, un pequeño set acústico a modo menú degustación, dejando huella y ganas de más, recordad que, en diciembre, los días 8 y 9 estarán en el Kafe Antzokia.

Las primeras canciones que nos presentaron fueron "Mil Demonios" y "La Inmensidad", en el mismo orden que en el inicio del disco, un contraste acústico y calmado que abre fronteras hacia los sonidos de los Balcanes o del chanson, recorriendo territorios de raíces americanas, es decir, de todo un poco. Vemos que han crecido como banda, pero su línea no se rompe, sus melodías son identificables y sus textos enriquecedores, con textos desgarradores y llenos de esperanza.
 
Mostrando una faceta emocional e intimista con "Una Canción para no decir te quiero", o buscando un nuevo himno, y en este disco nos hemos encontrado unos cuantos, como "Héroes del Sábado", que consiguió las primeras palmas del público. "O Naufragar", con el clarinete como protagonista, oscura y desgarradora, y ya finalizando, el público estaba entregado, en ese instante sonó "Los Locos son Ellos", con un folklore tradicional en "Vals de Muchos", volviendo a sus aires festivos en "La Vieja Banda", donde los coros y el ritmo siguen siendo precisos, ya sabéis, morder el polvo o perderlo todo menos el miedo, es constructivo.