The Gratix y The Birra's Terror unieron fuerzas la noche del sábado 7 de octubre en Repélega (Bizkaia) y ante los presentes en el Centro de Música y Artes Escénicas Adimusik, ofrecieron una descarga sonora de calidad y fresca.
Abrieron fuego los alaveses The Gratix que tras un breve periodo de descanso durante el periodo estival, volvían hace escasas semanas a los escenarios para continuar con la presentación de su segundo larga duración.
Todos los presentes en Repélega se llevaron a casa una copia de su "Carretera y manta", un disco que lleva medio año en la calle, del que sonaron canciones como "No habrá piedad", con la que arrancaron su actuación, "En la red", "Ciudad con ley" o "Perdiendo el tiempo" y que fue regalado junto a la entrada del concierto.
De su primera obra no faltaron "Educados", "La perdición" y "No señor". Y así, entre canciones de denuncia y guitarras afiladas llegamos al final de un directo que concluyó con la festiva "Con lo puesto".
The Gratix
Desde Madrid llegaba el trío The Birra's Terror para poner patas arriba la sala. Matrako a las voces y la guitarra, Zurito McLitro al bajo y LeyDi Beer a la batería conectaron rápidamente con el público y la temperatura fue aumentando a medida que el trío iba despachando temas.
Los madrileños se acercaban a Euskadi tras ofrecer una serie de fechas en Marruecos, Austria y Alemania. No era, ni mucho menos, la primera vez que nos visitaban y fueron unos cuantos, los que pese a la gran oferta de conciertos con la que contaba esa noche la provincia de Bizkaia, se decantaron por el loco show de The Birra´s Terror.
Durante su divertida y festiva actuación el trío regaló a los presentes una lluvia de confeti, risas y canciones como "Punk love song", "Fuego", "Copas gratis", "La no birra" y "Estamos todos acusados".
La noche del sábado 7 de octubre no faltó ni la colaboración de Andoni, vocalista de The Gratix en el tema "Pribar con colegas" ni los agradecimientos para todos asistentes. Agradecimientos especiales recibieron el luthier Txelitxe Miguel que obsequió a Matrako con una guitarra-metralleta de cosecha propia y los gestores de Adimusik, quienes a la finalización del directo y como manda la tradición pusieron el broche de oro a la velada ofreciendo un lunch a los presentes.