La M.O.D.A. arrasa allá por donde pasa y en el Kafe Antzokia de Bilbao, donde ofreció dos fechas en las que se agotaron todas las entradas, brindó a los suyos dos grandes conciertos llenos de entrega y pasión.
Tras una primera toma de contacto con el público bilbaíno en la jornada del viernes 8 de diciembre, un día más tarde, el sábado 9, los de Burgos repetían en la capital de Bizkaia y allí estuvimos para contároslo.
La Maravillosa Orquesta del Alcohol o La M.O.D.A, no es sólo una banda de música, es un fenómeno que lleva pegando fuerte desde hace un tiempo y que cuenta sus conciertos por llenos. Han agotado entradas en casi la totalidad de los conciertos ofrecidos hasta la fecha: Burgos, Vigo, Madrid, Barcelona...
El septeto llegaba a Bilbao para presentar las canciones que dan forma a "Salvavida (de las balas perdidas)", su última publicación. Pero aunque las piezas de este último trabajo contaron con gran peso durante la velada, temas de "¿Quién nos va a salvar?" (2013) y "La primavera del invierno" (2015) también fueron protagonistas en un concierto en el que se interpretaron hasta 28 composiciones. Casi una treintena de canciones que sonaron limpias y efectivas ante la presencia de unos activos seguidores que saltaron y bailaron sin descanso.
Los componentes del grupo, que se presentó con cinco músicos al frente y dos más retrasados, no se dirigieron en exceso al público, tan solo unas breves frases les bastaron para conectar con una audiencia entregada al máximo desde la primera nota. Y es que pese a agotarse el papel, el ambiente en la sala fue muy familiar, la conexión con sus seguidores fue íntima y palpable durante todo el espectáculo.
Tras un arranque en el que se interpretaron tres de las nuevas composiciones como son "Mil demonios", "La inmensidad" y "Una canción para no decir te quiero", el grupo de las camisetas blancas de tirantes, retornó a sus inicios para marcarse los temas "Amoxicilina", "Suelo gris", "Disolutos" y "Amanecederos". Canciones más veteranas que los suyos recibieron con delirio.
Con emoción y ensordecedores aplausos fue también la acogida para "1932", canción que dio paso a "¿Quién nos va a salvar?" y "PRMVR", con su parte en euskera cantada sin miedo por David y los suyos. Continuaron de esta manera una actuación prácticamente ininterrumpida y en la que se pudo escuchar casi la totalidad de la discografía de la banda. Tan solo faltaron tres cortes para hacer pleno. |