Después de abrir un bar con su propio nombre, La Pegatina volvió a Madrid el jueves 12 de abril, para presentar su nuevo disco “Ahora o nunca”. Con esta gira, han conseguido marcarse Sold Out para sus conciertos en Bilbao, Madrid, Burgos, Santiago de Compostela, e incluso en Amsterdam, París y Bruselas.
En Madrid la gente esperaba ansiosa en la puerta del teatro, sin llegar a imaginar todas las sorpresas que traían los chicos de La Pegatina.
Tras unas telas muy coloridas, comenzaron la canción de “Heridas de guerra”. Como marca ya muy personal del grupo, nos llenaron a todos de confeti con este principio. Continuaron con “Y volar”, uno de los nuevos temas del disco, que ya se sabía el público de habérsela estudiado en casa, donde destacaron los instrumentos de viento.
Pero no solo escuchamos esa canción, pues tocaron todas las que aparecen en el álbum que regalaron a todos los presentes con la entrada, como: “Dale”, “Stand and fight”, “Solo yo”, “Eh madame”, “La tempestad”, “Algo está pasando” y, sobre todo, la que pone nombre al disco, “Ahora o nunca”.
Algo que tenían pensado para la gira era tocar todos los temas que más habían triunfado durante sus 15 años de trayecto, pero además, siempre buscan innovar sobre el escenario, y dejar a la gente boquiabierta.
Esto lo consiguieron con la canción de “Qué bonito es el amor”, momento en el que aparecieron disfrazados en un cuerpo unido Axel con la trompeta y Ferrán con el bajo y, en otro cuerpo, Miki con la guitarra y la nueva incorporación del grupo, Miguelón, con el trombón, a quien tuvieron el gusto de presentar mientras tocaban “Olivia”. |
En la rueda de prensa nos adelantaron que querían meter un nuevo instrumento, el trombón, pero mayor fue nuestra sorpresa cuando vimos que además de manejar este instrumento, Miguelón también aparecía en varios temas tocando la tuba.
Además, en “El curandero”, salió el acompañante del grupo, Tamu, a bailar breakdance en el medio del escenario, al ritmo de la música.
Por si fuera poco, el grupo venía contando con dos grandes músicos que les acompañaban, por un lado, el violinista Víctor Guadiana, que colaboró en “Amantes de lo ajeno”, además de en “El revulsio”. Por otro lado, llegó al escenario Tuli, quien había colaborado en la creación de la canción “Mama” junto con Adrià, y ambos pudieron presentar su nueva obra.
Este concierto lo dividiría en dos partes, por un lado las canciones más animadas y, por otro lado, las más tranquilas.
Entre las ya nombradas, podemos destacar en las animadas “La voisine” cantada por Romain; “Sonqueson” presentada por Adrià; canciones en catalán como “No som d’aquí” o “Gat Rumberu”; o “Ni chicha ni limoná”, con un solo de Miki.
En las canciones más tranquilas destaca sobre todo las creaciones de Rubén, quien nos cautivó con canciones que todo pudimos cantar de memoria, como “Y se fue” o “Solo yo”. En esta clasificación no pudo faltar el tema de “Alosque”.
Llegando a la recta final de la noche, se pusieron todos detrás de un cartel mientras tocaban “Una mirada”, e iban apareciendo cada uno de los integrantes del grupo cuando se les presentaba, algunos de ellos disfrazados.
El concierto terminó con las míticas canciones de “Maricarmen” y “Lloverá”, en este último tema, Rubén quiso cerrar el bolo tirándose encima del público. |