17 de mayo, otra fecha para recordar en Madrid, Fermín Muguruza volvía a visitar la capital, después de haber estado perseguido ideológicamente durante 14 años. Está claro que los tiempos cambian y que la capital, poco a poco, ha vuelto a dar voz a artistas de diferentes culturas, idiomas e ideologías.

Dentro de toda la oferta de conciertos del Sound Isidro 2018, sin duda este iba a hacer historia y se notaba en el ambiente. Con una propuesta totalmente diferente, Fermín Muguruza acudía junto al dúo electrónico catalán The Suicide Of Western Culture, a reconquistar Madrid y la sensación es que lo consiguió.

El lugar elegido fue la conocida Joy Eslava y ahí fue donde el ex Negu Gorriak y Kortatu presentó su nuevo disco 'B-Map 1917 + 100' (Talka-El Segell, 2017), un recorrido al mapamundi por ciudades que comienzan por B: Berlín, Beirut, Barcelona, Belfast, Bilbao… Un disco que el propio Fermín ha definido como “sonido electrónico bailable del punk, algo ligado al dub y a lo industrial, también a la electro body music que reivindicaban Front 242, Kraftwerk y, en la segunda oleada, Nine Inch Nails”.

La expectación se notaba en el ambiente y la DJ Veinn fue la encargada de ir abriendo boca en el escenario hasta que los dos componentes de The Suicide Of Western Culture hicieron acto de presencia. Los dos solos, acompañados únicamente por imágenes de Miguel de Unamuno y Millán Astray durante su enfrentamiento en la Universidad de Salamanca y un constante “Viva la muerte, abajo la inteligencia”, fue el prólogo a un concierto en el que lo visual iba a jugar un papel muy importante junto a la música.

Tras esa introducción, y sonando la conocida “Txoria Txori” de Mikel Laboa, apareció en el escenario otro de los protagonistas, el guitarra Karlos Osinaga, y a continuación lo hacía Fermín Muguruza con la canción “Barcelona-Sant Andreu”.  Y a partir de aquí comenzó una puesta en escena donde, el cantante se enfrentó al público, defendiendo cada canción y cada propuesta.

El concierto fue avanzando y las canciones se mezclaban con imágenes, declaraciones, raperas y por supuesto breves discursos de Fermín, donde agradecía poder volver a tocar en Madrid y también hubo tiempo para apoyar al rapero Valtonyc poniendo el video del tema “Los Borbones son unos Ladrones”, donde 13 raperos reivindican la libertad de expresión.

El público también pudo disfrutar de temas tan míticos como “Itxoiten” de Negu Gorriak y “El estado de las cosas” de Kortatu, acompañada por imágenes de “La batalla de Argel”, ambos temas coreados con ganas entre todos los que estaban allí.

Fermín Muguruza sigue demostrando que, haga lo que haga, sigue estando en lo más alto de la escena musical. Siempre reivindicativo, siempre contando lo que todo el mundo debe conocer y siempre reclamando lo que él piensa. Hace años en una entrevista con Eduardo Madina, el propio Fermín reconoció que su labor era “la de construir puentes, esas construcciones arquitectónicas que sirven para comunicar dos orillas, que además son los primeros susceptibles de derribo en cualquier conflicto”, y nunca ha dejado de hacerlo.

Gracias a discos como este último que está presentando en diferentes ciudades, a letras con sentimiento y a puestas en escena diferentes que te dejan marcado, Fermín Muguruza nunca dejará indiferente a nadie. Ver como disfruta en directo y como lo da todo en el escenario es un verdadero placer.