Hoy tocaba asistir a Málaga, a la sala Eventual Music para ver el show que nos tenía preparado Max Cavalera y sus Soulfly. Desde muy pronto ya podíamos ver el gran autobús en el que se mueve la banda con su remolque con el apartado técnico; y es que 4 son las ciudades en las que tenían parada en la península: Madrid, Málaga, Alicante y Barcelona. Para acompañar a la banda se ha escogido 2 bandas diferentes para cada ciudad, en nuestro caso disfrutaríamos de los malagueños Verdugo y Chaos Before Gea.

Verdugo serían los primeros en actuar, sobre las 20:55H, y tras una pequeña intro a modo de vídeo, saldrían al escenario. Formando al micro Taruga, Fran y Paco a las guitarras, Cuervo al bajo y David a la batería. La banda ha sacado su primer trabajo de estudio en 2017, y aunque tocaron muy poco tiempo, apenas unos 25 minutos, nos dejaron algunos temas del disco nuevo, como “Hijo de puta”, “Narco” o “Mi Barrio”.

Buen concierto el que ofrecieron, y aunque la sala todavía no estaba con mucha asistencia, debido en parte a que es algo que suele pasar a primera hora, y que también se formaron grandes colas para entrar, y el goteo de entrada era muy lento...la banda ofreció todo lo que tenía, mucha gente de Málaga que los conoces les brindaron un constante apoyo y eso se hizo notar. Imagino que por exigencias de la noche tuvieron que recortar un setlist que a la mayoría del público se le antojó corto. Intentaremos seguirles más la pista y ver la progresión que lleva la banda.

En menos de 20 minutos de espera salen los siguientes en actuar esta noche, también un producto de la tierra Malagueña, Chaos Before Gea, con un disco de estudio muy reciente, Chronos (Mayo-2018); Con Ismael Pérez a los micros, Adrián López y Hernan Jensen a las guitarras,  Damián Schmitt al bajo y por último, a la batería, David Arroyo. Desde el primer momento la banda salió decidida a comerse el escenario, muy activa por toda la tarima, de un lado para otro. Con un repertorio centrado principalmente en su último trabajo, presentaron algunos temas como “The Void”, con el que abrieron el concierto, y que es además la primera canción que encontramos en “Chronos”. “Rebirht”, “Spiritual Awakening”.

El sonido en líneas generales estaba siendo correcto, y aunque en ocasiones se me saturaban el sonido de las guitarras, algo que también me ocurrió en Verdugo, fue correcto la mayoría del tiempo. Ya a estas alturas de la noche la sala había aumentado sustancialmente su asistencia, tal es así que la calor empezaba a ser un poco agobiante, imaginamos que la ventilación de la sala es algo insuficiente.

Para ver a Soulfly tocó esperar un poco más, y fue casi media hora, previamente nos habían explicado que sólo contaríamos con un tema para hacer fotos, y además este sería corto (unos 3 minutos), todo ello instrucciones de la banda y su equipo Road, para colmo la iluminación del escenario durante todo el escenario fue muy muy pobre, lo que el trabajo de imagen se complicó de sobremanera.

La que escribe estas líneas tuvo que salirse en al menos 2 canciones fuera de la sala porque el calor dentro era insoportable y faltaba aire para respirar, y con ello, sufrí varios mareos por bajada de tensión, casualmente no era la única persona fuera de la sala en ese estado; Por desgracia esto es algo más que habitual en casi todas las salas de España, ya sea en Málaga, Sevilla, Alicante o Cáceres... cuando el aforo está rozando el lleno de las salas, los aires acondicionados no son suficientemente potentes en la mayoría de los casos, algo totalmente denunciable, por motivos de salud. Bien, después de esta introducción calurosa, salió Max y los suyos, Marc Rizzo a la guitarra, Mike Leon al bajo, Zyon Cavalera a la batería. Después de echarse una botella de agua por encima, Max comenzó con lo que sería el primer tema de la noche, “Frontlines”, de aquel disco de Soulfly “Dark Ages”(2005). Buen sonido y aunque Max estaba clavado delante del micro, la banda mostraba una actitud dinámica, sobre todo Marc Rizzo, quien lleva gran parte del peso del concierto. La banda pedía al público, entregado por completo, que se animaran para el siguiente tema, toda la tribu preparada para recibir “Prophecy”, y acto seguido “Fire” y “Porrada”.

Las primeras filas al escenario eran una masa en movimiento constante y un poco más atrás, los pogos no paraban de crearse; “Blood fire war hate”, “Rise of the Fallen”  sonaron justo antes de que la banda nos presentara un nuevo tema, “Summoning”, del cual para ser la primera vez que mucho lo escuchábamos, causó gran sensación. A pesar de que es evidentemente que Max no está en su mejor momento, tampoco creo que esté en el peor, hace apenas un año que lo vimos junto a su hermano con el “Retun to Roots” en el Leyendas del Rock, y esta noche se encontraba mucho más dinámico, interactuando más con el público (su público, claro está) y sobretodo, mejor de voz.

“Mars”, “No Hope=No Fear”, “Downstroy” continuaron el concierto de Soulfly, después llegaría “Plata o Plomo” de aquel disco de 2012 “Enslaved”, tema que trata sobre el famoso Narco, hoy puesto de moda, Pablo Escobar, Max pidió la colaboración del público para cantar el estribillo. Con “Tribe” llegaría otro de los momentos esperados de la noche, donde los técnicos sacan los bombos y toda la banda, a ritmo tribal, los toca. Ya para el final del concierto, la banda tenía reservada “Back to the Primitive” y “Babylon” , se iban corriendo del escenario y Max arengaba al público para que pidieran más temas. Estos llegaron, y como es habitual, no dejaron indiferente a nadie, el primero de ellos fue “Policia” de su etapa en Sepultura y el último, a modo despedida “Eye for an Eye”.

Muy buenos conciertos los que nos ofrecieron las 3 bandas; La parte local supo defenderse y dejar muy buenas sensaciones, y los visitantes, Soulfly, creo que cumplieron con las expectativas de la mayoría de los asistentes, incluso superadas seguro en algunos casos. Quizás no pueda hablar tan bien de otros aspectos de la noche, como las largas colas de entradas, que hizo que mucha gente se perdiera parte de la primera banda; Tener que comprar tickets previos para pedir una bebida, y un ticket a parte de 1€ para coger un vaso (posteriormente lo reembolsaban); Y sobre todo, lo que me parece más denunciable, el calor insoportable que había dentro de la sala, miedo me da pensar que el concierto se hubiera celebrado unos días a posterior, donde las temperaturas alcanzaron durante el día 10º más.