La gira 30 Aniversario de los legendarios Attaque 77 aterrizó el pasado miércoles 12 de septiembre en el Gaztetxe del barrio bilbaíno de Zorroza.
El combo argentino días atrás había actuado, ante decenas de entregados paisanos, en Zaragoza, Alicante, Valencia, Madrid y Barcelona, y a su paso por Bilbao estuvo acompañado por los locales Turbofuckers. Banda que tras la incorporación de Mikel (guitarra) y Txilo (batería) a sus filas re debutaba con la nueva formación sobre las tablas.
Los bilbaínos fueron los primeros en actuar. Siempre me ha resultado fácil escribir sobre Turbofuckers: defenderé ante quien sea que los tíos apuestan por un estilo poco valorado en la escena de Bilbao y lo sacan adelante con muchísima actitud y elegancia. Se nota que se lo curran en una banda que se desmarca del punk clásico y que incorpora elementos de hard rock y glam, ya sabéis: chicos de barrio, callejeros y cabrones que no tienen miedo a mostrar esa urgencia sensual que apremia en su último trabajo "Toxic Glam". Calle, labios rojos, dolor, sexo.
En fin, que me centro en el concierto, que me voy y no vuelvo, y aquí hay que responder preguntas. Qué os vais a encontrar en una actuación de Turbofuckers. Pues para empezar, cuatro tíos sobre el escenario. Cuatro, porque este doce de septiembre ha sido el debut con la nueva formación desde que Charly dejara las baquetas (que no la amistad) con la banda, y al que ha sustituido Txilo (Desorden, M.C.D., entre otras). Y ya puestos al cambio, se han atrevido a incorporar a Mikel (B.C Bombs, Deskiziados...) aportando una guitarra más al grupo.
Cómo suenan los “nuevos” Turbofuckers. Muy cañeros y contundentes. Obviamente Charly estaba presente en el sonido de la banda (y entre el público también) pero Txilo le dio su toque personal aportando su vitalidad y nervio. Sin tregua defendieron un repertorio clásico en la banda donde no faltaron "Turbofuckers" para abrir, "The hell is for fuckers", "Amor tóxico", "Lady Infierno", "Mad boys" y para cerrar el tema "Tu novio, tú y yo".
Qué transmite Turbofuckers. Su actitud actual no se diferencia prácticamente en nada de la que tenían cuando eran trío: los principios o valores no varían según las circunstancias, señorxs. Pero sí es cierto que me parecieron más orgullosos de las decisiones que han tomado y de su trabajo, aunque ojo, no confundamos con prepotencia: la cabeza la llevan bien alta y merecidamente, pero son gente humilde que curra, y mucho. También me dio la sensación de que van a seguir sorprendiéndonos por el camino del "haremos lo que queramos", y aquí estaremos, atentxs. Obviamente buscaré una segunda ronda (y tercera, y cuarta...) donde volverlos a ver en directo, a ver cómo ha cuajado todo, pero si me quedo con la impresión de este "re-debut", buen trabajo. |
La noche alcanzó la cumbre cuando los míticos Attaque 77 saltaron al ruedo a las 21:15 horas. Los argentinos fueron recibidos con euforia por una multitud de paisanos que vinieron al gaztetxe de Zorroza para arroparlos y gozar por todo lo alto de su aterrizaje en tierras vascas. Como si de un partido de fútbol se tratase, bastantes camisetas “albicelestes”, y alguna que otra bandera, estuvieron presentes en el público desde el primer momento.
La banda, al galope de “Espadas y Serpientes”, comenzó un repertorio de veintiún temas interpretados en formato cuarteto. Hay que destacar que las riendas de la voz principal las llevó Luciano Scaglione (bajo), como vino haciendo en todas las fechas previas, ya que Mariano Gabriel Martínez no se aventuró a venir para actuar en esta gira estatal. Una pena solo ver en acción a uno de los representantes veteranos de Attaque 77, el batería Leonardo De Cecco. La banda la completaron con dos guitarristas de apoyo con los que de vez en cuando cuentan en directo. Todos, los cuatro, hicieron un gran trabajo en su conjunto.
El concierto fue una verdadera fiesta, con pogos e invasiones de escenario incluidas. Y no es para menos, viejos himnos como “Gil” (Dulce Navidad, 1989) , “Hacelo Por Mi” (El Cielo Puede Esperar, 1990) y “Yo Combatí La Ley” (Todo Está Al Revés, 1994) hicieron regocijarse a todos los presentes en la sala. Aunque sinceramente, consiguieron hacernos disfrutar con cualquiera de sus temas. Con alegría sonó “El Jorobadito”, versión de Los Auténticos Decadentes y el tributo a Fab Four que marcaron con “Beatle”. Y protagonistas fueron las enérgicas puestas en escena de “Chicos Y Perros”, con un tumulto de fans subidos sobre el escenario, y de “No Me Arrepiento De Este Amor”, que contó con la colaboración vocal del gran Pepe Bombs (Turbofuckers) y que sirvió para poner punto final a la velada.
Fue una gozada disfrutar de la leyenda viva del punk clásico sudamericano en su décimo tercer cumpleaños. ¡Que cumplan muchos más! Y que estemos aquí para verlo. |