Parece que hay fechas en que todos los conciertos que quieres ver se juntan el mismo día, lo cual es bueno porque nos demuestra, una vez más, que tenemos una amplia y variada oferta musical en nuestra tierra, pese a quien pese, pero, por otro lado, es un autentico fastidio el tener que perderte conciertos que te hubiera gustado ver.
El concierto que esta noche de sábado iban a dar Last Days of Eden, Airare Nuf y Sechem, estos últimos incorporados en las últimas semanas como sustitución de otra banda, le tenía apuntada en la agenda desde hacía meses y, pese a que surgieron muchos y muy interesantes conciertos para este día, no iba a perderme este concierto por nada, ya que tenía muchas ganas de ver a la banda asturiana en directo, además de a las otras dos bandas, unos ya conocidos, los cántabros Airare Nuf, y otros desconocidos, los madrileños Sechem.
El interés que había despertado el evento esta vez sí que se vio refrendado por una más que importante presencia de gente, que merodeaban ya el Rock Beer The New a la hora indicada para la apertura de puertas, que se retrasó un poco debido a la demora en las pruebas, que motivaron que la de la primera banda en actuar, Sechem, se hiciese ya con una buena presencia de gente.
Tras una complicada prueba de sonido, donde algunos instrumentos dieron bastante guerra, comenzó la actuación de esta banda, formada en el 2010 en Madrid, que está integrada por 7 músicos, Ikena a las voces, Marta Sacri a las flautas, Paolo Andreotti a los teclados y los coros, Pepo Raull y Alex Chacón a las guitarras, Santi Urruela al bajo y Jorge "You" Homobono a la batería, y que están a punto de publicar su primer disco “Disputes with my Ba”, que saldrá a la venta en diciembre y del que muchas de sus canciones fueron interpretadas esta noche.
Comenzaron su actuación con “In search of immmortality”, donde ya dejaron buena muestra de su metal potente y con una importante presencia de sonidos orientales, donde tienen mucha importancia tanto las flautas como las guitarras de 8 cuerdas, que daban mucha más densidad al sonido, sin olvidar el resto de los instrumentos, como pudimos ver en “Mummify me!”, donde pidieron a los presentes que diesen palmas.
Sechem
Tras un buen recibimiento por la concurrencia, se presentaron, no sin antes agradecer a los grupos con lo que estaban compartido escenario, así como a nosotros por nuestra asistencia, disculpándose por el retraso en comenzar, para seguir con “Horus and seth”, donde destacaron las contundentes guitarras y la dulce voz de una vocalista que cobraba protagonismo a medida que iba avanzando la velada, antes de seguir con “Sandstorm”, única canción, de las que tocaron, que no aparecerá en su disco debut, ya que estaba editada en su demo del 2014 “(REN)loaded”, que, junto a su Ep del 2016 “Renaissance of the Ancient Ka”, es lo único que tienen editado hasta la fecha.
No pararon de animarnos y, sobre todo, de disfrutar de su concierto con temas como “The doomed prince”, con ese comienzo tan cañero, antes de empezar a despedirse, tras agradecernos a todos el recibimiento, con “Sanehat”, donde se pudo observar el virtuosismo de sus guitarras, especialmente de Alex Cachón, el último en llegar a esta aventura.
Antes de interpretar el último tema, nos recordaron que tenían un puesto de merchán y que su disco iba a salir antes de acabar el año, terminando con “An epic jouney to Yam”, un tema con ciertos aires folkys pero muy intensa, con le gente aplaudiendo y su vocalista presentando a los miembros de la banda, antes de terminar su breve concierto de poco más de media hora.
El breve pero intenso concierto de Sechem nos dio para descubrir a una banda más que interesante, que se abrió paso pese al sonido, que no era todo lo bueno que debía, sobre todo en algunas zonas de la sala, según nos comentaron, pero ellos supieron sacar el evento adelante contra viento y marea.
Estaros atentos a esta joven banda llamada Sechem, que tiene muy buena pinta y que puede y debe hacerse un hueco en la escena estatal a base de sus buenas canciones, de sus buenos músicos y de su magnífica vocalista y, sobre todo, de ese desparpajo que demostraron sobre las tablas.
Llegaba el turno, tras el pertinente cambio, de los locales Airare Nuf, a los que no había vuelto a ver en directo desde la presentación de su actual disco “Muerte y condena” en el mes de mayo, entre otras motivos porque su batería se lesionó en un brazo y no han tocado durante todo el verano.
Con una intro que apenas se oía, comenzaron su actuación con la canción que da nombra al disco, “Muerte y condena”, marcando lo que sería un amplio repaso a su actual disco, dejando de lado su anteriores obras y sin perder mucho tiempo entre canción y canción, ya que, como, tras saludarnos, nos comentaron antes de “Por lo que pueda pasar...”, no tenían mucho tiempo y tenían que exprimirlo.
Con la gente disfrutando y coreando sus canciones, siguieron con “…pasar a la acción”, con la banda, pese a los problemas que sobre todo tenían en el retorno de su batería, animando aun más desde el escenario, algo que no fue necesario con temas tan queridos por sus seguidores como ese “Sirenas”, que fue el siguiente en sonar y que es un temazo.
Unida a la anterior por la guitarra de Miguel Cuevas llegó “Mañana al amanecer”, otro de esos grandes himnos que forman parte del citado disco, uno de los que más me han gustado de este año, para, tras confesar que no se oían bien arriba, seguir con “No quiero verte sufrir”, que dedicaron a todas las alamas perdidas, un tema muy coreado por buena parte de la concurrencia.
Airare Nuf
Como ya nos habían advertido, no les quedaba mucho tiempo, por lo que comenzaron a despedirse con esa maravilla que es “Triste final”, un medio tiempo que evoca lo que puede provocar nuestra frustración, para continuar con “Los buenos tiempos no vendrán”, con la que se despidieron, no sin antes dejarnos con su ya clásica versión del “Living after midnight” de los Judas Priest, con Miguel Cuevas a las voces, arropado a los coros por un Moisés que estuvo brillante durante toda la actuación, como también lo estuvieron, José a la batería, Chisco al bajo, el citado Miguel Cuevas a la guitarra y Miguelín a la otra guitarra.
Y así, tras poco más o menos 40 minutos, quizás la actuación más corta que he visto de Airare Nuf, terminó el concierto de una banda que supo sacar adelante el evento, pese a los problemas técnicos, y que han editado un disco este año tan bueno que estas nuevas canciones han sustituido a sus clásicos, algo que dice mucho del momento de la forma.
Si no pasa nada, dentro de un mes y medio volveremos a ver a la banda, que, repito una vez más, está en el mejor momento de sus 18 años de trayectoria.
Y llegaba el momento de Last Days of Eden, banda asturiana que se formó hace 6 años por Dani, cantante de Darksun, entre otras bandas en las que ha militado, y que aquí es guitarra, junto a la maravillosa Lady Any, una magnifica vocalista con unas cualidades realmente increíbles para la música que practican, un power metal sinfónico con una clara vocación internacional.
Este grupo, que cuenta desde sus inicios con el magistral Adrián Huelga al bajo, también en Darksun y Juan Gómez a los teclados, ha sido completado, tras varios cambios, con Leo Duarte a la batería, miembro también de Alquimia, y Sara Ember al violín, que entraron el pasado año, incorporándose este mismo Andrea Joglar a la gaita y vientos, que es la formación que se presentó aquí esta noche.
La banda acaba de publicar su tercer disco, “Chrysalis”, base de lo que fue su repertorio, y cuya portada presidió la sala durante toda la noche en forma de telón tras la batería, sucesor de “Ride the world” del 2015 y de su anterior “Traxel Mör”, publicado el pasado año y que era una revisión en asturiano y con un toque más folk de su primer disco.
Nada más comenzar su concierto con “Dead man's tale”, de su actual disco, ya nos dimos cuenta de que el sonido era mucho mejor, gracias a que la banda contaba con un técnico propio, y de que tienen un nivel impresionante en su conjunto, con una vocalista que nos parecía llevar a un mundo mágico con su fabulosa voz.
Tras saludarnos Dani, la banda siguió con otro tema de su nuevo disco como es esa maravillosa “The roots of life”, para recuperar “Here come the wolves”, de su primer disco, en la que se empeñaron en hacernos gritar y donde Andrea le dio un aire más folk al sonido de la banda.
De vuelta a su nueva obra, siguieron con “Heading for the sun”, con esos teclados que envolvieron toda la sala y una potente sección rítmica, siendo un tema muy festivo, tras el que dijeron mostrarse muy a gusto, y contarnos la historia del cuenta cuentos en “The storyteller”, otro tema del actual disco.
Reconocieron que para ellos “Queen of the north”, de su primer disco, era un tema muy especial, que comenzó con ese bello sonido de gaita, siendo un tema muy pegadizo, como también lo es “Falling in the deep”, un tema que ha sido primer video single de su nuevo disco y que es una buena muestra de la parte más melódica de la banda.
Sin dejar el nuevo disco, continuaron con “The wanderer”, otro tema pegadizo y muy coreable, con ese aire festivo que su toque folk impregna a la canción, para, tras recordarnos que tenían un puesto de merchán para adquirir diferente material, seguir con “Invincible”, el que fue single de su primer disco, con un muy buen solo de guitarra de Dani.
Last Days of Eden
Sin dejar su disco debut, siguieron con “Bring me the night”, con una potente sección rítmica, gracias a un Adrian que estuvo sensacional toda lo noche, como también lo estuvo Leo a la batería y el resto de la banda, para continuar repasando su opera prima con “Brothers in arms”, un tema muy especial para ellos y que habla sobre la batalla de Covadonga, con Dani y Sara, colosal toda la noche al violín, bajando a tocar entre el público que estaba disfrutando a tope con la actuación.
Llegaba el momento de empezar a despedirse, pero aun quedaban varios temas por tocar, comenzando por ese “Forevermore”, que abría su nuevo disco, en el que Andrea se ausentó y donde tanto Sara al violín como Juan al teclado cobraron mucho protagonismo, siendo un tema muy pegadizo, y con Lady Any envolviéndonos con su gran voz.
Tras solicitar la presencia de Andrea, interpretaron “The piper's call”, un tema de su primer disco, con un aire más folk pero muy pegadiza, para despedirse definitivamente como empezó esta aventura con “Paradise”, también de su primera obra, que sirvió además como presentación de los miembros de la banda, antes de concluir su actuación de entorno a una hora.
La verdad es que sin palabras nos dejaron Last Days of Eden, una banda con una calidad y una canciones que, sin duda, les hará llegar muy lejos porque lo vivido esta noche en el New es de los mejores conciertos que han pasado por la mencionada sala en mucho tiempo.
Reconozco que tenía miedo a que la banda no supiese trasladar su gran trabajo en estudio a los directos y la verdad es que no hay que poner ninguna pega a una banda que sonó fantástica, con una compenetración y una clase realmente difícil de igualar.
Si todo es como debe ser, la próxima visita a Cantabria de Last Days of Eden será a una sala más grande, porque la proyección de la misma es muy muy grande.
Y así, todavía a una hora razonable pese al retraso inicial, marchamos de la Rock Beer The New, tras haber disfrutado de 3 conciertazos a cargo de Airare Nuf, que siguen en un excelente momento de forma, de Sechem, que estoy seguro van a dar mucho que hablar con su primer disco, y de Last Days of Eden, que tienen que estar entre los grandes nombres del power metalera sinfónica, no solo dentro de la escena estatal sino de la escena internacional.
Por fin pudimos comprobar que algunos seguidores al Heavy Metal y similares quedan en Cantabria, aunque a veces no los veamos por los conciertos, aunque también hubo amplia presencia de gente de otras regiones.
20/10/2018 
Txutxy Cano 
Rock Beer The New, Santander, Cantabria
