Como muchas otras cosas, vemos que, desde hace unos años, el mes de diciembre, generalmente de pocos conciertos debido a las fiestas, cenas de empresa y demás, va llenando sus días de conciertos más que interesantes, lo que siempre es gratificante para los que queremos seguir disfrutando de ellos en estas fechas, siempre que las obligaciones nos lo permitan.

Este 15 de diciembre, la sala Black Bird nos tenía preparado un exquisito menú con los cántabros Bifrost, banda difícil de ver en directo pero que este año era la segunda vez que los veía, y los valencianos Noah Histeria, formación de la que había oído hablar muy bien, aunque no los tenía muy seguidos; y todo ello por el simbólico precio de 6€.

Con estas dos delicatesen en el menú y a un precio menor que el de un menú diario, solo faltaba que hubiera un número importante de comensales que se acercasen a disfrutar de estos manjares; lo cierto es que, aunque la gente se hizo la remolona, al final hubo un número más que importante de espectadores, con mucha presencia de músicos de otras bandas cántabras, lo cual siempre es de agradecer.

Los primeros en salir eran los locales Bifrost, banda que cuenta desde hace poco más de un año cono David a los parches, lo que parece haber sido un incentivo para que la actividad de la banda se reactive, y, como pudimos ver hace unos meses, hayan compuesto ya canciones nuevas, que, esperemos, salgan en un nuevo disco.

Precisamente con un tema nuevo, “When it rains”, iniciaron su actuación, una composición muy elaborada, como suele ser habitual en la banda, con un gran solo en la parte central de Ovi, cantante además de guitarrista, y finiquitada de manera magistral por su otro guitarra Fonso.

Unida a la anterior, recuperaron “Web of lies”, la canción con la que se iniciaba su Ep de hace 11 años “Moving on” y donde tanto la sección rítmica, completada por un José realmente muy solvente durante toda la noche, como las guitarras, simplemente incendiarias, dejaron claro que estábamos ante un conciertazo.

Tras saludarnos y agradecernos nuestra presencia, nos llevaron hasta el 2011, fecha en que se publicó su único disco, “Freedom”, y que contenía piezas como los thrash metalera, sobre todo al principio, “Hurt me Again”, un temazo mayúsculo, con una ejecución soberbia y que dejó un resultado que nos dejó a todos maravillados. 

Otro tema nuevo es “End of the world”, en el que nos anunciaron que el fin de mundo puede estar cerca, un tema contundente y pesado,  muy cañero y con una gran labor a la batería de David. Realmente los temas nuevos vienen pegando fuerte y sólo hace que alimentar nuestro hambre de más novedades.

Tras anunciar que luego venían Noah Histeria, a los que aconsejaban que viésemos, siguieron con la mítica “Sunrise”, tema de apertura de su, hasta el momento, único disco de larga duración, que sonó genial, y es que, aunque parezca reincidente, la actuación estaba siendo espectacular, muy por encima de la vista meses atrás.

Un poco más atrás en el tiempo se fueron para interpretar “Ashes”, presente en su Ep, un tema algo más relajado, pero con mucha clase y con un brillante final, muy intenso y con una exhibición de todos los músicos, sin olvidar la gran labor de Ovi a la voz.

El último tema nuevo que nos interpretaron habla sobre la corrupción, como ellos mismos nos dijeron, siendo éste “Corruption we pay”, un auténtico cañonazo, que contó con un gran duelo de guitarras al final del tema y es que vaya dos guitarras que tiene la banda.

Llegaba el momento de la sorpresa de la noche que llegó en forma de colaboración con la presencia de Marta Rocanrol, que subió a cantar con la banda la versión del “I wanna be somebody” de los W.A.S.P., una versión que les quedó genial, sobre todo por el magnetismo y el toque único que le dio la invitada de esta noche. Sensacional.

Pero, por desgracia, todo tiene su fin, y la banda no quiso marcharse sin agradecer a Chena y al Black Bird las facilidades dadas y a todos nosotros que hubiéramos asistidos, dejándonos con “Faceless”, presente ya en su segunda maqueta del 2004 y en donde David se ensañó con la batería, que no paraba de moverse a cada golpe que daba, poniendo así punto y final a su hora de actuación.

No quiero repetir lo que ya he venido diciendo durante esta crónica, pero es que fue magnífica la actuación que dieron los cántabros, demostrando que han vuelto con mucha fuerza y, esperemos, que para mucho tiempo

Uno de los mejores conciertos que he visto este año y que demuestra el altísimo nivel que tiene esta banda, compuesta por unos músicos realmente sublimes.

www.facebook.com/bifrostcantabria

Tocar después de Bifrost no es tarea fácil y más si se han marcado un concierto como el de esta noche, pero la gente de Noah Histeria, no tenían miedo a nada y allí estaban para presentar su propuesta Doc a la voz, Álex a la guitarra, Javi a los teclados, Salva al bajo y Daniel a la batería.

Esta banda, procedente de Xátiva, llevan aproximadamente 6 años en activo, en los que han publicado un EP, llamado como la banda en el 2014, y su disco debut, “Hautefaye”, del pasado año, que venían a presentar, después de haber recogido magnificas críticas tanto del disco como del directo, por lo que había muchas ganas por ver su propuesta.

Y comenzaron su actuación, tras presentarse, recordando la canción con la que abrían su Ep, “Fui rey”, un tema muy relajado en su inicio, pero en el que luego empezaron a darle caña, y, cuando nos estábamos metiendo en su mundo, empezaron a surgir unos problemas con el micrófono que deslucieron la ejecución de la pieza.  

Una vez solventados estos problemas, con el cambio del cable del micro, siguieron en el citado Ep con “Noah”, un tema realmente hipnotizante y que estaba sonando de manera genial, hasta que, para colmo de mala suerte, se rompió el parche de la caja de la batería, acabando la canción como buenamente pudieron.

David de Bifrost les cedió su caja de la batería para que pudieran seguir con el bolo, con Doc, su cantante, diciendo aquello de “lo que no nos pase hoy”, para luego saludar  a Bifrost, agradecernos nuestra presencia y empezar el repaso de su disco con el tema que le daba nombre, “Hautefaye”, completando, ahora sí, el primer corte sin contratiempos, una canción donde nos mostraron su personal estilo de música, partiendo del rock y metal progresivo, pero sin obviar matices de otros estilos.

Llegaba el momento de “43 días Parte I”, mucho más intensa que los temas precedentes, pero sin olvidar esos contraste que hacen muy especial el sonido de la banda, con todos sus músicos mostrando su perfecta compenetración y que fue enlazada con “43 días Parte II”, en la que nos llevaron por parajes próximos al jazz, refrendando la gran calidad de su propuesta. Realmente un momento muy especial del concierto.

Nos invitaron a pasar por su puesto de merchán, mientras daban paso a la intro “Elah” que precede a “Djemil”, el siguiente tema en sonar, con un Doc magistral durante toda la actuación, cautivándonos con su estilo de cantar y esa gesticulación que da aun más énfasis a lo que nos quiere trasmitir con las letras, mientras los teclados y  la guitarra nos llevan a su mundo, sin olvidar esa magnífica sección rítmica que completa una gran banda.

Nos pidieron acercarnos un poco más, antes de recordar otro tema de su Ep, concretamente, “Que no te escondes”, otro de esos temas donde nos regalan muchos matices, en una música que es  interpretada con mucha delicadeza, mostrando que tienen claro lo que nos quieren mostrar, y, bajo mi opinión, intentando que sus conciertos sean como una especie de experiencia casi mística.

De vuelta a su disco del pasado año, llegaba el turno de “Shiro”, una extensa pieza que cierra el mismo, con un mágico comienzo, mostrando el tema muchos y variados matices, remarcando aun más la cantidad de recursos de los que la banda tira, para dotar a su música de un encanto realmente único, con todos los músicos desatándose en esta pieza, igual que Doc que nos siguió atrayendo con su voz.

El tiempo del concierto iba terminando y se despidieron de todos nosotros , tras mostrarse encantados de haber estado aquí y muy agradecidos de nuestra presencia, pidiéndonos que diésemos un paso más para acercarnos a ellos y dejarnos con el último tema que quedaba por tocar de su disco, “Coloso”, una también muy extensa pieza, y que, personalmente, fue la que más me gustó , con un magistral, como toda la noche, Javi a los teclados, que nos dio una lección de cómo tocar los teclados, pero no por ellos hemos de desmerecer la gran aportación de sus compañeros, brillantes toda la noche, concluyendo así su actuación de más o menos una hora de duración.

Personalmente, y pese a los problemas que tuvieron en el inicio, me parecieron geniales los chicos de Noah Histeria, una banda que apenas conocía hasta días atrás, pero que mostraron que son una magnifica formación, la cual, no sólo hace grandes discos, sino que, sobre todo, saben mostrar esas canciones en directo con mucha solvencia, como pudimos ver esta noche.

Sin duda, pocas bandas habrá en el estado que combinen tantos matices musicales y tantos contraste, consiguiendo que todo ello case de maravilla; una de las bandas con más proyección que tenemos y que deberían ser conocidos por un público más amplio, pese a que no es música para todos los gustos por su complejidad.

Recomendado para todo aquel que disfrute con la música sin ponerse límites.

noahhisteria.com
www.facebook.com/noah.histeria
noah-histeria.bandcamp.com
www.youtube.com/user/noahhisteria

Y así, tras charlar con unos cuantos amigos y amigas que estaban allí presentes, me fui del Black Bird, tras esta gran noche de música en directo, con dos grandes bandas que nos hicieron vibrar con sus propuestas y mostrando, unos el porqué son considerados como una de las mejores bandas de Cantabria y otros que, como venimos diciendo hace tiempo, a poco que se escarbe, hay bandas increíble por todo el estado y de todos los estilos y Noah Histeria son una de las que más pueden dar que hablar en poco tiempo.