"Viaje sin Retorno", es el segundo disco del músico de Reus, El Toubab (Jaime Blanc), que tras un año de continuo movimiento, nos llega a redacción. Toubab es el término que se utiliza en Senegal para nombrar a un "blanco" europeo, aparte es el alter ego de Jaume Blanc, músico-viajero enamorado de dicho país y de sus gentes, que tomó tal nombre haciendo un juego de palabras son su apellido, Blanc.
Un disco de 10 canciones que nos invitan a realizar un suculento viaje por varias culturas de todo el mundo, un conjunto de temas variopintos fruto de encuentro con otras tierras que hacen fraguar un disco cuyas directrices de melodía y sentimientos florecen en cada nota.
Colección de medios tiempos bajo una propuesta sosegada de carácter emocional, tirando de recuerdos y viajes pasados, de este modo abre la escucha "La Noche de un adiós", donde se encuentran los ritmos rockeros y melódicos del disco, además de ser la elegida para presentar su último videoclip.
Otras se alinean hacia otros ritmos más fusionados, "Amaneciendo y Soñando", un cúmulo de sensaciones personales que describen sus viajes, con guitarras acústica y mucha humildad. "Mil Horizontes", donde nos encontramos una estrofa en euskera mientras define la ruta de viaje que le llevó a mostrar su música a Latinoamérica.
"Les Diré Que Pido Paz", sumergida en buenos riffs de guitarra con un mensaje de paz y libertad. "Cristales en el Corazón" vuelve a mostrarnos la faceta más melancólica del artista, donde suspira anhelos de amor verdadero y pasional, un tema adornado por esa flauta travesera que enloquece de sentimiento. Canciones que fueron grabadas con la ayuda de diferentes músicos, por ejemplo, vemos los coros de Dai, Baren e Isma (Extracto de Lupulo), Toni Urbano (Leño), Jordi Mena (Bunbury) o Javi Chispes, entre una larga lista de invitados.
"Contraley" es una versión de los mexicanos Real de Cartoce, alegre y optimista, un medio tiempo de guitarras acústicas y encuentro de las voces de El Toubab y Kandi Alvarez. "Tabasqui" es variopinto, envuelto en sonidos africanos, un claro ejemplo de las diversas culturas que nos encontramos en este trabajo.
Sutiles melodías y múltiples adornos, en un disco imprescindible si quieres oír algo distinto, como las aportaciones al saxofón en el tema "Labios de Fresa" o los buenos momentos que nos dejan las guitarras en "De Noches y Noches sin Dormir", y para terminar, un tema en catalán "Una Tarda D`Agost".
El Toubab, un músico soñador, viajero y capaz de describir y mostrar sus vivencias en música, con un suculento y variado talento para interpretar notas, enriquecerlas y mostrarlas, un don brillante, sin duda.