¡Dando el paso definitivo que les posicione en el escalafón que se merecen!
 
Hay miedos que paralizan, impidiéndonos avanzar en la mayoría de las facetas de nuestra vida, dominadores fuertes de pensamientos que van construyendo muros a nuestro alrededor, apartándonos de los demás; y encarcelándonos a nosotros mismos en una jaula emocional, torciendo el curso normal de nuestras acciones y minimizando nuestra propia identidad y capacidad. Barreras mentales que nos imposibilitan hacer lo que queremos y seguir avanzando a nivel personal. El cuarto trabajo, de larga duración, de los catalanes Regresión "Prisioneros" constituye un llamado a romper las malditas cadenas que nos asfixian (La inseguridad emocional, baja autoestima o la incerteza sobre el futuro...), a luchar por la verdadera libertad del individuo, eliminando aquellos obstáculos sin sentido que nosotros mismos nos hemos impuesto, tareas aburridas que forman parte de nuestra cotidianidad y abusos de poder que están atentando contra la dignidad, integridad física, sexual, psicológica o social de las personas; y es que lo que peor se puede hacer en esta vida para uno mismo es ser prisionero de sus propios miedos.

Se trata de un disco trabajado a conciencia, no solo buscando una colección de temas, con temas mucho más sueltos y distintos entre sí, pero manteniéndose la raíz clásica en cuanto a sonido de una banda de trayectoria, poniendo en la balanza la justa medida de melodía, electricidad, sentimiento y clasicismo para que el equilibrio sea total. Desde el mismo título del álbum ya tenemos una declaración de intenciones "Todos somos prisioneros de situaciones o circunstancias que no podemos cambiar y nos superan", que nos avisa de lo que nos espera., canciones que van describiendo situaciones en las que uno puede sentirse atrapado como un pájaro enjaulado, sin libertad, primando una cierta heterogeneidad (bien entendida) entre ellas, respaldada por un labor muy bien lograda sobre las bases, desde la exquisitez del hard rock de vieja escuela hasta la ligereza de un heavy metal más standard. La personalidad de la voz de Pedro Guijarro por supuesto sigue siendo uno de los aspectos que les distingue, una capacidad de transmisión pura que adquiere dimensiones espectaculares en "Déjame Soñar" o "El Knaya", con una profundidad en el mensaje que perfectamente se aúna con la música.

Simplemente tienes que dejarte llevar por el buen trabajo desempeñado en las guitarras, en ritmos y en voces para degustar unas canciones que nos muestra a un grupo a pecho descubierto, dispuesto a entregarse en lo que hacen. Los músicos han sabido mantener la personalidad conseguida, sin anclarse, buscando dar un paso adelante a nivel de madurez compositiva, basta con escuchar "5 de Noviembre" para cerciorarse de ello, un mayor juego de ritmos y riffs. Una canción inspirada en el cómic "V de Vendetta", sobre un revolucionario católico inglés, Guy Fawkes, cuya sed de venganza fue la de intentar poner una bomba en el dictatorial parlamento británico. La doble vertiente del grupo (Rock duro/Heavy metal) se aprecia muy nítidamente en la siguiente: "Corre, Escondete!", La lucha por el poder es encarnizada, saliiéndose por completo de tópicos y usando pinceladas bien distintas para enriquecer el resultado final.

Se endurece el sonido en "Dr Muerte", con un arranque de cambios de ritmo rápidos antes de que entre la voz, contando con un estribillo lleno de fuerza y unos acertados arreglos de teclado que arropan y envuelven unos riffs de lo más ochenteros, reivindicando lo mal que funciona todo en los hospitales con el tema de los recortes. Con tal cantidad de detalles que apreciar el disco no deja de ser potente, encaminándose a cañonazos como los de "No Nos Van A Parar" , un tema de hard rock directo y guitarrero, y "Cautivo" que es una composición de heavy rock ochentero, sin más miramientos. Las guitarras caen sobre nosotros en cascada en la nueva adaptación que han hecho del tema "Estrellas Del Rock", enlazando potentes riffs y convirtiéndose en uno de los temas más elaborados del disco, pero antes de eso nuevas credenciales que vuelven a certificar que en el apartado netamente musical no hay lugar a huecos en blanco, espectaculares sonidos A.O.R. En "Voces" y "Llévame Contigo" que transcurre en un medio tiempo potente, con un estribillo de sonoridad celestial.

Definitivamente estamos ante un disco rompedor, nada superficial, apreciándose la espontaneidad en dejar fluir sentimientos no forzados, con derroche de facultades y supurando desprecio hacia los manipuladores y los que juegan con nuestros destinos. Siguen creciendo a ver quién se atreve a pillarlos. Tan apetecibles como un chupito de buen bourbon