Es momento de levantar nuestra voz, de defender la libertad de expresión, el diálogo para resolver conflictos, de exigir la igualdad de oportunidades, de combatir el negocio del militarismo, el nacionalismo fanático de la banderita y el himno; y sobre todo de empezar a distinguir entre propaganda y realidad, para saber quienes son de verdad los enemigos.
"Imperfecte", el segundo trabajo de los catalanes Guspira es todo eso, una sobredosis de actitud combativa, coherente y efectiva, para unos tiempos que lo están pidiendo a gritos. Una colección de canciones de ritmo vertiginoso y letras incendiarias, con coros bastante melódicos, que motivan a ser eternos inconformistas, caminando sin miedos hacia la libertad, a mejorar la realidad en que vivimos, a través de un movimiento social espontáneo, de carácter violento que acabe definitivamente con todas las injusticias que acontecen a diario (La falta de libertades, el desempleo, la ausencia de futuro...).
Encontrarnos de lleno con un himno directo de punk rock que denota influencias de NOFX, Good Riddance, No Use For a Name, Blink 182 o Anti-Flag, como es "Penjant d´un fil", rápido y conciso, es la mejor forma de recuperar viejas sensaciones que con ellos vivimos hace unos años en "Manual per la Victòria". Una llamada frontal y explícita a la rebelión y la conciencia, para plantarle cara al mayor enemigo de la libertad y la inteligencia. Unas reivindicaciones libertarias que encuentran el tono adecuado en una instrumentación de ritmos acelerados que abastecen de énfasis a lo que transmiten las letras, tirando del carro mientras la voz va dentro, algo monocorde. Aunque le sobra linealidad al disco así como algunos clichés del género, han logrado dejar clara su postura crítica ante la sociedad en la que vivimos, una coherencia arrolladora entre el mensaje que quieren transmitir y los sonidos anárquicos totalmente estructurados, sin florituras ni rodeos innecesarios, que desprenden, cumpliendo bien su misión de dejarse llevar por el desmadre punk, los cuatro acordes bien puestos y la impericia musical en beneficio de la energía, contra la hipocresía que nos rodea. Crudos resultan "Autodestrucció" , "Qui Vigila al Vigilant" o "Mai Etern", en cuyas melodías vocales podemos encontrar un sentimiento desgarrador "La revolución empieza por uno mismo".
Tampoco faltan las críticas inteligentes al bipartidismo, las patrañas y mentiras de todo tipo de los políticos, en "Mentides de Verita", "Qui Vigila al Vigilant" o "Bipartidistes", en la cual colabora Arnau, vocalista de la banda Ebri Knight, una importantísima aportación para acabar llegando a la sensación requerida. A pesar de no complicarse la vida en busca de una nueva medicina para su propuesta, no dejan la oportunidad de sacar un mayor brillo a las guitarras y proveer brisa fresca a las melodías, similar a la preparación de una chuleta de vaca asada a la parrilla, dorada en todas sus caras y con un sabor inigualable, manteniéndose afines a la crudeza de una música que rezuma calle siempre con esa base de fuertes guitarras y potentes baterías, como se aprecia en "El Noi Punk" o "T`extranyo", mensajes dispuestos a plantar batalla hasta la victoria, para no tapar nuestros propios ojos ante lo que tenemos a la vista. Mantente alerta, tú eres el siguiente objetivo