Una de las enormes potencialidades que tiene la música es la capacidad de sorprenderte, de jugar con tus emociones, con tu estado de ánimo y hasta con tu particular sentido del humor. A mí, concretamente, una de las cosas que más me gusta de poder disfrutar de las melodías de una o de mil bandas, es el descubrir a grupos como The Punzones. Cuando te llega un disco como el suyo, como ese "Rápido", es cuando se enciende la chispa de la mecha, es entonces cuando la hoguera comienza a arder, es entonces cuando llega la magia y todo cobra sentido. Las personas que escuchamos muchos grupos necesitamos como el comer que haya bandas como The Punzones, pues son un oasis en medio del desierto, como una ducha después de un duro día de trabajo o como esas ansiadas vacaciones que tardan un año en llegar y se pasan en 2 segundos. Son necesarios para nosotros y para cualquier amante de la música.
 
The Punzones nos presentan su primer disco de estudio, un trabajo compuesto por 10 canciones y que como ya he comentado, llevan por título "Rápido". Salta a la vista la solidez de este grupo madrileño, que ya llevan unos cuantos añitos juntos. No sé si habrán hecho cosas en otras formaciones o no, pero está claro que lo que arroja este primer disco es contundencia, experiencia, calidad y un gusto exquisito por las cosas bien hechas. Sorprende tanto que sea su primera incursión musical como sorprende la imagen de un tigre blanco cuando uno lo disfruta por primera vez.

Como suelo comentar en las mejores ocasiones, porque me gusta mucho esa frase, este "Rápido" es un disco que pone de buen humor. La capacidad de The Punzones para cambiar de registro, sin resultar bruscos, para aunar diferentes ritmos, y para crear distintas atmósferas, es envidiable. Es sin duda alguna lo más sobresaliente de su disco y algo que pocas veces he podido apreciar. La plasticidad de la voz de Fernando Punzón y la capacidad de adaptación de los músicos que le acompañan son asombrosas. Todo ello consigue que tengamos ante nosotros una banda muy polifacética y altamente suculenta.
 
Estos madrileños saben nadar como pez en el agua en diferentes ritmos y nos dejan canciones más melódicas, otras más duras, hasta algo metaleras diría yo, otras de un rock duro y pesado, y otras donde inundan las letras con música Rockabilly o con Rock & Roll de los años 70. En cualquier ámbito y en todas las ocasiones despiertan la lujuria sonora, provocando unas ganas irrefrenables de verles en directo.
 
Como canciones más notables se pueden escoger muchas y muy variadas, como por ejemplo "El palo", "A santo de qué", el tema homónimo al disco, "El lobo" o "Una y nos vamos".
 
No hace falta ser Albert Einstein para darse cuenta de que The Punzones brillan con luz propia, y más bien pronto que tarde se harán un hueco en el panorama musical. No perdáis la oportunidad de verles en directo.
 
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