Allá por finales del año 2013 tuve mi primer contacto con Death & Legacy, cuando los vi en directo en Comillas abriendo para Angelus Apatrida y más grupos. Ya entonces me parecieron una banda muy interesante, con una propuesta a medio camino entre el Heavy y el Death Metal melódico y con una vocalista al frente con un gran peso en el sonido de la banda.
En aquella ocasión venían presentando su maqueta "Start to fall", de la que me pude hacer de una copia; desde entonces hasta este "Silence", del que vamos a hablar, han editado un primer larga duración llamado "Burning death" a finales del 2014.
La formación del disco está integrada por Ely a la voz, Manu a la guitarra, Jesús a la guitarra y voces, Hugo bajo y coros y Charle a la batería.
Este disco fue grabado y mezclado por Dan Diez Benito en los Rocklab Studios de Haro y masterizado en los Finnvox Studios de Helsinky por el afamado Mika Jussila.
Editado a comienzo del otoño, cuenta con una brillante presentación grafica tanto en la portada como en el libreto interior, lo cual da a la obra un carácter especial ya desde antes de poner a reproducirlo.
Los poco más de 36 minutos que dura el disco se abren con "Chaos theory", que nos pone en el camino de lo que nos depara el trabajo, con ese contraste de voces guturales y melódicas sobre un base potente. Buen comienzo de disco, con un estribillo bastante pegadizo.
Más cañera comienza "As I die", para seguir un poco la línea precedente de la canción anterior, pero con un sonido de batería aún más pesado y con las guitarras brillando en la parte central, todo ello con una gran Ely que aporta la melodía en el estribillo, contrastando con las voces más cañeras.
"Last breath" es una canción más lenta en su inicio, en la que la voz de Ely cobra más protagonismo, sobre todo en los contrastes entre las partes más melódicas y las partes más intensas del estribillo.
Un ritmo machacón y constante nos deja "What never will be", con unas guitarras muy bien trabajadas durante toda la canción, sobre un colchón rítmico más que destacable, haciendo de esta canción una de las más potentes del trabajo.
Siguiendo con el disco, nos encontramos con "Whispers", que es una pequeña pieza instrumental con unas suaves guitarras que sirven de preámbulo a "Silence", la canción que da nombre al disco, y que suena muy potente desde el comienzo contrastando con su antecesora y con unas voces guturales que cobran aquí mucho protagonismo, relegando a Ely la parte del estribillo, con una parte final donde las guitarras tienen mucha importancia.
Un sonido muy machacón nos adentra en "Through the mirror", con un estribillo muy pegadizo de los que se te quedaron grabados a fuego, con ese contraste constante de las dos voces, que se complementan de manera extraordinaria.
La canción más corta del disco, es "Blood bath" que apenas tiene dos minutos, pero que está llena de velocidad y violencia sónica, dentro del estilo de la banda, con una presencia casi exclusiva de las voces guturales.
Por el contrario, con "Deliver us from evil" nos adentramos en la pieza más extensa de todo el disco y donde la banda desarrolla plenamente toda su calidad, con una gran variedad de estilos y que hacen no solo que la canción no pierda intensidad, sino que puede ser la mejor del disco, precisamente por el amplio registro de sonidos que posee.
Y el disco concluye casi sin darnos cuenta con "Last words", una canción que podríamos considerar un epílogo, que empieza con una guitarra acústica, para luego arropar la voz con el sonido de unos violines, dotando de dulzura a esta bella pieza que, aunque contrasta con el resto del álbum, deja un gran sabor de boca a esta gran obra.
Sin duda los zamoranos han sabido sacar un gran segundo disco, que se nos pasa muy rápido y nos deja con ganas de volverlo a escuchar.
La banda ha sabido hacer muy bien las cosas y en su breve andadura se están haciendo un hueco en la escena estatal, aunque a tenor de la calidad de su trabajo, tiene una gran proyección internacional y es que este "Silence" no tiene nada que envidiar a muchas de las referencias que nos vienen del exterior.
Un gran disco para disfrutar y degustar muchas veces.