Podía empezar a escribir explicando qué me esperaba yo del Azeros Rock 2016, de esa 11ª edición, y acabar esta crónica comentando el resultado final, pero a veces me gusta empezar la casa por el tejado, así que haré las dos cosas a la vez. La sensación fue unánime, en Astillero se respiraba Rock, se sentía la música, el buen ambiente y la fiesta latían en nuestros corazones.
Lo primero, dar las gracias a la organización del festival por dejarnos un hueco, por permitirnos organizar el primer Concurso de Bandas del Azeros. Ha sido una experiencia tan gratificante que pueden contar con nosotros siempre que quieran y para lo que haga falta. Igual cambiamos alguna parte de las bases porque hay cosas con las que no estamos para nada satisfechos, como por ejemplo el bajísimo nivel de participación de las bandas de Cantabria, algo vergonzoso sin duda alguna, pero bueno eso ya es otro cantar. Debemos reiterar que la organización del Azeros Rock nos han hecho sentir parte importante de algo muy grande y eso no tiene precio ni se puede resumir con unas pocas palabras, ¡¡gracias!!.
Ni de lejos sospechaba que se iban a reunir más de 1000 personas en el festival. Si bien es verdad que este año había muchas ganas, al no celebrarse el año pasado, parece que nos tienen que quitar momentáneamente las cosas para que lleguemos a valorarlas. Sea por eso o porque los grupos eran buenísimos o porque el evento ha tenido mucha difusión, sea por lo que fuere ver tanta gente aquel 12 de marzo ponía los pelos de punta y encogía el corazón.
No me voy a extender más, dejaremos paso a las bandas. Desde aquí solamente me queda decir que me enorgullezco enormemente del trabajo que han llevado a cabo la Asociación Cultural Azeros Rock, os doy mi más sincera enhorabuena. Espero que este sea el primer año de muchos en los que nos juntemos 1000 almas, habéis hecho las cosas muy bien durante 11 años y estoy ya no hay quien lo pare. ¡¡A por ellos!!.
Ambiente. Texto: María G. Guerrero
A las cinco de la tarde comenzó el festival. Los locales Yey Sax saltaron al escenario principal del pabellón de Astillero para mostrarnos cómo se las gastan sobre las tablas con un repertorio de treinta y cinco minutos. Ser la chispa que arrancara el "XI Azeros Rock" no era una sencilla misión, pero estos chicos lograron prender una gran hoguera que no cesó hasta terminar la edición.
El cuarteto de Astillero nos ofreció un animado concierto de rock con algunas canciones de "Sin Alicatar", su primer trabajo. Lo hicieron con tanta ilusión que lograron contagiar su júbilo a las personas que desde el primer momento nos concentrábamos en el recinto. Temas como "Libre", "De Cinco Estrellas" y "Jimmy El Tuerto" fueron aplaudidos por sus seguidores y se convirtieron en una buena carta de presentación para abrir el apetito de los que no les habíamos visto nunca.
Además, en su repertorio incluyeron alguna versión que animó al público al bailoteo popular, como fueron los casos de "La Locura" de Parabellum y de "Las 2:00 " de Mala Reputación, esta última con la colaboración especial de Mata, de los desaparecidos Balance de Daños.
Yey Sax. Texto: Jose Luis Fernández
Sin darnos ni un minuto de tregua le tocó el turno a Saco Roto, grupo vencedor del concurso Insonoro en la categoría local, que inauguraron el escenario "pequeño" de esta jornada con un repertorio de treinta y cinco minutos que fueron encabezados por el tema "Estúpido y Cruel", y que supuso el despegue de un gran concierto de rock.
El cuarteto cántabro mostró con espíritu enérgico varios galardones de su disco "Golpea". La puesta en escena dejó entrever una actitud cómplice entre sus miembros, consiguiendo una continua actitud firme que nos dejó grandes canciones como "Elegancia y Distinción" y "Legítima Defensa". Con especial mención, cómo no, a "Viejo Loco", la del videoclip, que contó con la colaboración especial de Laura Dos Santos (Orquesta Iris) y a “Golpea”, tema que da nombre a su obra y que contó con la participación presencial de Toño (Mi Pequeña Venganza) y Rober (Poetas de Botella).
Pusieron toda la leña en el asador para cerrar esta etapa de presentación de este trabajo. Ahora están sumergidos en continuar su legado. Un gusto haberles visto en el Azeros, por vez primera en mi caso. Teníamos ganas de hacerlo desde que ganaron nuestro concurso, y hablo en plural porque sé que este deseo puedo extrapolarlo a cada persona integrante del equipo de Insonoro. Saco Roto eran conocidos en la zona y a partir de ahora por todos aquellos que se acercaron esa tarde desde otras zonas geográficas.
Saco Roto. Texto: Jose Luis Fernández
Atotaho eran la tercera banda en actuar y sin duda alguna la que a priori más difícil lo tenían porque su estilo difería mucho del resto de las bandas allí presentes. Antes esta situación puedes salir a cumplir el expediente o salir a por todas; ellos eligieron la segunda opción.
Los de Guarnizo llevan 15 años en activo, aunque de hace unos años para acá se les ve poco en directo, pero cuando vas a uno de sus directos nunca sales insatisfecho, si te gusta el Metal Core.
Desde el comienzo con “Rechazo tu realidad” nos dimos que su actitud era la de siempre con Raúl tan eléctrico como siempre, Abraham llevando el peso de la actuación, David deleitándonos con su calidad y Adrián alentando a la gente para que botase.
El repertorio se basó en su disco del 2014 “No quieren que piense”, de la que interpretaron el tema titulo, “Mercenarios del estado”, “Conciencia cero” o ese temazo que es “Ladrones de almas”, entre otros. No dejaron pasar la oportunidad de presentar alguna canción nueva que, bajo mi punto de vista, tiene un sonido más metalero.
La limitación del tiempo que tenían (poco más de media hora), hizo que el concierto se nos pasase en un suspiro y nos dejo ganas de más.
Atotaho. Texto: Txutxy Cano
Sin tratar de desmerecer a nadie, ni mucho menos, una de las bandas que más ganas tenía de ver en el Azeros Rock era a Elenco. En primer lugar, porque nunca les había visto en directo, y también porque habían resultado uno de los dos ganadores de nuestro concurso de bandas organizado para que tocasen dos grupos en este festival cántabro, siendo seleccionados entre más de 120 grupos participantes.
Recordamos que Elenco son de Logroño y que tienen tres discos publicados: “Ajuste de cuentas”, “Un grito de esperanza” y “Fuego”. Su música se podría definir como rap metal.
Su actuación fue corta pero muy intensa. Lo principal que quiero transmitir es que si en disco te gustan, en directo te dejan con los ojos como platos, son brutales, apoteósicos, pura adrenalina. Cuando les estás viendo tocar te preguntas si no acabarán agotados, al verles descargar toda su energía sabes que serían capaces de resucitar a los muertos.
Elenco son una bomba a punto de explotar, que no se os olviden estas palabras, que nadie diga que no he avisado. Aquella tarde en Astillero implosionaron y consiguieron dejar a todo el público flipando, los comentarios eran unánimes: “¡¡Joder, qué grupazo!!”. Pues sí, lo son.
Los riojanos se dejaron la piel sobre el escenario y nos reventaron los oídos a ritmo de “Fuego”, “Vencedores y vencidos”, “Violencia” o “En el interior”.
¿La sensación final?. Pues dejaron ganas de más, de muchísimo más. Espero tener la oportunidad de veros en un concierto de una hora y media o dos. ¡¡Lo espero, lo necesito!!.
Elenco. Texto: María G. Guerrero
Cuando a las siete y veinte de la tarde Radiocrimen llamó al Azeros desde el escenario principal el polideportivo de Astillero se convirtió en una olla a presión. La gente estaba expectante y no quería perderse el segundo concierto de gira de su “3er Grado”, disco que acababa de salir del horno el día anterior, para escucharlo en directo y bailar también todo lo que le precedió. Por lo que durante una hora sus fieles dieron botes canción a canción tras comenzar la función con el clásico “Terror”.
El quinteto vizcaíno ofreció un gran concierto incluyendo canciones de sus tres discos. Las que más envalentonaron el ambiente fueron “Los Chicos Ya No Quieren Llorar”, “Todo El Que Manda” y “En Las Cloacas” de su primera obra “Mátame”, “Contenedores”, “Amor Mata” y “Delfín Negro” de su segundo trabajo “Antecedentes” y “Alcohol Barato” de su nuevo “3er Grado”, ya que bastante gente se lo sabía al haberse presentado días antes en la red como adelanto.
Pero la del videoclip no fue la única canción nueva que sonó potente. Pudimos comprobar que “Tiempos Salvajes”, “El Solitario”, y “Mundo Basura” también están hechas para punkarrear y bailar pogo en directo. Gustó su puesta en escena, y sabemos que se acabarán viviendo de manera más intensa cuanto más veces se escuchen. Como sucedió con la versión final de La Broma de Ssatán “Ahógate en el W.C”, incluida también enel nuevo disco, que hizo botar y dejar con ganas de volverles a ver pronto una vez más.
Hay que resaltar que este concierto de Radiocrimen fue bastante emotivo al suponer la despedida del guitarrista Javi Puñales con la formación. El público le mostró su respeto y admiración coreando “Javi quédate” en más de una ocasión. Le seguiremos viendo siguiendo a esta banda debajo del escenario. Seguro.
Radiocrimen. Texto: Jose Luis Fernández
Nadie cuestiona que en Cantabria Pandemonium Ligth son una institución dentro del rock, por eso no faltó quien les arropase cuando aparecieron para actuar durante treinta y cinco minutos en el escenario Insonoro. Y es que en la tierruca, esta banda de punk rock formada en Guarnizo a finales de los noventa se ha ganado a pulso su reconocimiento.
El quinteto ofreció un furioso concierto donde interpretó canciones de varias etapas de su carrera. El público disfrutó a contragolpe temas como “Youbreken Brindares” de su disco “En el Nombre del Pande”, “Neveras Vacías” y “Tiene Que Arder” de su último trabajo “País De Pandereta”, e incluso jaleó el final de su bolo al entonarse la melodía de “Televisión” del viejo disco “Con Un Pande Bajo El Brazo”. Por cierto, también se atrevieron con una versión de La Polla.
“Los Pande” estuvieron a la altura de las circunstancias en un momento en el que se rozaba el ecuador del festival. Mantuvo al público en su salsa y eso cualquiera pudo percibirlo al observar cómo los que se encontraban en las primeras posiciones debajo del escenario no dejaban de bailar cada una de sus canciones. A esta veterana banda les queda cuerda para rato.
Pandemonium Light. Texto: Jose Luis Fernández
La verdad es que no había escuchado aun nada del nuevo disco de Porco Bravo, entre otras cosas porque no me había enterado de su edición, pese a haberse editado ya hace unos meses.
Eso hizo que tras el ligero retraso con el que empezaron, anduviese un poco descolocado con las canciones. El concierto comenzó como en el disco, tras la introducción “La llamada”, con la pegadiza “Mírame” y “Solo quiero bailar”. Desde el principio el grupo se metió al público en el bolsillo con su actitud encima del escenario. Y aun no habíamos visto nada.
Tras estas primeras referencias a su ultimo disco, siguieron con “Lasciva”, de su disco del 2011, para continuar con “No sé”, ese temazo del disco homónimo del 2014 y en la que Manu, el cantante, se tiro al publico. Comenzaba el espectáculo de verdad.
Vuelta al nuevo disco con “Mienten”, temazo muy directo y que funciona muy bien en directo, para retornar a su anterior disco con “Se quema”, ese cañón que es “Nunca pasa nada” y la rebelde “Corre”.
Con “La piara” de su último disco, comenzó la parte más bizarra de la actuación cuando su cantante se grapo una hoja al pecho y la prendió fuego, mientras no paraba de cantar y contonearse: todo el que no había visto a la banda en directo se quedaron con la boca abierta.
Siguieron con su último disco de las que sonaron de manera consecutiva la más lenta “Brindaremos juntos” y “Lo intento”, antes de pasar a una de las canciones que más me gusta de la banda como es “Donante”, de su disco del 2011 donde de nuevo el cantante se lanzo al publico con una bengala encendida dentro de su pantalón: aquello era la apoteosis para la gente.
Con la “Ultima noche” de su ultimo disco nos hizo agacharnos a todos, antes de encarar la recta final de su hora de actuación con dos canciones de su disco de 2011 “Grooo!!!”: “El Cazador” y “Eléctrica Actitud”. Para la primera saco una máscara del animal que da nombre al grupo antes de tirarse de nuevo al publico, mientras que en la segunda salio con una tabla de surf con la que fue llevado en volandas entre el publico, al mismo tiempo que desde las guitarras salían llamas.
Así terminaba la actuación de una banda que no sólo tiene mucha calidad y canciones muy guapas, sino que además son capaces de montar un buen tinglado encima del escenario porque son un autentico espectáculo. Impresionantes.
Porco Bravo. Texto: Txutxy Cano
Faltos de Riego se subieron a las tablas del Azeros Rock para poner una nota de alegría, ironía y diversión a la tarde. Nos dejaron con las canciones de sus dos trabajos discográficos, “En tu puta cara HxC” y “La bida es asín”. Bailamos a ritmo de temas como “Televisión” (con la colaboración de Robe de Poetas de Botella), “Grupos de güasap”, “Centro comercial”, “Furgolistas”, “Mariví” y “Redes sociofecales”. Y además, disfrutamos como los indios con el cover de Ace of Spades de Motorhead: “Elainfoseis”.
Faltos de Riego dieron un concierto en su línea, bastante notable y bastante falto. La verdad es que siempre animan al público y siempre hacen gala de un humor excelente, no faltando los disfraces, para la ocasión de cangrejo o el tiburón de cartón en el tema que trata sobre este escualo.
La pena es que el día después del bolo anunciasen la marcha del grupo de Dani (baterista de la banda). Mucha suerte a Faltos y enhorabuena a Dani, creo que me he liado y es al revés la cosa, ¡¡jejejeje!!.
Faltos de Riego. Texto: María G. Guerrero
Esperaba con muchas ganas la actuación de La Gran Orquesta Republicana, ya que es una banda que en directo nunca defrauda y con la que te lo pasas siempre genial, ya que no paras de cantar y bailar con ellos durante todo el concierto; esta vez tampoco iba a ser una excepción, aunque mi cuerpo ya acusaba los primeros síntomas del cansancio acumulado.
Los mallorquines comenzaron el concierto con “Democracia” de su último disco, del pasado año, para seguir con dos temas de sus primeros tiempos como son “Te quiero”, adaptación de un poema de Mario Benedetti, y “Lo importante esta en tu cabeza”.
De vuelta a su disco más reciente con esa canción tan positiva marca de la casa que es “Sale el sol”, para volver de nuevo al pasado de la banda primero con su primer disco de hace casi 20 años con “Reggae republicano” y luego con “Imagina la victoria de los vencidos” del 2001.
A estas alturas del concierto se centraron en las canciones clásica de su repertorio como son “El miedo global”, el festivo “Dime que hice ayer”, el reivindicativo “La huida” o el antimilitar “Loco”. Nos lo estábamos pasando bien, pese a que el sonido parecía perderse un poco por las características del recinto.
Sin darnos tregua, siguieron con más clásicos como son “El paraíso” o la maravillosa “Mi territorio”, para volver a su última referencia con “Quiero amor”.
El concierto iba llegando poco a poco a su fin tras una hora de actuación, pero antes sonaron “Vida de colores”, “Republica III” y la que da nombre a la banda “La Gran Orquesta Republicana”, con la que fueron presentados y con la que dieron por concluido su actuación, ya que pese a la insistencia de los allí presentes no había tiempo para más y el festival tenía que seguir.
Buena actuación de los de la Islas Baleares, que cuentan con un grandísimo repertorio para hacernos bailar y que no debes perderte en directo si te gusta bailar. Espero verlos pronto con un repertorio más amplio y si puede ser al aire libre.
La Gran Orquesta Republicana. Texto: Txutxy Cano
El Azeros era la primera vez que veníamos de nuevo sobre un escenario a Poetas de Botella, después de un apoteósico concierto grabación de DVD para celebrar sus 10 años como banda. ¿La sensación?. Pues nada más y nada menos que agridulce. Personalmente creo que Robe no se oía la voz o no sé qué pasó.
No fue un bolo malo ni mucho menos, pero tampoco un concierto bueno, fue un concierto de paso o de transición, no sé cómo explicar más concretamente la sensación. Hemos visto a los de Astillero unas cuantas veces y sé que se puede llegar a exigir demasiado, ser demasiado crítico, pero es que llegados a cierto punto creo que es lo lógico.
Aquella noche pudimos escuchar grandes canciones como “Lágrimas de arena”, “Virus”, “El gran final”, “REM”, “Eternos”, “Esclavos”… temas que seguro que a más de uno le hubiera encantado firmar, a muchos les hubiera gustado poner letra y música a las geniales canciones de Poetas de Botella.
A veces la honestidad duele pero, para mí por lo menos, duele más el cinismo y la hipocresía. Con el corazón en la mano, Poetas de Botella dieron un concierto de esos que se aprueban y podían haber sacado notable o sobresaliente. Seguro que a la siguiente sacan matrícula de honor y me callan la boca.
Poetas de Botella. Texto: María G. Guerrero
Los asturianos Desakato llegaban presentando su brutal “La teoría del fuego”, todo un discazo, no tan rompedor como el anterior, pero un gran trabajo al fin y al cabo, aunque de eso ya hablaremos en su momento. La impresión, la misma de siempre, son apabullantes, siempre lo han sido pero es que ahora parece que de forma inevitable las cosas se caen por su propio peso. Desde un primer disco tenían una proyección enorme, han cambiado el estilo y mucho, pero desde hace muchísimos años resultaban sorprendentemente brutales y brutalmente sorprendentes.
Desakato son el presente y el futuro de la música estatal. Consiguieron una máxima expectación en el público, las primeras filas echaban chispas y las llamas se propagaron por todo el recinto del Festival Azeros Rock. Los asturianos son un espejo en el que mirarse, son uno de esos grupos que desatan el orgasmo en los oídos y en la mente. Son una de esas bandas que hacen las cosas tan bien que conquistan, sobre todo a aquellos que valoramos el trabajo bien hecho y la profesionalidad por encima de todo.
La actuación de los astures no tuvo parangón, fueron unos de los grandes triunfadores del festival, sin remilgos y sin concesiones, sin aspavientos pero sin contemplaciones. Ni un solo momento hubo par la calma, salvo aquel en el que Pablo coge por unos minutos la guitarra y se sienta para desgarrarnos el alma.
Pocas palabras salieron de la boca de Desakato, las justas y necesarias para dedicar la apoteósica “Cada vez” a Alejandro Blanco, amigo y bajista de Ilegales, que tristemente acababa de fallecer. El aplauso fue unánime y salió de las manos de todos y cada uno de los allí presentes. Esa tarde-noche estábamos de luto, pero ya se sabe que la música debe seguir sonando aunque el corazón esté encogido.
No pudieron faltar tampoco las nuevas, canciones como “Columnas de humo”, “Animales hambrientos”, “Pasajeros” y “La hoguera”, que suenan de manera espectacular en directo. Resulta curioso degustarlas en vivo antes de aprenderlas, es la magia del rock.
El revuelo generalizado vino, como suele ser habitual, con “Contra la pared”, “Cuando salga el sol” y “Octubres rotos”, temas con los que Desakato dieron los últimos coletazos y acabaron por dejarnos exhaustos.
Desde Insonoro damos las gracias a la banda ya que se acordaron de nosotros y nos mencionaron durante su actuación. No nos vamos a poner ñoños, pero ver cómo triunfan grupos como Desakato, a los que conocimos y seguimos desde que tenían tan sólo un disco, es uno de los grandes alicientes que tiene nuestra labor.
“La tormenta” fue el punto y final de una actuación de esas difíciles de olvidar. Como ellos mismos dicen “las despedidas me aterran”, así que seré breve: ¡¡Hasta la próxima!!.
Desakato. Texto: María G. Guerrero
Por diferentes coincidencias hacia tiempo que no veía a Menos Lobos, así que esta noche iba a quitarme esa espina en la última actuación del escenario que Inosnoro.com había instalado.
Me temía que tras la actuación de Desakato pudiera haber una desbandada de gente pero afortunadamente no fue así y la mayoría de la gente se quedo aun para ver a esta joven banda.
El concierto comenzó con “La tormenta” y “Directa al corazón”, de su más reciente trabajo “Salvaje”, editado a finales del año pasado.
Pero estos chicos no paran y presentaron una nueva canción, llamada creo “Llanero solitario”, que como reflejaba su estribillo es muy rockanrolera, para seguir con ese su tema denuncia “No fracking”, después del cual tiraron algunos Cds a los presentes.
Recordaron su anterior “La suerte esta echada” del 2012 con “Frente a frente”, tras el cual brindaron por el Azeros Rock.
De vuelta a su actual disco tocaron “Irracional”, para recordar el anterior con “Guerras absurdas” y esa maravilla que es “Sin retorno”, para la que contaron con la colaboración de Chaves de Faltos de Riego.
Su actuación concluía tras su poco más de media hora con “Todo irá bien”, de su ultimo trabajo, dejando a la gente muy contenta con su rock and roll de toda la vida, pero que en ellos suena muy fresco.
Menos Lobos. Texto: Txutxy Cano
El fin de fiesta en Astillero llegó de la mano de Coverstars, banda que cuenta en sus filas con músicos pertenecientes a otros grupos de la escena musical cántabra y que animó a la audiencia con un repaso a grandes clásicos del rock estatal.
Tras haber escuchado las nuevas composiciones de Desakato, Porco Bravo o Radiocrimen y haber disfrutado por primera vez, en mi caso, con la puesta en escena de bandas como Saco Roto, Pandemonium Light o La Gran Orquesta Republicana, tocaba vibrar con versiones de Marea, La Polla Records y Reincidentes entre otros.
Coverstars lo forman en la actualidad Toño de Mi Pequeña Venganza a la guitarra y voz, Robe de Poetas de Botella a la voz, Tito de Faltos de Riego al bajo, Fincher de Muy Deficiente a la guitarra y Mike de Los Clientes de la Noche a la batería y el quinteto fue el encargado de cerrar la velada marcándose de manera acertada versiones de canciones convertidas en himnos con el paso del tiempo.
"Mi vida" de Segismundo Toxicómano, "Ansiedad" de Kaos Etiliko, "Vicio" de Reincidentes y "Deltoya" de Extremoduro, fueron algunos de los temas con los que el público se divirtió y gastó sus última energías. Así mismo Coverstars regaló al público la interpretación del tema "Grita", canción compuesta y grabada este mismo año para el Azeros Rock y que se convierte en el primer tema original de los cántabros.
Fue pasadas las tres de la madrugada cuando la undécima edición del Azeros Rock llegó a su fin, una exitosa edición que indudablemente habrá dado fuerzas a los organizadores para seguir con esta aventura con la que arrancaron en 2004.
Desde aquí nuestro agradecimiento a la organización por todas las facilidades prestadas a la hora de realizar nuestro trabajo y nuestro más sincero apoyo para que sigan apostando por el Azeros Rock.