Teníamos muchísimas ganas de ver a Los Escapaos de nuevo en directo, y es que claro con la preparación de su último CD, “Con la cruz a cuestas”, habían estado muy entretenidos y se prodigaban poco por los escenarios. Como se suele decir no se puede estar en misa y predicando, nunca mejor dicho, ¡¡jejeje!!.

Los Escapaos empezaron a repartir cera con algunos de los temas de su más reciente criatura, abriendo con “Sisi emperatriz” y siguiendo con “Cicatrizes”. Algo un tanto arriesgado empezar un bolo con dos temas nuevos, pero cada uno es muy libre de hacer lo que le venga en gana. Aunque sí que es verdad que en cuanto empezaron a sonar canciones más conocidas, y cuando el grupo dejó atrás los normales nervios iniciales, todo fluyó y nos lo pasamos más que bien.

La gente se fue animando a ritmo de “Pecera de cristal”, “Psicólogo listo” y la genial “Pazos”, para mí uno de sus temas más sobresalientes. Aunque sonaron otras muchas canciones y aquello fue una auténtica fiesta. De “Con la cruz a cuestas” también pudimos escuchar “Cocidu” y el tema homónimo al disco.

Los Escapaos es un grupo contundente y nos hicieron pasar un rato estupendo, además lo nuevo pinta muy pero que muy bien. Podemos estar orgullosos de que esta banda de punk rock sea de Cantabria.

Después de ver una actuación notable de Los Escapaos llegaba el turno de Lendakaris Muertos y de la presentación de su “Cicatriz en la matrix”, y esta era para mí la primera vez que les veía en mucho tiempo, desde su regreso, y con disco nuevo. Se puede decir que estaba hasta nerviosa, pues sí, lo estaba, a veces parece que soy yo la que me tengo que subir al escenario.

Los Lendakaris dieron un bolo cojonudo, para qué nos vamos a andar con chiquitas, si bien es verdad que no se oía demasiado y en ese sentido no estaban del todo cómodos. A pesar de ello ofrecieron una gran actuación, como siempre. Nos dejaron con más de 40 canciones y pocas veces se me ha pasado el tiempo tan rápido como con ellos sobre las tablas del Escenario Santander.

Hacía demasiado desde la última vez que les había “sufrido” y al ver esa puesta en escena, esa energía y ese desparpajo (que parecen andaluces, jejeje) recordé por qué es uno de mis grupos favoritos. El público lo dimos todo en respuesta a lo que Lendakaris Muertos ofrece. Los moratones de los brazos del día siguiente fueron la señal de que aquello no era muy punky, aquello era muy heavy.

Cada concierto de esta banda es como si fuera el primero o el último, son un auténtico espectáculo, en todos los sentidos. A destacar sin duda alguna es el ver a Joxemi sobre el escenario. Si la banda nos gustaba ahora nos ha hecho perder el sentido por completo.

¿Canciones?, pues sí, muchas, “Tememos a la pasma”, “Y sin embargo, te quiero”, “Modo dios”, “Modo diosa”… De las míticas “Besos gaztetxeros” (con su habitual demostración de afecto sobre el escenario”, “Gora España” (con la bandera anudada sobre los hombros de Aitor), “Oso panda”, “Fuimos ikastoleros”, “Héroes de la clase obrera”, “Se habla español”… Y mucha, muchísima complicidad con el público. Aitor y sus secuaces estaban casi más tiempo entre el público que sobre el escenario, y los de las primeras filas pudimos ser breves protagonistas de las canciones, al pasarnos el vocalista el micro para aportar nuestras espectaculares voces en algunas frases emblemáticas.

Para qué vamos a ser sutiles, Lendakaris Muertos nos gustan más que los buffets libres y que ir de parrillada (barbacoa), y que hacer las dos cosas a la vez. Al fin y al cabo alimentan nuestra mente de maldades y cada vez son más mordaces, irónicos y resultan retorcidamente inteligentes (algo que nos encanta).

Esperamos ver a Los Escapaos y a Lendakaris Muertos en muchas ocasiones durante este año, porque el 8 de abril en el Escenario Santander, ambas bandas se marcaron un concierto memorable.