Los comienzos de cualquier proyecto suelen ser complicados y por eso nos gusta sumarnos a celebraciones como la que narraré a continuación. Con un poco de empatía cualquier persona es capaz de hacerse cargo de lo que cuesta materializar cualquier idea que se tenga en mente y darle continuidad.

Así que cuando nos invitaron al primer aniversario de los locales de ensayo Clave de Fa, nos acercamos encantados de la vida. Si te invitan a una fiesta ¿cómo no vas a ir?. Sería de muy mal gusto, pero es que encima nos apeteció muchísimo estar allí presentes porque el proyecto de estos locales de ensayo nos parece necesario y porque se nota un gran esfuerzo detrás.

Hace apenas un mes conocimos los locales, que están ubicados en la Avenida de la Cerrada de Maliaño, Cantabria, cuando fuimos a entrevistar a Saco Roto, y sinceramente nos encantaron. Cuando se hacen las cosas con buen gusto, cuidando los detalles y con profesionalidad, el esfuerzo salta a la vista. Los músicos están más que contentos porque allí guardan todos sus instrumentos, ensayan tranquila y cómodamente y lo que es vital: En un sitio nuevo, perfectamente acondicionado y sin tener que aguantar humedades ni tener problemas con los vecinos.

Así que con unas cuantas bandas de las habitualmente experimentan allí con su música, se montó el Festival Clave de Fa, que empezó a la 13:00 y acabo a eso de las 18:00. Hubber, Saco Roto, Compañía de sueños ilimitada, Funk Indigo, Ojos de Gata, Lazy, The Shiny Souls y The Anunnaki Sons, animaron esas cinco horas a base de bien. Cada uno con su estilo y con sus formas, unos más delicados, otros más rockeros y moviditos, pero todos ellos dando lo mejor de sí mismos y haciendo que aquel día fuese inolvidable.

Aunque había un escenario en la calle, finalmente las actuaciones se tuvieron que desarrollar en un local, pero no en uno de ensayo, ¿eh?, jejeje. Fue en uno bastante grande y situado en la planta baja, perteneciente también a Clave de Fa. Y es que ya se sabe que en Cantabria en un mismo día te puedes poner camiseta, camisa, jersey y chubasquero, y como amenazaba lluvia pues más vale prevenir que lamentar.

Dentro del local, aparte de con unos buenos conciertos, nos agasajaron con bebidas, una suculenta paella y había hasta gominolas. Todo ello se nos ofreció de manera gratuita. No me acuerdo de la última vez que me han invitado a una fiesta así. ¡¡Muchas gracias Marta!!.

Por otro lado, hay que comentar que todos nos quedamos a cuadros con la puntualidad británica del evento. Cuando llegué pensé que no saldríamos de allí hasta las nueve de la noche, sobre todo teniendo en cuenta que actuaban muchísimos grupos. Pues bien, me equivoqué, horarios cumplidos a rajatabla. Me quedé realmente impactada y me quito el sombrero, seguro que detrás de ello hay un esfuerzo titánico, pero como suelen decir: ¡¡Sí, se puede!! (Si se quiere).

Aquella tarde quedó patente que hay personas que tienen una habilidad innata para saber gestionar unos locales de ensayo y también para ser capaces de organizar una buena fiesta. Deseo de todo corazón que sigamos juntos durante muchos años celebrando aniversarios

¡¡Larga vida a Clave de Fa!!.