Barrio de la Aldea, Los Corrales de Buelna, Cantabria
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Hacía ya algún tiempo que tenía marcado en rojo la fecha del 30 de septiembre porque, según me habían comentado la gente de SinBat, ese era el día en que iban a presentar su nuevo disco.
La verdad es que a medida que iba acercándose la fecha referida y no había vuelto a tener más noticias de este evento, mis dudas empezaron a surgir, aunque al final el evento tenía hora y lugar: el Barrio de la Aldea en Los Corrales de Buelna y a partir de las 22.00
Lo cierto es que al final el concierto estaba programado dentro de las fiestas de San Miguel en dicho barrio y a los mencionados Sinbat les acompañarían The Old Trastes y La Vid & El Olivo.
Cuando llegue al recinto festivo el concierto de The Old Trastes ya había comenzado y es que es lo que tiene salir tarde de trabajar, que cuando los conciertos de los viernes están programados pronto a veces me pierdo algo.
A esta banda ya les había visto hacia 3 meses en las fiestas de San Juan de dicha localidad y aunque en esta ocasión su repertorio estaba mucho más reducido, nos dejaron grandes destellos de su calidad musical.
Cuando llegaba estaba acabado de sonar “Apuesta por el rock and roll”, a la que siguió “El dorado” de Revolver.
Cuando empezó a sonar “El ritmo del garaje” empezaron a caer algunas gotas lo que hizo que la gente se quedase expectante debajo de la carpa o de los balcones.
Ellos siguieron su concierto con la gente poco a poco acercándose a verlos, mientras sonaban clásicos como “No hay tregua”, “Al límite” de Ramoncín o “Pacto entre caballeros”.
La recta final del concierto la encararon con “Dolores se llamaba Lola”, “En blanco y negro” y “La mataré”
Muy buen rato el que nos hicieron pasar los chicos de The Old Trastes, con esas canciones que para unos marcaron nuestra juventud y que para todos son canciones míticas.
No hubo que esperara mucho para ver a La Vid & El Olivo sobre el escenario; a esta banda, que yo recuerde, solo la había visto en directo hace 6 años en La Rasilla, a unos metros de donde estábamos. Y no es porque no me gusten, simplemente que a veces los circunstancias y las coincidencias no lo habían hecho posible.
Lógicamente la banda ha cambiado mucho en estos años y se la vio como una banda muy asentada.
Empezaron el concierto con “2000 Besos” y “Grítame al oído”, para seguir con “Almas gemelas de su último disco “Si te lleva el mar adentro”, editado en 2013 y que es su último trabajo hasta la fecha.
Con “New York” y “Con viento a favor” regresaron a su primer trabajo, para regresar a su actual obra con “Corconte”.
El buen rock and roll de la banda se ve reflejado en “Seguiré los pasos”, aunque también hay momento para las baladas, como en “Mientras puedas”.
Así fue trascurriendo la velada, con cada vez más gente acercándose, mientras la banda alternaba canciones de su primera obra “Que el silencio nos pregunte”, como “Tu en Las Vegas y yo en Berlín” o la canción que da título al mismo y canciones de su actual obra como “No me sonrías” o “Si te lleva el mar adentro”, que la da nombre.
Tras “Solo quería saber”, llego el momento culminante de su actuación con “Juntos mejor”, canción que cedieron hace más de un año para el proyecto “Luchamos por la vida”, para acabar con su himno “Noches sinceras”.
Me gustaron mucho La Vid & El Olivo con esa mezcla de rock accesible con tintes pop, que agradaron a todos los presentes; estaré siguiéndoles la pista para verlos más veces y mientras escucharé su último disco, que adquirí esa noche.
Estaba claro que SinBat eran los protagonistas de la noche y eso se vio reflejado porque mucha gente se puso en primera fila para ver su actuación.
He visto un montón de veces a la banda y muchas de ellas este año, pero se notaba que era un día grande, tanto en lo concentrados que se les veía desde el principio, como en la expectación creada.
Tras una introducción, nos ofrecieron “Cuerpo a cuerpo”, canción que ya habían tocado en diferentes conciertos este año, pero que aquí me gustó especialmente, sobre todo por el sonido de los teclados de Paula.
Tras “Perder mi tren” de su anterior “Días de duelo”, pasaron a presentar “Martilleando”, del nuevo disco y la versión de “Niño soldado”, ya habitual en sus conciertos.
Tras comentar los nervios previos a la realización del evento, interpretaron “A cal y canto” y “Por hacerla sonreír”, esta última era la primera vez que la oía en directo, y al acabar la misma tuvieron que improvisar, mientras Víctor cambiaba una cuerda de su guitarra.
La versión de “Chiquilla”, nos llevó a otra nueva llamada “En balde”, para recuperar “Entre las dudas” de su anterior obra, y clavar una gran versión de “La senda del tiempo” de los Celtas.
Se les notaba muy sueltos y muy a gusto encima de las tablas, una vez pasados los nervios previos, y aprovecharon para promocionar sus productos, antes de tocar “Mi dios y mi norte”, que tocaban casi por vez primera en directo y “Sepultura”, que dedicaron a sus seguidores más heavys.
SinBat
La actuación estaba en su máximo apogeo cuando interpretaron la versión del “En blanco y negro” (segunda vez que sonaba esta noche), para, a continuación recuperar “Días de duelo”, que daba título a su anterior obra.
Para terminar con las canciones del disco que presentaban tocaron “Nuestros pasos”, una bella balada, y “Libre”, recibiendo, como el resto de canciones del disco, muy buena acogida.
Pero el concierto aún no había acabado y todavía faltaba la versión del “Puta” de Extremoduro, para la cual contaron con la colaboración de Víctor de Körral y en la que Aitor, el cantante de la banda, aprovecho para tirarse encima del público.
La hora y media de actuación terminó con el gran himno de la banda: “Gato de callejón”, ese tema que es el estandarte de la banda y que nunca puede faltar en sus conciertos.
Grandísimo el concierto que dieron SinBat, me atrevería a decir que el mejor que les he visto, con la gente muy entregada y con un sonido muy bueno, que hizo que se pudiesen distinguir muy bien todos los instrumentos.
Ojo a SinBat; son una banda con un futuro muy grande dentro de la escena cántabra y su último disco, que por supuesto os recomiendo, suena genial.
Gran noche la que disfrutamos, con 3 bandas que me encantaron y todo gracias a una comisión de fiestas de un barrio que ya quisieran para sí muchos pueblos. Así se hacen las cosas.