Este era otro de esos sábados en los que había bastante donde elegir entre la amplia y variada oferta musical en Cantabria; sin embargo decidí acercarme a la que era mi primera opción desde el principio: Burning.
Y es que los de Madrid son una de esas bandas que forman parte, de una u otra manera, de la banda sonora de todos los que pasamos la cuarentena y es que más de 40 años es lo que llevan en activo y, hasta el momento, las veces que les había visto me habían gustado mucho en directo.
Para esta ocasión contaban, además, con el aliciente de Hendrik Röver & Los Míticos Gts, que jugaban en casa, y los Desvariados, una banda muy prometedora y que al final se convertiría en lo mejor de la noche, al menos para mí.
Cuando llegamos, había muy poca gente, y como era de suponer, con el paso de la noche la cosa se animó hasta conseguirse una entrada decente para las bandas que iban a actuar, pero por debajo de lo deseado.
Con máxima puntualidad comenzaron su actuación los madrileños Desvariados, banda que comenzó su andadura hace ya 5 años y que el año pasado tuvo su puesta de largo con su debut “Café caimán”, un disco y una banda a la que apenas había escuchado hasta unos días antes de este concierto, en los que me enganche su música.
Comenzaron su actuación con un mensaje bien claro, “Vamos a pelear”, y vaya si que lo hicieron, sin amilanarse ante una audiencia que les desconocía, para, tras presentarse, seguir con “Gente inteligente”, una brillante canción que aparece en su primer y único disco.
Siguieron desgranando dicho trabajo con la canción que o abre, “Desayuno fuerte”, tras las que saludaron a la gente, nos agradecieron nuestra presencia y nos contaron lo honrados que se sentían de poder girar con Burning.
Seguimos con otra dosis de rock and roll con “El hotel de las historias”, antes de desplegar toda su esencia más canalla con “Esta es para ti”, una de mis favoritas.
Como nos comentaban desde arriba, a veces intentas hacer una cosa y te sale la contraria y algo así le pasó a la banda que iba a hacer una canción de amor y le salió la macarra “Escúpeme”, un temazo en toda regla.
Con la gente ya mas metida en el concierto, siguieron con “Caminar solo”, que fue prolongada con un fragmento del “Entre dos tierras” de Héroes del Silencio, antes introducirnos en “Mama, me quiere matar”.
Desgraciadamente el final del concierto llegaba, no sin antes deleitarnos con “A mil kilómetros”, tema que no aparece en el disco, en el que incluyeron un trozo del “Necesito un trago” de Tequila y en donde su cantante bajo a cantar y tocar la guitarra entre todo el público, dando así un broche de oro a sus 45 minutos de actuación.
Se ganaron el interés de la gente a medida que acababa el concierto y se llevaron el aplauso unánime de los presentes, que encontraron en la banda un ejemplo de actitud y desparpajo.
Les seguiré la pista y para empezar me compré su CD para degustarlo en casa, porque simplemente me encantaron.
Hendrik Röver es uno de los artistas cántabros más respetados en todo el estado, incluso más que en su propia tierra, tanto en su labor con Los Deltonos como en sus otros proyectos y aquí se presentaba con Hendrik Röver & Los Míticos Gt´s, bajo cuyo denominación ya ha editado un par de discos.
Desde que comenzaron el concierto, el trio demuestra la clase y el estilo que tienes y es que son veteranos en esto y saben lo que tienen que hacer, con ejemplos como “Las muchachas” una de las primeras que sonaron.
Recuperaron “Déjalo” de aquel “Hendrik Röver & la West Bluegrass Band”, para seguir con “Rodar” de su actual “Fetén/Fatal”, bromeando sobre que no era una canción mexicana.
Demostrando una clase y una elegancia como pocos, siguieron con la primera versión de la noche, “The only daddy that´ll walk the line” de Waylon Jennings, antes de interpretar “(El último clavo en mi) Ataúd” de su aventura en solitario.
Siguieron repasando la trayectoria en solitario de Hendrik con la tranquila y reflexiva “Casa abandonada”, interpretada con mucha brillantez, antes de atacar con una nueva versión, en este caso “Howard Johnson´s got his Ho-Jo working” de NRBQ.
Tras demostrar sus habilidades, por si quedaba alguna duda, con una pieza instrumental, dejaron caer un par de temas de su actual disco de la banda, concretamente “Tatuaje” y la que le da en parte título, “Fetén”
Nueva vuelta a su aventura bajo su propio nombre con “Loco de atar” y “La astilla nunca cae (Lejos del árbol)”, que me gustó mucho, dejando caer entre ambas una nueva versión.
Se acercaba el final de su actuación, pero antes hubo tiempo para interpretar “Uh Las Vegas”, que sirvió de presentación a los componentes del trio y que fue oportunamente alargada, antes de despedirse con “Cambio de aires".
Mucho nivel y mucha calidad la que demostró la banda y un Hendrik Röver que es un profesional como la copa de un pino sobre los escenarios. Una hora de lección magistral.
Todo estaba listo, tras las dos bandas anteriores, para que la banda principal saliese a romper desde el principio, pero esta noche, al menos yo, no vi a los Burning que yo me esperaba.
Arrancaron con una extraña revisión de “Las chicas del drugstore”, seguida por “Bestia azul”, una canción tranquila que venía incluida en su último disco de estudio “Pura sangre”.
Tras este comienzo tranquilo del concierto, siguieron con ese clásico atemporal que es “Jim Dinamita”, que hizo que realmente empezase a meterme en el concierto, que fue seguida por otro clásico como es “Baila mientras puedas”, en la que apreciamos lo que fue la tónica general del concierto, y es que a Johnny se le oía muy poco la voz.
Retomaron su último disco en estudio, que data ya del 2013, con “Willie Dixon”, antes de interpretar “Jack Gasolina” de aquel primer disco sin el malogrado Pepe Risi.
De nuevo regresaron a su más reciente trabajo con “Tú te lo llevas todo” y “Águilas”, que recibieron el aplauso de la gente, totalmente entregada con la banda.
Un punto de inflexión en el concierto fue “Qué hace una chica como tú en un sitio como este”, una de sus canciones más populares y que sirvió para que tanto el público como la banda se animasen, antes de seguir con otra de las de sus orígenes como es “Rock 'n' Roll mama”.
Burning
El carisma de Johnny está por encima de toda duda y sus seguidores le adoran, pero en canciones como “Todo a cien” recordamos que tiene una maravillosa banda detrás y que saben hacer las cosas muy bien.
Estaba claro que, en un concierto donde tú eres el reclamo, te puedes permitir el tirar de tus más recientes trabajos y eso fue lo que hicieron los madrileños que tocaron “Corre conmigo” de su última obra, antes de recordar esa maravillosa balada que es “Como un huracán” y en donde la percusión adicional que lleva la banda le dan otro sonido.
Sin duda, una de la sorpresas de la noche, al menos para mí, fue la interpretación de “Estoy ardiendo - I'm Burning”, la que fue su primera canción hace ya 43 años, antes de interpretar la inmortal “Ginebra seca”, que, como suele ser habitual, intercalaron con fragmentos de canciones de los Rolling Stones, en un final apoteósico de la canción.
Otro tema muy conocido de la banda es “Esto es un atraco”, con todo el mundo coreándolo, para seguir con “Es especial” y despedirse de todos, tras descorchar la botella de champan como mandan los cánones, con ese temazo que es “Mueve tus caderas”.
Tras hacerse poco de rogar, llegó el turno de los bises que arrancaron con “Pura sangre”, séptima canción que sonó de su ultimo y brillante disco, para seguir con las míticas “No es extraño que tú estés loca por mí”, “Nena” y la aclamada “Una noche sin ti”, con la que se despidieron de todos nosotros tras 2 horas de concierto.
Con Burning tuve una sensación contradictoria, ya que por un lado me pareció muy valiente el tirar de su último disco, pero por otra parte creo que la banda abusó de temas lentos o suavizados para poder dosificar la voz de Johnny, lo que hizo que el concierto no acabara de tener esa chispa habitual en sus conciertos.
Gran noche de rock and roll, con unos Desvariados que deberían estar en boca de todos de aquí a poco tiempo, un Hendrik Röver & Los Míticos Gt´s con una clase y una profesionalidad incuestionables y unos Burning correctos y un poco sosos para mi gusto.
01/04/2017 
Txutxy Cano 
Alberto Ruiz Echezarreta
Escenario Santander, Santander, Cantabria
