La segunda jornada de este fin de semana Insonoro, contaba con la actuación estelar de Los Brazos, que acudían a esta cita, principalmente, por habernos dejado sin palabras en su anterior visita a Santander; para acompañarlos en esta ocasión contábamos con unos viejos amigos de nuestra web como son Saco Roto.
Aún con el mal sabor de boca de la escasa afluencia de gente en la primera jornada, afrontábamos esta con dudas y, aunque hubo más asistentes que en la jornada precedente, la afluencia estuvo por debajo de lo que las bandas se merecían. Eso sí, en esta jornada se recogió mucho más material para la RSP Camargo, lo cual nos demostró, una vez más, la solidaridad de la gente del rock.
En un ambiente muy familiar y minutos antes de su actuación, la gente de Saco Roto nos presentaron en exclusiva su nuevo y fantástico video clip de la canción “Ruido de sables”, el cual aconsejo que veáis, sino lo habéis hecho ya, porque merece la pena.
Su actuación arrancó con “Carne de cañón”, la canción que también abre su actual disco, “Tiempos modernos”, editado el pasado añado, para, tras saludarnos brevemente, seguir con “Viejo loco”, canción de su primer disco “Golpea”, con cuyo video ganaron la anterior edición de nuestro concurso y así tocar en el Azero´s Rock 2016.
Tras agradecer su presencia en esta fiesta, avanzaron con “Un lugar” de su actual trabajo, que fue enlazado con “Miseria”, recuperada de su anterior obra.
La gran sorpresa de la noche, al menos para mí, fue la elección del tema a versionar, que en este caso fue el “Insurgente” de El Ultimo Ke Zierre, y que fue muy bien recibida igual que “Legítima defensa”, de su anterior trabajo.
Saco Roto
A estas alturas no había dudas del conciertazo que estaban dando los de Maliaño, pero si a alguien le quedaban ahí estaba “Huye”, otro de los temazos incluidos en su reciente disco.
Tras comentar, para los que no estaban desde el principio, que acababan de presentar nuevo video, interpretaron precisamente “Ruido de sables”, para seguir con otro tema de su nuevo trabajo como es “Ganas de guerra”, propicia para saltar y cantar, que fue exactamente lo que hizo la concurrencia.
Si le quedaba algo que añadir a este concierto era la magnífica interpretación de Laura en “Tiempo robado”, para, tras agradecernos nuestra presencia, interpretar “No creo en ti”, el que fue video adelanto de su actual trabajo y que es un auténtico cañonazo.
Su tiempo se acababa, pero antes se despidieron de todos nosotros y nos dejaron con “Golpea”, canción que daba título a su primer trabajo y que provocó la locura final entre todos los presentes. A estas alturas no es noticia que Saco Roto hagan un conciertazo; de hecho aún recuerdo en Torrelavega cuando se comieron con patatas a Loquillo y Burning, pero es que cada vez están mejor y creo que merecen un mayor reconocimiento del que tienen.
Si con Saco Roto habíamos disfrutado, lo que íbamos a presenciar con Los Brazos era algo antológico.
El trío bilbaíno, con apenas 6 años de existencia y 3 discos a sus espaldas, iban a dejar bien a las claras porque son una de las bandas que están en boca de medio estado, habiendo girado por casi toda la península y por Estados Unidos, entre otros sitios.
Desde el principio se vio al trío con una saber estar sobre las tablas como pocas bandas demuestran, no solo tocando de manera formidable sino que además se les veía disfrutar de las canciones, incluso llegando a permitirse alguna broma durante “Have Mercy”.
He de reconocer que no conozco los títulos de todas las canciones que interpretaron, por lo que me iba dejando llevar por la calidad musical de los intérpretes, que tan pronto tocaban canciones más suaves como otras que tiraban por un rollo más country, todo ello con mucho dinamismo desde el escenario.
Tras presentarse y agradecernos nuestra presencia, llegó el turno de “Tales”, canción que trata sobre dar una segunda oportunidad a la gente, que sonó espectacular y en la que el cantante se atrevió a hacerlo sin micrófono, demostrando la gran voz que tiene.
Tras llevarnos con su siguiente canción por un sonido más estilo años 50, llegó el momento de “Not my kind”, quizás su canción más conocida y que puso patas arriba a toda la sala cantando y bailando.
El concierto avanzaba y tanto William a la voz y la guitarra, como Koki a la batería y Txemi al bajo nos dejaban sin palabras, mientras iban enlazando piezas una tras otra, como “What should I've done”, mientras hacían participes a la sala de sus canciones pidiéndoles que coreasen los estribillos, algo que los presentes hacíamos de mil amores.
Los Brazos
Con ese buen rollo que trasmitieron durante toda su actuación, llegó el turno para la primera canción que compusieron, en la que una vez más demostraron la calidad que atesoran, para seguir con otro tema más cañero.
Sin querer habíamos llegado a la recta final del concierto, y tras los agradecimientos de la banda, interpretaron una sensacional versión del “Free bird” de Linyrd Skynyrd, que como ellos mismo dijeron, nunca falta en sus conciertos y que sonó simplemente bestial, antes de despedirse de todos los presentes con el “Whole lotta love” de los inigualables Led Zeppelin, en medio del éxtasis total de los presentes.
Así concluían 75 minutos mágicos de música, en los que no solo brillaron las canciones, sino también las sensaciones que éstas trasmitían, ejecutadas por estos impresionantes músicos.
Conciertazo en toda regla de uno de esos grupos que todo amante del blues y/o del rock debe
ía ver, no solo por la calidad que tienen que es mucha, sino porque son capaces de divertirnos al mismo tiempo que desbordan calidad. Simplemente geniales.
Y así concluía la segunda jornada de estas primeras fiestas Insonoro, donde los 4 grupos dieron auténticos conciertazos, fueron grandes no solo como músicos sino también como personas, sin olvidar el trato exquisito que recibimos por todo el personal de la Black Bird.