Fieles a la cita acudimos un año más al Festival de la guitarra de Córdoba, en esta 37 edición del festival el encargado de levantar el telón es Robe, líder de la banda Extremoduro, que esta vez nos muestra otra de sus caras que ha reflejado en dos discos en solitario “Lo que aletea en mis cabezas” y “Destrozares”, los cuales nos venía a presentar en el teatro de la Axerquia.
Un formato musical algo alejado a lo que nos tiene acostumbrados con Extremoduro, una gira por teatros, violines, acordeones, piano, clarinete…. Son algunas de las cosas que con Extremoduro no nos tiene acostumbrados.
Suficientes ingredientes como para saber que iba a ser una gran noche, arranco con el tema El cielo cambio de forma, pocos segundos nos bastaron a los asistentes para darnos cuenta que delante nuestra teníamos algo muy especial. |
Delicadeza musical, acompañadas de una lírica recurrente a veces aterciopelada y a veces más cruda que la realidad, sin duda el sello del estilo de Robe. Y para describir a la banda de músicos extremeños, de los que se rodea para este proyecto en solitario, sería Impecable. Más de uno se quedó con la boca abierta por su versatilidad y calidad instrumental.
El concierto se compuso de dos partes, una primera con las canciones más tranquilas de Robe, por decir algo, porque la intensidad y la energía de las canciones no bajo en todo el concierto. Canciones como; Hoy al mundo renuncio, donde se rompen las olas, Querré lo prohibido.
Para la segunda parte del espectáculo, después de 20 min de espera, comenzó con cartas desde Gaia, (con guiño a Extremoduro incluido en el intro), pasando por De manera urgente, Contra todos… para terminar con Por encima del bien y del mal.
Robe estuvo a la altura de inaugurar el Festival de la guitarra, eso sin duda, no defraudo a nadie. Conectó muy bien con el público desde el momento 1 y nos dejó con ganas de más. |