Los pasados 16 y 17 de febrero se celebró la “Rebel Night”, fiesta organizada por el sello independiente italiano Jetglow Recordings dirigido por GG Rock (BabyRuth, The Wankerss), que en esta ocasión materializaba su edición nº 7, por primera vez en nuestro país y de modo itinerante.
2 conciertos, 2 ciudades: Madrid y Barcelona; y tres bandas en directo: We Are Impala, Downtown Losers y The Wankerss.
Esta reseña se centra en lo que fue la noche en el Fun House Club de Madrid.
Abrieron el show los chicos de We Are Impala, banda de Mataró liderada por Xevi Strings (Black Rose Road, Warrior Soul) que hacen un rock ambiental con aires stoner. Uno no puede evitar compararlos con bandas como Karma To Burn o Toundra, compartiendo con estos la peculiaridad de ser una banda instrumental. Su sonido está muy cuidado, ejecutado con maestría y sus temas son hipnóticos, te sumerges en ellos sin echar en falta voz alguna. Temas como Delaylama, Tentakloj, Forgesis pertenecientes a su primer disco “Synesthesia” (2015) te llevan a paraísos sonoros dignos de viaje lisérgico.
We Are Impala
Tras unos minutos de descanso para el cambio de instrumentos subieron a escena Downtown Losers, o lo que es lo mismo: Alber Solo y Dolphin Riot. Dúo afincado en Madrid y con mucho bagaje a sus espaldas. Alber Solo es guitarra y cantante de blues que compagina su proyecto personal con Downtown Losers; Dolphin Riot fue batería de 77 y está, además, a los mandos del groove en el proyecto. Blues-rock con fuzz y buenos riffs, sin bajista, ¿hace falta más?, pues no, ni hace falta ni se echa de menos. El público no pudo evitar mover las caderas y disfrutar de los temas de su disco “One Horse Town Apocalypse” (2017), personalmente me encantó su show. Tras 40 minutos de concierto abandonaron el escenario. Nos dejaron con ganas de más, pero lo bueno, si breve, dos veces bueno.
Downtown
Para poner la guinda al pastel subieron a escena la última banda de la noche: The Wankerss. Estos chicos vienen de Padua, Italia; fueron la banda telonera en la gira italiana de Warrior Soul en su “Stiff Middle Finger tour” del 2012 y tienen en su haber “Tales For a Sweet Demise” (2010) y “Blackborn” (2015), dos auténticos pepinazos de punk-rock o más bien rock-punk con guitarras muy noventeras. Comenzaron su show con “An The Legion Goes…”, primer single de su último disco, y a partir de ahí no hubo concesiones. Durante lo que duró su actuación, sin apenas descanso entre tema y tema, mantuvieron al público (que ya estaba calentito) en estado de éxtasis.
Cuando todo acabó nos dio la impresión de haber presenciado una auténtica revelación y, por supuesto, había que acudir a Barcelona a ver de nuevo a estas bandas.