Villarobledo, Albacete, 1 pseudo-periodista musical, 3 días, 7 escenarios, 123 bandas, decenas de miles de viñarockers, y un mogollón de amig@s a quien preguntar cómo lo vivieron. Viña rock 2018 como nunca te lo contaron. Insonoro.com manda y no tu panda!

Nuestro don de la ubicuidad nos permitió degustar dos conciertos inagurales de la tercera jornada del Viñarock, ambos con bastante expectativa; en el escenario Villarobledo “Exceso es puro rock'n roll . Así lo demostró al abrir el tercer día de viñarock. Fuerza, potencia, actitud y conexión con el público. Reventaron el escenario a primera hora y nadie que estuvo ahí puede negarlo... ¿y dicen que el Rock'n Roll a muerto?” KKK - Kata, katador de kalimotxo.

Mientra tanto los valencianos (si, otros más) Auxili demostraban que han alcanzado un grado de madurez musical de elogiar, que han plasmado en un delicioso disco recién sacado del horno, “Tresors”, el cual estuvo muy presente en el repertorio que ofrecieron. Concierto breve, y >2 veces bueno; buena dosis de reggae que nos ha generado una adicción incondicional a esta joven banda con mucho futuro.

Cuatro días de festival que encaran la recta final, que se mantiene como unos de los grandes referentes del sector en todo el estado, y que nuevo han recibido el prestigioso premio “Festival preferido por la Benemérita’18”. Aunque queda más de medio año de festivales, el resto de candidatos declinaron optar el trofeo, alegando: “es imposible poder mejorar ese ratio de 1 guardia civil por cada 8,8 festivaleros,  efectivos armados con fusiles de asalto por el recinto, y un ambiente digno de favela carioca; se han vuelto a merecer el tricornio de oro este año”

“Cuando el Niño de la Hipoteca comenzó siendo un showman con sus canciones reventando las redes sociales y principalmente Youtube, nadie se esperaba su grandísima actuación cuando llegó a Viña Rock con banda. Este gran genio cantautor comenzó a sonar, su banda le acompañaba y en menos que canta un gallo, puso a medio Viña Rock en pie. Amenizando la preciosa tarde soleada, su concierto marcó un antes y un después en los recuerdos y momentos de muchas de las personas presentes, quedando éstos grabados en nuestras memorias, siendo el goce el único protagonista de su actuación.” Julia, miembro de la PAH.

“Parabellum, empiezan puntuales con alguna racha de viento y puntualmente alguna gota, pero salvan el momento, por momentos también brilla el sol. Ansias de verlos en directo, la media de edad no supera los 40, pocos por no decir casi ninguno habíamos visto a aquellos míticos de los años 90. Tienes ganas de verlos (por supuesto, en su día no tenías edad), y muchas expectativas pero eres realista, después de un parón de casi 20 años, su vuelta puede defraudarte, los años no pasan en valde.

Pero empiezan a sonar los primeros acordes y la piel se te eriza, recuerdas aquellos momentos en que ibas descubriendo su música. Si quizá se muevan menos, si quizá estén mayores, pero lo que tengo claro es que después de 20 años su vela aún no se apaga.

Súmale un aire de cojones de izquierda a derecha que hacía que casi se oyera más al niño de la hipoteca. Una leve llovizna que parece que te vas a tener que resguardar mientras tímidamente vuelve a asomar el sol.” Evi, veinteañera.

“ Sobre las 9:00 de la tarde el fuego verde llegaba al Viña Rock, miles de seguidores esperábamos ansiosos “saltar y cantar” con Green Valley. En el escenario Grow repleto en todos sus rincones del público unimos nuestro buen rollo y todo el positivismo que desprendía con su primera canción, “La Cura”, Ander Valverde.

Seguidamente nos brindó el “Regalo de vivir” con el que siempre despierta ese sentimiento de amar la vida y disfrutar el presente. Escuchar este grupo es recibir una terapia para el alma y una dosis de optimismo, alegría y fuerza, porque a continuación pudimos escuchar algún tema más como “No me voy a rendir”.  “Las estrellas del cielo” resonaron en este espacio como la voz de todas las mujeres que estábamos allí presentes y Ander supo dejar su huella de apoyo a la igualdad. Como he dicho al principio, la letra de “Fuego verde” también se escuchó siendo una reivindicación ante la situación política que actualmente tenemos.

Para finalizar este fantástico momento, al que ninguno de los allí presentes queríamos verle el final, nos tocaban el corazoncito y nos regalaron su canción de “Si no te tengo”, al que todos respondimos acompañando en una misma voz su letra.  Una vez más con Green Valley pasamos un gran rato <<saltando y bailando>> y lleno de buen rollo y buena música.” Maria, y de nombre también.

“En un festival con tanta variedad de estilos musicales es difícil declinarse por una sola actuación. Sin embargo, para algunos no significan lo mismo unos artistas que otros. Entre sillas, guitarras y cajones, Juanito Makandé deslumbró de nuevo sobre un escenario. Con la luna ya encima, el cantante sevillano derrochó arte y sentimiento entre los focos con sus apasionadas y profundas letras.

Existe el dicho "para gustos los colores", pero este fue ese tipo de conciertos en los que, fuera de pogos y de movidos bailes, disfrutas y te relajas. Así es él y su música en la vigésimo tercera edición del Viñarock: atrevido, intenso y con mucho arte. Las manos de Makandé volaban sobre las maderas de su cajón; era pura magia. Durante la hora y algo que estuvo interpretando sus temas, el cantante sevillano desprendía muchas ganas y emoción. Cada uno de sus temas llegaban al alma de todos los que estuvimos allí viendo la tan especial cita. El Viñarock nunca falla, pero tampoco lo hizo él. Juanito Makandé deslumbró en el festival de Villarobledo. Su música es puro arte, locura y sentimiento.” Inma, con luz y taquígrafo.

La guinda rapera del día llegó desde Sevilla “Muy buena acústica, a rebosar de gente. Tanto las canciones como el equipo en sí de SFDK estuvieron muy entregados a la peña, interactuando mucho. Cantaron las más importantes y conocidos, no se dejaron nada. Sin quejas. A destacar el momento de “Bajo el mismo sol”:mama yo quiero sentirme libre. Mucho frío. Mucha gente, a rebosar hasta las zonas de césped.” Nuria, arropada por el flow.

La recta final en los escenarios principales puso el colofón a cuatro días de música y convivencia. El poker de ases por el que optamos, sin desmerecer al resto de escenarios, nos harán recordar lo allá vivido por mucho tiempo. De entrante uno de los conciertos más multitudinarios de esta edición, después de dos años volvía La Raíz, aunque con un set-list con poquísimos cambios, dieron la talla en su concierto de “hasta luego” (mejor que “despedida”). De primer plato una de las bandas más divertidas del panorama actual, Dubioza Kolectiv, presentándonos “Pjesmice za djecu i odrasle”, que en cristiano significa “Canciones para niños y adultos” (gracias google), un batido de ritmos mezclados con folk bosnio y otras fórmulas de no parar de contonearse durante una hora.  De segundo plato psicotrópicos por vía auditiva, Narco, cada día más adictivos, y repartiendo “Espichufrenia” para fieles y neofitos.

¿Y qué mejor manera para cerrar bodas, bautizos, comuniones y festivales? “Una vez más, ZOO es un grupo que no decepciona. Es la segunda vez que disfruto de un concierto de este grupo gandiense y no te da tiempo a aburrirte o pensar en que se está alargando el concierto. De hecho, siempre se me hacen cortos, incluso habiendo sido el último concierto del Viñarock. Cuando parecía que me había convertido en un cadáver incapaz de disfrutar de más conciertos, ZOO me hizo sacar energías y disfrutarlo. Tienen muy buen directo y en ningún momento decepcionan, volveré a conciertos suyos siempre que pueda.” Pedro, en las raves de después pedía que pinchase más Zoo.

Siempre pasión por el ruido. Hasta la próxima.