Poco después llegaba el turno de las Tequila Mockingbyrds, que al grito de “Fiesta, no siesta” descargaron su punk/rock sobre las tablas. Aunque resulta difícil encasillarlas en un estilo concreto, recuerdan muy gratamente a grupos como The Runaways o Girlschool.
Es increíble la caña que pueden meter estas tres chicas, destacando sobre todo la labor a las baquetas de Josie O’Toole, ¡que parece que de un momento a otro va a hacer astillas la batería!
Poco a poco fueron cayendo temas de su álbum debut 'Fight and Flight”, editado el año pasado. Todos bailamos al ritmo de “Money Tree”, “Never Go Home”, “Shut Me Down”, “Somebody Put Something In My Drink”, o la esperadísima “I Smell Rock 'n' Roll”. También nos sorprendieron con “Tell Me”, un adelanto de lo que será su próximo disco y que desde ya digo que pinta demoledor.
Su front-woman Louisa Maria Baker hablaba un español bastante fluido, y entre canción y canción no paraba de agradecer a todos los asistentes, a Fran, y a la gente de Hellbilly el haber hecho posible este concierto. También nos comentó que el día anterior había sido el cumpleaños de la bajista, Jacinta Haye, e inmediatamente toda la sala entonó el “Cumpleaños Feliz”.
La noche deparaba más sorpresas, y entre risas, buen rollo, chupitos de tequila, y rock n’ roll las australianas se despidieron, no sin antes recibir de manos de Fran una guitarra de regalo, y la recaudación de más de 800 euros que se consiguió a través de los donativos.
Espero que esta noche en La Tribu endulzase un poco el mal sabor de boca que les había quedado tras su percance en Barcelona. Las T-Byrds no perdieron la sonrisa en ningún momento, y nos dieron una buena lección de rock ‘n’ roll. ¡Habrá que seguirles la pista! |