Carretera y manta cogeríamos de nuevo, otro año más, para asistir a la que es ya la decimotercera edición del festival Leyendas del Rock, que desde 2013 se está celebrando en el complejo polideportivo de Villena, Alicante. Como viene siendo en los últimos años, el festival constaría de 4 días, empezando el día 8 con la fiesta de bienvenida, incluida de manera gratuita para quien tuviera el Abono completo, y a un precio reducido de 8€ para los que quisieron asistir únicamente ese día.

No había muchas novedades respecto a ediciones anteriores en cuanto a distribuciones y espacios se refiere, el camping de nuevo tuvo una zona, de pago, en sombra, y una zona de acampada libre y gratuita al sol. Se volvió a contar con los Buses de baños VIP, que por 5€ al día, contratándolo allí mismo, podías subir y disfrutar de unos baños limpios y aseados, con aires acondicionados, e incluso hilo musical, quiero suponer que esto es un servicio externalizado que ofrece el festival, ya que es una empresa la que lo hace, y es común verlo por distintos festivales.

Otro tema a recalcar, y que es sello del festival (por desgracia, porque es algo que debería ser muy normal) es el poder introducir al festival cualquier tipo de comida y agua. En la zona principal, los 2 grandes escenarios donde los cabezas de carteles celebrarían sus conciertos, y luego en la carpa, con el escenario Mark Reale, donde paralelamente habría otros conciertos también.

Llegaríamos sobre el mediodía, de la fiesta de bienvenida, y como las taquillas estaban abiertas desde el día anterior, no había que esperar más de un par de minutos para canjear las entradas por las pulseras del festival, algo que me dijeron que fue habitual durante el resto de días, no se formaron grandes colas en taquillas; Al igual que al entrar al recinto del festival, otros años hemos vivido largas colas que se producían para acceder al interior, este año no hemos visto que se hayan producido, también hay que recalcar que este año la asistencia del festival ha sido inferior sustancialmente respecto a la del año pasado, lo cual hace que las cosas, por fuerza, sean menores.

El primer día, para arrancar motores, y como apertura oficial del festival, tendríamos a la banda sevillana Stingers, que rinde tributo a los míticos Scorpions. Con banderolas a los laterales con el logo de la banda y un aguijón gigante en la batería, Panchi, cantante y frontman de la banda, sale acompañado como siempre por Javi, quien hace el papel de Rudolf. La banda sacó un trabajo de estudio en 2017, Transition, con temas propios al estilo de los alemanes, y esperaba haber visto un setlist más centrado en el disco, que además contó con muy buenas críticas, pero decidieron apostar a lo seguro, para la mayoría, y fueron temas de Scorpions lo que sonaron, quizás fue fallo de como anunciaron o enfocaron la actuación, porque estaban anunciados como “Tributo a Scorpions”, en el cartel, y por ello no tuvieron margen de meter temas propios. Aún así dieron muy buen espectáculo y no faltaron los clásicos que todo el mundo esperaba como “Still loving you”, “Rock you like a Hurricane” o “Big city Nights”.

Después del show de Stingers, los siguientes en tocar en el escenario contiguo eran Ars Amandi, recordamos que la inclusión de los de Ávila viene precedido de una desgracia, el parón indefinido por problemas de salud de Boni, que era quien inicialmente iba a tocar este día. Actualmente la banda del cantante Dani Aller viene gozando de un gran directo, prueba de ello es su último trabajo en DVD que sacaron recientemente. Nos dejaron clásicos del grupo como “Escuchando al corazón”, “La Suerte está Echada”... y algunos momentos emotivos, como su particular tributo a Triana con “Abre la puerta” y un inesperado homenaje a Boni y sus barricada con “Esto es una noche de Rock&Roll”, que todos los asistentes participaron dejándose sus gargantas para homenajear a uno de los grandes de nuestro rock patrio en estos momentos difíciles para él, esperamos poder tenerlo junto a su banda en la próxima edición.

Llegarían la primera banda de fuera de nuestras fronteras, los estadounidenses Riot V, que poco o nada quedan de aquellos míticos Riot, pero que como banda nueva, están sacando buen material de estudio y haciendo las cosas muy bien. Actualmente al micro está Todd Michael Hall, al bajo Don Van Stavern y junto a él a la guitarra Mike Flyntz como miembros que coincidieron en la última etapa del difunto Mark Reale en Riot; Nick Lee a la otra guitarra y Frank Gilchriest a la batería. La banda ha sacado recientemente este año su segundo trabajo de estudio desde que adoptaron el nombre de Riot V sin Reale, Armor of Light (2018), y de éste saldrían algunos temas que pudimos escuchar, como “Victory”, con el que abrieron el show, no tardaron mucho en meter clásicos como “Flight of the Warrior” o “On Your Knees”.

El sonido al comienzo no fue bueno, donde la voz estaba muy pisada por los instrumentos, algo que cambió a los minutos y ya pudimos disfrutar de un gran concierto. “Take me back” de su anterior trabajo, “Angel's Thunder, Devil's Reign”, “Swords and Tequila” y como no, para acabar el concierto, “Thundersteel” de aquel famoso álbum de 1988 que tanta fama dio a la banda. Dieron un concierto muy bueno repleto de clásicos de la época de Riot y temas nuevos de esta nueva formación que tan bien están haciendo las cosas. Recordamos que era una asignatura pendiente del festival, ya que sabemos que la organización era gran fan de los americanos, de hecho, sólo tenemos que ver el nombre del escenario de la carpa, bautizado con el nombre del fallecido guitarrista, Mark Reale.

Sin mudarnos de continente, los siguientes en venir eran los brasileños Sepultura, y aunque yo soy un nostálgico de la época con los hermanos Cavalera al frente de la banda, tengo que decir que se marcaron un concierto de altura, posiblemente de los mejores de todo el festival, y es que la banda formada por Derrick Green al micro, Paulo Jr. al bajo (como único miembro de la primera formación), Andreas Kisser a la guitarra y el genial Eloy Casagrande a la batería, viven un gran momento de forma, y ello lo están reflejando en sus discos de estudios y en sus directos demoledores. Abrieron con “I am the Enemy”, de su último trabajo “Machine Messiah”(2017), el setlist estuvo intercalados con temas de la etapa de Derrick con algunos clásicos de la época de los hermanos, como “Territory”, “Arise” o los 2 temas que enlazaron para acabar el concierto, “Ratamahatta” y “Root Bloddy Roots”, curiosamente el año pasado tuvimos a Max Cavalera interpretando en su totalidad el álbum Roots, en su gira Return to Roots, y perdieron éstos por goleada, porque nada tuvo que ver el show que ofrecieron Kisser y los suyos con lo que Max nos dejó.

Con un “Gracias Maestro” en las pantallas y la foto de Rosendo, llegaría el que posiblemente sea uno de los últimos conciertos en el que podamos verlo, y es que se encuentra inmerso en su gira despedida, y si se tratase de otro músico u otra banda, diríamos que eso está por ver... pero si hablamos de un tío tan integro y derecho como es Rosendo, hay que tomárselo en serio. “Aguanta el tipo” para abrir el concierto y demostrar que en ello está, ¡¡y de que manera!!, “Cada Día”, “Cosita” para el primer tramo del concierto. El público estaba entregado al señor Mercado y al gran concierto que estaba ofreciendo.

Su clásico “No dudaria” de Antonio Flores, y otro recordatorio con “El tren” a sus Leño dejaron muy buen sabor de boca. El tramo final de concierto estuvo lleno de himnos, como “Flojos de Pantalón”, “Pan de higos”, “Agradecido” y de nuevo, tirando de leño para acabar “Maneras de vivir”. Con una despedida emotiva a su estilo, se marchaba humildemente del escenario un grande de nuestra música. Más tarde, en la carpa de firmas de artistas, Rafa, el bajo de la banda, estaría firmando su libro que ha sacado recientemente “Mil Maneras de volver al hotel”.

Llegando ya al final de la jornada, la penúltima banda en actuar hoy, eran Soziedad Alkoholika que formando con Juan al micro, Iñigo y Jimmy a las guitarras, Pirulo al bajo y Alfred a la batería, tenían la difícil misión de coger el relevo del escenario que le había dejado Rosendo con un emotivo concierto; Pero los vascos saben muy manejarse en este tipo de terrenos y muy pronto levantaron a todos los asistentes, con “Alienados”, tema de su trabajo reciente “Sistema Antisocial”(2017). Gran sonido y gran espectáculo el que pudimos presenciar, cargado de mensajes políticos no sólo en las canciones (esto es obvio) sino también entre canción y canción, donde dejaban claro sus ideales, por si alguien tenía dudas, esto es algo que a no todo el mundo le gusta, y escuchaba muchas críticas al respecto (es distinto cuando vas a un concierto de ellos, que sabes a lo que vas), en un festival donde son muchas bandas y no es tu público concreto, puede ocurrir esto. De todas maneras entiendo que es un grupo que nunca ha escondido lo que son, y estas en tu derecho de no escucharlos e irte a comer o beber y desconectar un poco, que es necesario también de vez en cuando. “Cienzia Asesina”, “Ratas”, “Piedra contra tijera” o “Nos vimos en Berlin” son algunos de los temas que acompañaron el setlist del concierto de 80 minutos que disfrutamos.

Con el concierto de SA dimos por concluido el día, ya que aunque eran menos conciertos los que tocaban hoy, el viaje de muchas horas nos dejó finiquitado a estas alturas de la noche. Sé por varios amigos que Gigatron la liaron bien a su estilo, y supieron mantener a la gente bien animada hasta el final del concierto. Mañana más!.

Nota: las fotos fueron realizadas con un móvil, lamentablemente la organización del Leyendas del Rock no nos concede pase de fotos desde hace un par de años, antes sí...