Otro de esos sábados, en que se amontonan muchos conciertos y más que interesantes en toda la geografía cántabra, era este primero del mes de noviembre, pero no me costó mucho decidirme en acudir a la presentación del esperado nuevo disco de Kaskarriak “Padece mentira”, nueve años después de su segundo trabajo, acompañados de Método Vasili.
El concierto tenía lugar en el Rock Beer The New, el que puede considerarse el templo del rock más combativo y underground del centro de Santander, y con una entrada al precio simbólico de 3€, llevándote el CD por sólo 2€ más; la verdad es que no había excusas para que todos los seguidores al punk acudiesen a esta cita tan especial.
Y la verdad es que se notó que había ganas de ver a las dos bandas, ya que la gente se acercó en una importante cantidad para ver a estos grupos que se prodigan poco en directo, o al menos no tanto como nos gustaría, pero que son sinónimo de calidad en sus conciertos y en sus discos, repletos de canciones que han llegado muy dentro a muchos de nosotros.
La noche la abrían Método Vasili, a punto de cumplir un año desde la edición de su segundo disco, “La radiografía del miedo”, aunque, tras presentarse como un grupo tributo a Julio Iglesias, iniciasen su concierto con ese “Manifiesto”, que, en el año 1992, publicaron los torrelaveguenses Indigentes y que ellos ya han hecho casi suya desde los inicios de la banda, siendo publicada en su primer disco “Fácil, sencillo y para toda la familia”.
Sin pausa alguna y sonando brutales desde el primer minuto, siguieron con “Su siniestro plan”, de su actual disco, antes de recordar aquel himno de su anterior trabajo llamado “En las calles de Portugal”, en la que, en su parte final, obviaron los nombres de los bares al estar casi todos cerrados.
Con Nando, vocalista y guitarra, como maestro de ceremonias, saludaron a todos los presentes, así como a los que habían hecho posible que estuviesen allí y recordaron que habría un sorteo de material de ambos grupos, antes de seguir con otro tema de su nuevo disco llamado “Tiempos nuevos”, para recordar la ocupación israelí de Palestina en “La última flor”, de su anterior obra y que es una de las piezas más celebradas en sus conciertos.
Si hay una canción que me ha gustado desde que la escuche de su actual disco es “Una bala”, una canción tan dramática como real y de las que te ponen la carne de gallina, para, tras un breve respiro, volver a su anterior obra con “Plutonio”, otro tema de los que más gustan en sus conciertos.
Método Vasili
Quien haya visto a la banda alguna vez en concierto sabrá que no son una banda muy dinámica en directo y es que se dedican a interpretar sus canciones sin muchos alardes pero con gran calidad, como pudimos comprobar en “Voy a enloquecer” y “Lucifer y Satanás”, de su actual disco.
Empezaron a despedirse, agradeciendo de nuevo a Kaskarriak el que le hubieran llamado para este evento y a la sala por el trato recibido, recordando ese “Instinto animal”, de su anterior obra, para seguir desgranando piezas de su nueva obra como “La última canción”, sin muchos ademanes pero sonando genial, en una canción que habla sobre la triste historia de la heroína, como nos recordó Nando, que propuso escribir otra de las casas de apuestas.
Aunque siguieron despidiéndose, aun quedaban varios temas por interpretar, como ese “A veces llueve”, de su actual disco, o, sin pausa alguna, ese himno que se llama como la banda, “Método Vasili”, y que abría su primer disco y durante mucho tiempo sus conciertos.
Ahora sí, llegaba la despedida con esa adaptación que han hecho del “Noche apatxe” de Negu Gorriak, aunque era original de los franceses Bérurier Noir, con proclamas a favor de la libertad de los presos políticos, y que me gusta como les ha quedado en su actual disco, donde también está presentes ese “Kaos controlado”, que ponía punto y final a su actuación tras menos de una hora de actuación.
Creo que ya lo he dicho en alguna otra ocasión, pero, bajo mi punto de vista, Método Vasili han salido reforzados por la presencia de Mario a la batería y Cheska a la guitarra, que, junto al mencionado Nando y al siempre activo Darío al bajo, conforman una banda muy solida, sobre todo en directo, con un sonido muy mejorado, acompañado de esas grandes canciones que tienen.
Método Vasili son un estandarte del rock más combativo de la capital del Besaya y una de las bandas que más proyección tienen tanto dentro como fuera de nuestra tierruca; ahora solo falta que sigan dando tan buenos conciertos como el de esta noche y dejando ese mensaje contestarío, cada vez más necesario en estos tiempos de auge del fascismo en todos los ámbitos de la vida.
Y llegaba el momento de los protagonistas principales de la noche, es decir unos Kaskarriak a los que, si mi memoria no me falla, hacia más de 3 años que no veía en directo y además en esa misma sala.
Tras agradecernos a todos nuestra presencia, comenzó la actuación recordando al sujeto que actualmente ¿gobierna? nuestra comunidad con ese “Comediante”, presente en su anterior disco “Que nuestros hijos nos perdonen”, donde también estaba “Tecnomachine”, con sus dos cantantes, Gros y Villas, desde el principio del concierto cantando entre el público, dejando el escenario para la actual formación de la banda, integrada por Nacho y Mujica a las guitarras, Ales al bajo y Pilatti a la batería.
Volvieron a agradecernos el que estuviésemos allí y el trato recibido, para empezar a desgranar las canciones de su “Padece mentira” con el tema que le da nombre, para, tras recordar el sorteo que iba a haber, seguir con “Cualquier tiempo pasado” y que habla sobre la escasa presencia de juventud en los conciertos, algo que pudimos constatar allí esa noche.
Continuaron presentando su nuevo disco con “La voz dormida”, un tema que me sonó muy directo, para seguir con “Muros y rejas”, en la que vacilaron sobre que había otra canción de igual nombre pero que no era una versión sino un tema propio.
El año pasado habían subido a internet un Ep de versiones, que también aparece en su actual disco, y que contenía temas como “Estallará” de Kondenados al Frakaso, banda germen de Kaskarriak ya que de ahí procedían Ales y Nacho y cuyo cantante iba a haber subido a cantarla pero al final no acudió, antes de seguir con “Solo se puede gritar”, en la que colaboró uno de los cantantes de los ecuatorianos Cucarachas Extranjeras, banda con la que están hermanados, y que quedó muy bien en directo.
Y sin cesar en la colaboraciones, llegó el turno de Obre de los Pandemónium Light, compañeros de muchas batallas de los Kaskarriak, para interpretar su versión de “Legalización”, de los orígenes de los primeros, antes de dar paso a Manel del los míticos K.D.K, de los que interpretaron “Regüelta”, tema ya incluido en el disco homenaje “Kantabria resiste” del 2012, para, también con Manel como colaborador, dejarnos, antes del parón para el sorteo, con ese “Disturbios”, que estaba presente en su anterior disco y que pasa por ser la canción más aclamada por los seguidores de la banda, que disfrutamos de esta especial interpretación.
Kaskarriak
Tras un breve descanso para el sorteo de dos lotes de productos, uno de cada banda, y que casualmente fueron a parar al mismo concursante, siguieron con “Silban las balas”, de su actual obra, confesando que estaban en la parte final del concierto, antes de seguir, sin pausa alguna, con “Dinero” y “La crisis de los ricos”, ambos de su actual disco, y en las que nos pidieron que nos moviésemos un poco más.
Quejándose de estar muy cansados y de estar viejos, siguieron repasando su nuevo disco con “Cuanto cabrón”, preguntándonos quien no se ha encontrado más de uno, para, tras confesar que en el disco las canciones suenan mejor, seguir con “El miedo”, también presente en el nuevo trabajo.
Era el momento de un tema para los que tenían morriña de los temas más antiguos, siendo el turno de “Marginación social”, de su anterior obra, para volver a su nuevo disco con “El juego de tu vida”, que, como el resto de las canciones del disco, tienen muy buena pinta.
Presentaron a la última incorporación a la banda, Mujica, aunque ya lleva tres años con la banda, para seguir con “La cruz de la moneda”, otro mítico tema que estaba presente en su anterior obra, para seguir con una versión de “La droga” de Guerrilla Urbana, con la que empezaron a despedirse.
Sin embargo, aun había tiempo para la muy aclamada “Tu ruina”, de su primer disco “La excusa del progreso” del 2002, y regrabada para su nuevo disco, para terminar, en principio, con “Antifa”, presente en su nuevo disco y para la que sacaron una bandera antifascista, la única que de verdad vale.
Pero la gente queríamos más y nos ofrecieron la versión de “Color de corazón” de Maniática, para la peña de toda la vida, antes de despedirse con otra mítica de su propia cosecha como es “Hipocresía”, de su anterior obra y con la que finiquitaron su actuación tras hora y cuarto de punk directo.
Una verdadera alegría, la verdad, tener de nuevo de vuelta a la gente de Kaskarriak, una banda que nos ha dado siempre grandes conciertos, como el de esta noche, y que estamos seguros que, a medida que rueden algo más la formación y las nuevas canciones, desconocidas para la mayoría de los presentes, nos seguirán dejando grandes noches.
Ahora toca familiarizarse con los temas nuevos y poder seguir viendo a la banda en directo, porque Kaskarriak son una banda necesaria en el rock cántabro.
Y así, tras más de dos horas de buen rock combativo, con dos concepciones distintas pero no excluyentes de dicho estilo, me fui del Rock Beer The New, con la satisfacción de haber podido ver a dos bandas, que son de lo mejor que tenemos en directo y que, además, editan grandes trabajos; esperemos que se sigan prodigando en directo y sigan dándonos noche como ésta.