El cuarteto Tremenda Jauría aterrizó en la Jimmy Jazz de Vitoria-Gasteiz la noche del sábado 16 de marzo tras un intenso concierto en Iruña la noche anterior. El colectivo madrileño con su cumbia-rock y otras sonoridades tropicales como grito de guerra puso a bailar a toda una sala deseosa de entonar himnos antipatriarcales a golpe de cadera. 

Les acompañaron sobre las tablas del escenario gasteiztarra La Mare, formación que llegó también desde tierras madrileñas para presentar los temas que dan forma a su álbum "Sal, arena y mar".

La presentación de su última obra ante un gran número de público gasteiztarra dio comienzo con la descarga de "Sal, arena y mar", tema que da nombre a la última publicación de la banda liderada por la artista Mar Muñoz, cantautora andaluza y amante de los ritmos del mundo y la fusión.

La Mare, con Mar Muñoz y su banda "El Combo Guánabi", interpretaron una docena de canciones con letras cargadas de mensaje y, que con su energía y sentimiento nos acercaron diferentes culturas del planeta tierra hasta la sala Jimmy Jazz. El grupo navega en sus canciones por los ritmos afro-latinos y melodías que suenan a mar, a tierra y a libertad.

De sus nuevas canciones el cuarteto nos regaló entre otras la interpretación de "Sol", "Sal", "Canto", "La loba" o "Que duela", una de esas canciones que la audiencia presente en el local quiso tararear de principio a fin. Tampoco faltó en el repertorio de la noche "Juntas", corte más veterano y bailable con el que cerraron su paso por el tablado del local gasteiztarra.

La Mare ofreció un directo cargado de fuerza, mensaje y reivindicación. Esa reivindicación tan necesaria y por suerte, cada vez más presente en el mundo de la música.

Decenas de mujeres se dieron cita en la Jimmy Jazz y con su voz y sus bailes acompañaron a una banda que llegaba a la capital vasca para presentar las canciones que dan forma a "IV", su última referencia. Un trabajo que previamente habían presentado entre otras en localidades como Oviedo, Lugo e Iruña, la noche previa.

Tremenda Jauria es fiesta y reivindicación. Y con una fuerza innegable hicieron menearse a una Jimmy Jazz que presentó una muy buena entrada la noche del sábado 16 de marzo.

Mucho habíamos oído hablar de este combo que combina cumbia, punk, reggaeton y rap en sus canciones y a la que por fin le íbamos a tener frente a nosotros. Tremenda Jauría ya nos había ganado con su eléctrica salida a la tarima; una salida en la que pudimos ver a las protagonistas de la noche ataviadas con esas máscaras de gas protagonistas de videoclips y su reconocible logo.

Tremenda Jauría, que cuenta con un buen puñado de trabajos, supo ofrecer un espectáculo diferente y altamente combativo a sus seguidoras alavesas y a aquellas que se desplazaron de otras partes de la península, como un grupo de amigas con las que tuvimos ocasión de hablar que habían recorrido más de 400 kilómetros para disfrutar de su directo. La sala no se llenó pero hubo un ambiente inmejorable, y gracias a ello bajo la tarima se pudo bailar y perrear sin agobios. "El perreo va a cambiar de bando" y "autotune para el pueblo" fueron algunas de las consignas que se escucharon en una velada muy reivindicativa.

Gracias Tremenda Jauría por vuestro compromiso y por apostar por ofrecer algo diferente que, como pudimos comprobar el sábado, tiene cada vez más seguidoras. La formación madrileña calentó a su público a lo largo de toda la velada y entre luces fucsias que dificultaron el trabajo de fotógrafos y fotógrafas, descargaron canciones que combinaban rock, cumbia, punk y reggaetón y que nos hicieron bailar cumbia toda la noche.

Gran noche de compromiso, resistencia y reivindicación muy necesaria en los tiempos que corren, de la mano de La Mare y Tremenda Jauría.