Últimamente me da la sensación de que está de moda el resurgir de bandas. Decían los Who que preferían morir antes que llegar a viejos. No sé si era sólo una frase compuesta para dar que hablar, pero me encanta ver como se rompen este tipo de “ideas”, que grupos como Koma nos conceden segundas oportunidades y, como tiene que ser, sin ningún tipo de complejo. Desde que el año pasado retomaran lo aparcado, no han hecho más que petarlo. El Sábado 23 de Marzo, venían a una Jimmy Jazz que vendía todas las entradas, y no sería para dejarnos con las ganas.
De la mano de Black Izar llegaban The Lizards. Cuando un sello que mueve gente como El Drogas, Willis Drummond o los mismos Koma (grupo para el que abría este trío catalán) se fija en una banda, es que ésta tiene potencial. Escuchando sus canciones se intuye que una formación así gana en directo, y lo pudimos confirmar desde que sonara la primera nota.
The Lizards. Texto: Nessa Teruelo @nessateruelo_photo
El ambiente a primera hora era frío, aún teniendo todas las entradas vendidas, la sala no llegaba a estar ni al cuarto de su aforo, pero los de Barcelona comenzaron de igual forma intentando“quemar la ciudad” con “Burning City”, para continuar con el tema que da nombre a su segundo disco: “Road to Anywhere”. Se empezó a ver que el público se dejaba llevar por su música y poco a poco el ambiente en la sala fue tomando forma mientras emergían las ganas. La noche se tornaba especial, pero no duraría más de lo acordado; pisando a fondo el acelerador, ya no había quién parase a este trío que desbordaba energía y buen rollo mientras interpretaban “Beware”, también del segundo Lp. La sonrisa eterna de Edgar (Batería), el desparpajo de Judith (Bajista y coros), junto a la presencia escénica que demostraba Carla (voz y guitarra), hacían una combinación idónea para una buena velada de rock.
Dejaban pocos huecos entre canciones, parando quizá en alguna ocasión para presentar de forma escueta el tema siguiente; y así, tocaron varias de su nuevo álbum, "Inside your head", llegando el momento más intenso de la actuación, con “What I am”, “Twisted Mind” y “Sing out Loud”, con lo cual echaban el cierre para dar paso a los navarros.
The Lizards. Texto: Nessa Teruelo @nessateruelo_photo
Koma, referentes del rock-metal estatal, han vuelto a los escenarios y lo han hecho por todo lo alto, completando el aforo de gran parte de las salas por las que han pasado y ofreciendo unos shows de lo más eléctricos y auténticos. El de Vitoria-Gasteiz lo fue así de principio a fin la noche del sábado 23 de marzo.
Cuando una banda veterana regresa a la escena tras años de inactividad, su vuelta puede generar ciertas dudas entre sus seguidores y seguidoras. Pero con Koma esos recelos desaparecieron en cuanto comenzaron a entonar uno de sus primeros himnos de la noche. Con "Niños de lapos guerra" arrancó un show en el que el cuarteto apenas dio tregua a sus fieles. Fieles que aunque tardaron más de lo esperado, agotaron todo el papel disponible días antes de la esperada cita.
Brigi, Rafa, Natxo y Juan Carlos se comportaron como autenticas bestias sobre las tablas de la sala Jimmy Jazz, regalaron a la audiencia gasteiztarra una de esas noches para el recuerdo y se exprimieron al máximo sobre la tarima descargando un repertorio compuesto por casi una treintena de temas. ¡Más de dos horas de explosivo directo!
Tras la detonación inicial con "Tio Sam", "Jack Queen Jack" y "El pato" continuaba una velada en la que los de Pamplona realizaron un completo repaso a su sólida discografía. Koma editó ocho trabajos desde 1995, año de su creación, hasta 2012, momento en el que llegó su disolución.
Koma. Texto: Borja Triviño @borjatrivi
Las ganas de tocar de unos músicos hechos para la carretera y los escenarios, les hicieron reunirse y pactar un retorno en el que volver a despertar a una fiera. Y ese apetito quedó reflejado a su paso por tierras alavesas. La banda se mostró muy enchufada y pronto conectó con un público que se encontraba ansioso por dejarse la voz en canciones como "El muro de Berlín", "Protestantes" o "La almohada cervical".
A lo largo de la noche también hubo tiempo para los temas en acústico, con Brigi y Natxo interpretando sentados y al frente del escenario "Deprimido singular" y "Buitres". Pero la acción pronto volvió a una sala en la que los pogos, los bailes y los saltos fueron continuados.
Llegábamos extasiados a la parte final de una actuación en la que la formación también había contado con una sección de vientos durante la interpretación de "El sonajero" y con la txalaparta al comienzo de "Sé dónde vives".
Los Koma han vuelto rabiosos y enérgicos tras casi seis años de actividad. Un regreso esperado y que se ha convertido en una de las grandes noticias musicales de estos últimos meses. En Vitoria-Gasteiz nos regalaron un concierto soberbio y ya estamos pensando dónde volver a disfrutar con sus canciones. ¡Será por fechas confirmadas!