Nos encanta conocer nuevas banda, y si son de la tierra, más, y si además acaban de sacar disco y lo presentan en el Black Bird, pues es el no va más, y eso es lo que pasó el sábado 1 de junio con la joven formación Rumbleweed, creada a inicios del 2018 y que hace pocos meses estrenaron su primer trabajo “Djinns of Duna”.

La banda de Stoner rock tiene dos frontmen en sus filas, Rubi y Gad, bien acompañados por Hugo y Javi a las guitarras, Pitu al bajo y Cañas a la batería, este último, viejo conocido de la escena musical cántabra por formar parte de bandas como Papa Shango o The Chigros.

Noche de presentación pero también noche de champions y eso suele ser sinónimo de malas noticias, pero la verdad es que ni el Liverpool ni el Tottenham aguaron la fiesta a estos jóvenes que estuvieron apoyados en todo momento por amigos y familiares, digamos que pasamos de las 100 almas, y sinceramente creo que fue un éxito total. Por cierto, felicidades a todos los aficionados de la zona del Liverpool por la victoria, me consta que sois unos cuantos.

Cosas que nos llamaron la atención de Rumbleweed, primero la presencia de dos voces, es raro ver un grupo de Stoner con tal característica, dos voces que se complementaban perfectamente, bien sincronizadas y respetándose entre sí, otro dato, la grabación del trabajo que presentaron esa noche, que se fueron a uno de los mejores estudios del país como es el OVNI Studio de Llanera, Asturies, dirigido por Pablo Martínez, una de las voces de Desakato, que se encargó de las labores de grabación junto con Kike Sanchís de Green Desert Water (grupo muy a fín a los gustos de los cántabros), que también realizó la masterización en Green Desert Mastering.

El disco consta de seis temas, obviamente les tocaron todos empezando por “The Acme of Stupidity” y “Catch the Bunny”, eso si, echamos en falta algunas palabras a modo de presentación e introducción como solemos ver en la mayoría de presentaciones de discos, quizás la banda estaba nerviosa, y no es para menos, un disco no se presenta todos los días. También sufrieron varios problemas técnicos, uno de sus cantantes no acabó contento de todo con los monitores y en algunos cortes no se le veía muy a gusto, y realmente lo estaba pasando mal.

“Suffocation” y “Soul Devourer” fueron otras de las novedades, y entre medias canciones que no identificamos como “Dreams” o “Cañas”, esta última suponemos que aún no tenga nombre definido al llamarse como el apellido del batería.

Trece canciones son las que tocaron, ni una más ni una menos, terminando el concierto a eso de las 23:30 y poniendo toda la carne en el asador en el último de los temas con el bajista ya a ras de público, y uno de los cantantes, minutos antes, lanzándose sobre el respetable que le esperaban con los brazos abiertos en plan “sillita de la reina”. Pero antes, no se olvidaron de “Djinns of Duna”, y “Tailored” que eran los dos últimos temas del Ep por salir.

Por delante tienen un largo camino por recorrer, el primer paso ya está dado, ahora les toca ensayar e ir mejorando con el paso de los meses, ya que bandas de Stoner en Cantabria se necesitan como el comer, y más desde que Complejo de Edipo no da señales de vida.

Nos vemos!