Para el segundo día, el Z! prepararía una sesión vermú en la Plaza de Marina en el centro de la ciudad con las actuaciones de Greenblues y Auritz. Atrajeron bastante público y se creó un ambiente muy ameno y animado, todo aquel que pasaba por allí se apuntaba a la fiesta.
Vamos a por la segunda jornada del festival
Puntuales acudimos a la cita con los natales Klanghor en el escenario Red Mediaria a las 5 de la tarde bajo un sol abrasador. Tuvimos una grata sorpresa al ver caras conocidas, y es que a tres de los cuatro músicos ya les habíamos visto 2 años atrás en la Catedral de la ciudad en la Warm Up que organizó el Z! tocando en la banda Sin Control. Éstos chicos suenan muy bien, se les notan las tablas y sus virtuosismos musicales.
El grupo se formó hace 20 años en Zamora, y se han reunido después de varios años sin tocar, fue todo un hito presenciarlo. Caldearon el ambiente con energía, gran dinámica en sus canciones, mezclando guitarras rápidas, limpias y melódicas con frenéticos compases. Terminaron con “Fuego mortal” dedicada a un amigo y se despidieron entre un fuerte aplauso. Dejándonos con los minutos justos para desplazarnos al escenario principal.
Klanghor
Los madrileños Eon perforaron nuestros sentidos con su potente y contundente metalcore en el escenario Thunderbitch. Un grupo hasta ahora desconocido para nosotros y que nos dejó muy buen sabor de boca. Durante 40 minutos sus bestiales ritmos de batería y bajo fusionados con la versátil voz de su vocalista cambiando de melódico a gutural nos dejaron impactados.
En su gira presentaban su trabajo llamado “Médula” y afortunadamente pararon en el Z!. Mientras nos hidratábamos notábamos como temblaba todo el auditorio. Unos bestias, su actuación se nos pasó volando.
Eon
Era el turno de Killus, metal industrial que nos vino como un jarro de agua fría en la calurosa tarde zamorana que estábamos teniendo, más que la anterior jornada, ya que no corría ni una gota de aire. Empezaron con su intro y “Feel the monster”, pelos como escarpias al presenciar su potente puesta en escena. Impresionante la adaptación de Javi (nuevo cantante) en la banda, parece que lleva toda la vida con ellos, su voz rasgada y potente encaja a la perfección. Presentaron un nuevo tema llamado “Vortex” el cual nos pareció muy contundente.
A continuación tocaron una versión de los Nine Inch Nails llamada “Wish”, y como no podía faltar, en el tema “Imperator” nos dejamos llevar por los botes al ritmo de la batería. Elevaron el festival gracias a su repertorio y gran puesta en escena. No defraudan nunca, basta con ver cómo responden los asistentes de sus conciertos dándolo todo, con circles pits incluidos. Pegadizos y cañeros riffs de guitarra como nos tienen acostumbrados, ritmos y esencia metalera que nos hipnotiza. Es una banda que da para mucho, no es fácil lo que consiguen así que les damos un 10 sobre 10. Saben crear el ambiente idóneo en un festival. Ya les pudimos disfrutar en la pasada edición de 2018, cuya actuación nos conquistó, y este año no ha sido para menos, parecen superarse en cada concierto.
En su setlist también contaron con “White Lines” o “Dead Revolution” entre otras. Se despidieron con la brutal y pegadiza “Ultrazombies”. Coincidimos con muchos en que los castellonenses se comieron el festival (sin menospreciar al resto de actuaciones). Acabaron después de unos 40 minutos, y su actuación la describimos como sobresaliente e impoluta, animamos al que todavía no haya tenido la suerte de verles, que no deje pasar la oportunidad.
Killus
De seguido y con la lengua afuera fuimos al recinto principal a intentar coger buen sitio para ver a Primal Fear, algo técnicamente imposible dado a la cantidad afluencia de público. Los alemanes eran unos de los veteranos del festival junto a Gamma Ray, y lo demostraron con creces, su esencia y su saber hacer nos conquistaron a todos. Desgraciadamente hubo algunos problemas de sonido, como por ejemplo que no se oyeron los coros hasta la tercera canción. La banda alemana estrenó un nuevo setlist en el festival. Tuvieron una hora de actuación en la que tocaron temas como “Blood, Sweat & Fear”, “King of Madness”, “Nuclear Fire”, “The End is Near”, “Metal is forever”, “Face the Emptiness” y “Final embrace” entre otros, saliendo victoriosos en ésta edición.
Hicimos una parada estratégica para la firma de discos del nuevo álbum de Dünedain, ubicado en el mismo recinto Ruta de la Plata. Los chicos presentaban en exclusiva su último trabajo “Memento Mori” a un precio casi regalado. Totalmente dispuestos y muy agradables trataron muy bien a todos sus seguidores que se acercaban a hacerse unas fotos con ellos. También aprovechamos para fotografiarnos con Killus que andaban por el festival todavía ataviados con su look zombie y que tuvieron el detalle de posar con todos sus fans. Y en seguida tuvimos que volver a desplazarnos al otro escenario.
Primal Fear
A los gallegos Aphonnic ya les habíamos visto hacía dos años en éste mismo festival, y casualmente venían de tocar en nuestra tierra el día anterior. Afortunadamente la afluencia de gente ha apoyado bastante a todas las bandas desde primera hora y es algo a destacar. El tema “Ombligos” se le dedicaron a la prensa en este país. “Cunfia” no podía faltar en el setlist junto a “Mi capitán”.
No tuvieron que pedir nada al público, ya que con esta banda simplemente te dejas llevar y los botes vienen solos, y como es habitual en sus conciertos los graves hacían retumbar todo al suelo. Saben cómo motivar a los asistentes. Y sin más preámbulos nos dirigimos a por la próxima actuación.
Aphonnic
Hubo retrasos que perjudicaron el tiempo de la actuación de Therion, y costó nivelar el volumen de las tres voces de sus cantantes: Thomas Vikström, Chiara Malvestiti y Rosalía Sairem (ésta última ha entrado a la formación recientemente), una conjunción perfecta. Nos recordaron a Orphaned Land con sus sonidos étnicos, pero con unos atuendos sacados de otra época. Con una puesta en escena teatral y con unas voces femeninas cantando lírico nos dejaron con la boca abierta, oírles fue toda una delicia para los sentidos. Los suecos estaban tan cómodos que se permitieron el lujo de tocar baladas preciosas de esas que te erizan el bello. Hacia las diez de la noche se empezó a poner el sol zamorano y el cielo se iba oscureciendo, por lo que empezamos a disfrutar del espectáculo de luces del grupo. Tocaron la mágica “Hellheim” dedicada al árbol celta Yggdrasil, también los temas “Flesh of the Gods” y la potente “The Rise of Sodom and Gomorra”.
Tuvieron mucha afluencia de público, que quizás como nosotros se quedaron absortos en su actuación, sin duda fueron el descubrimiento del festival. La luna brillaba en el cielo iluminándonos como la noche anterior mientras la temperatura descendía radicalmente. Mientras tanto observábamos desde las gradas como el animador de Thunderbitch daba descargas eléctricas a la gente a cambio de chupitos de la bebida de moda, muchos fueron los que cayeron en la trampa, eso sí, todos se echaban unas risas.
Therion
Había muchas ganas de ver en directo a los folkmetal Manchegos Celtibeerian, los cuales empezaron antes de que acabara Therion en el otro escenario. Con temas como “The Wolf I am”, “The booze song” o “Looking for beer” nos hicieron trasportarnos al ambiente celta y medieval del que disfrutamos año tras año en las Guerras Cántabras.
Su violinista Patricia San Martín aporta ademas la voz melódica, que combina a la perfección con los guturales de Gus Infantes. Una banda con una gran puesta escena, que durante toda su actuación animaron al público. Una lástima el juego de luces, que les dejaba prácticamente en la penumbra. Dieron gracias a la organización del Z Live y se despidieron entre fuertes aclamaciones.
Celtibeerian
Llegaba el turno de los cabezas de cartel, los suecos Kamelot abrieron hacia las 23 horas. Tanto la pista como las gradas estaban bastante llenas. Salió a escena un Tommy Karevik dispuesto a todo. Habiendo tocado éste el día anterior en el festival Rock the Coast de Málaga con su otro grupo Seventh Wonder. Más tarde apareció al escenario Laurent Hart, de la que hay que destacar su versatilidad vocal alternando voz melódica con guturales.
Nos tuvieron literalmente a sus pies. Imponente espectáculo de luces y cañones de humo, aparte atinaron con la selección de temas. Y hasta hubo un “momento balada” iluminada por mecheros y linternas de los móviles. Más tarde fue el turno del sólo del teclista Oliver Palotai, quién no paró de ondear el pelo durante toda la actuación, se le veía muy entregado.
Acto seguido dio paso al contundente solo del batería Alex Landenburg. Coincidimos con más gente en que su directo había sido insultantemente impoluto. Como ya habíamos visto anunciado en la prensa días antes, nuestra Diva Satánica cantó en el tema “Sacrimony” junto a Tommy Karevik y una Laurent Hart que brilló especialmente, aunque no fue muy acertado el intercambio de registros entre las dos vocalistas. Las míticas “Forever”, “March of Memphisto” y “Liar Liar” estaban incluidas en su setlist, al igual que “Center of the Universe”, “End of innocence” y “The great Pandemonium” entre otras. Media hora pasada ya la media noche concluyó su concierto, nos quedamos con ganas de más, aunque el festival no nos daba cuartelillo, la cita continuaba.
Kamelot
Fue el turno de Zenobia. Los riojanos salieron a escena dispuestos a darlo todo. No tardaron en caldear el ambiente con “Corazón de hierro”. Nos escapamos momentaneamente para cenar algo y proseguimos con el concierto. Tocaron “Ante tus ojos”, una balada que nos sorprendió escucharles interpretar en el festival, no les habíamos visto en directo anteriormente, y ésta nos gustó particularmente.
En el tema “Una de piratas” subieron a dos niños para ondear unas banderas piratas mientras su frontman Jorge Berceo y Víctor de Andrés se encargaban de animar al público. También subió a escena Juanlu Simarro, que colaboró en la canción “Malefic Circus”. “Lo llevo en la sangre” fue otra de los míticos temas de la noche. Y con pirotecnia incluída, cuando finalizaron nos desplazamos al otro escenario.
Zenobia
Con Tierra Santa nos dejamos la voz con sus canciones legendarias, sobre todo con “El amor de mi vida”, “Juana de Arco” y “La momia”. Hubo problemas de sonido en “La mano de dios” ya que el volumen bajaba y subía exageradamente. “Legendario” y “Canción del pirata” son de esos himnos que no podían faltar. Y aunque ya les vimos en otra edición de éste festival, ésta vez celebraban el XX Aniversario de su álbum “Legendario”.
Repasaron temas de toda su trayectoria, como: “Apocalipsis”, “Pegaso”, “El canto de las sirenas, “Tierra de leyendas”, “El laberinto del Minotauro”, “Alas de fuego”, “El bastón del diablo” y “La sombra de la bestia” entre otras.
Tierra Santa
Para cuando empezó Gigatron estábamos ya agotados, pero si algo tiene el grupo valenciano es que saben cómo montar una buena fiesta. Salieron a escena ataviados con sus trajes y con un hinchable enorme de Mazinger Z. No tardaron en animar al personal, al que no le importaba la hora que fuera, pues tenían ganas de bailar y cantar sus temas más cañeros como “Festival del Mal”, “Heavy Metal hasta la muerte” o “El Barco de Colegas”.
Espada en mano, su cantante Charly Glamour presentó el tema del “Viking Bugui”, hit que no podía faltar. Aguantamos del tirón hasta las 4 de la mañana, y ya nos retiramos a descansar… ¡…vaya paliza! Unas 12 horas diarias, con un sol abrasador por el día y con un viento gélido por las noches... Pero como dicen por ahí: “Sarna con gusto no pica”.
Gigatrón
Es hora de hacer un balance del festival
Cosas a favor: Festival pulcro, personal efectivo y resolutivo, precios asequibles, la oportunidad de descubrir y disfrutar tanto de bandas poco conocidas como a otras de alto standing todo por 30€ que valen las entradas de salida.
Cosas en contra: El cambio de ampliar a dos escenarios con apenas minutos entre una banda y otra hace agotadora la jornada de cualquier persona que no se quiera perder nada. También mencionar que la iluminación en el escenario pequeño no fue la mas acertada, ya que se quedaba muy corto en comparación con el principal. Con tanto ajetreo nos volvimos con la sensación de no haber podido disfrutar al 100% de las actuaciones.
Nuevamente agradecer a nuestro compañero Fran Cea su ayuda con las fotos después la perdida de casi todo el trabajo gráfico del festival.