Un día más y para seguir con la costumbre, los horarios laborales nos impidieron ver a los dos primeros grupos de la tercera jornada del The Juergas Rock Festival, la correspondiente al viernes 2 de agosto (una pena, ya que tenía muchas ganas de ver a Rolenzos y Gritando en Silencio), y llegamos ya con Mafalda empezando su show.

Con Mafalda siempre me pasa igual, parece que juegan en casa toquen donde toquen. Gente disfrazada y pintada como el grupo bailaba y coreaba cada una de sus canciones, poniendo ritmo y sudor al 50%, mientras la banda se lo devolvían con temas que todos sabían y disfrutaban al máximo, tipo “Las que faltaron” o “En guerra”.

Tengo que reconocer que no fueron el grupo que mejor sonaron (desconozco el motivo) pero costaba mucho entender las letras y eso restaba algo de espectacularidad al concierto, aunque en líneas generales el bolo estuvo bastante bien.

S.A. son lo que son, una puñetera aprisionadora que arrasa todo lo que pillan, da igual el calor, la humedad, la cantidad de público, etc., ellos van, tocan, arrasan y se van como si nada.

Poco más puedo decir además que solo se veían vasos volar, gente salir despedida de los pogos y sudor por doquier, creo que mejor resumen no se puede hacer de lo que fue S.A., una apuesta a caballo ganador por parte del festival y así sucedió.

Lo de El Canijo de Jerez es caso aparte. Que la organización lo pusiera entre Desakato y S.A. fue prácticamente abocarle a un vacío legal, bastante gente aprovechó para respirar y cenar.

Si a eso le unimos que no es un grupo que yo siga mucho o que sea una música de mis preferidas, pues solo puedo decir que aparecieron sin grandes efectos, ni gran parafernalia ni aspavientos, no consiguieron hacerme bailar y disfrutar como el que más.

Eso sí, no les importó verse con menos público, tampoco tocar detrás de unos grandes como son Soziedad Alkohólika, El Canijo salió, tocó sus temas e hizo disfrutar a sus seguidores, punto y final… grande El Canijo.

Los siguientes fueron Desakato que como siempre provocan un delirio general y eso son palabras mayores. La legión de seguidores que arrastran les abala y ellos lo saben, si a eso le sumas que conocen perfectamente lo que les tienen que ofrecer, pues ya tienen todo atado y bien atado.

Sonaron como una ametralladora, lanzando todos sus grandes temas para dejar completamente exhaustos a los ya de por sí perjudicados asistentes (muchos días y mucho calor) pero no les salió la jugada del todo bien porque detrás venían Trashtucada, que tampoco se quedan atrás.

Trashtucada es otro de esos grupos que sabes que los metas donde los metas la peña va a bailar y disfrutar como puñeteros críos, con temas como “Toda la noche”, “Mi destino” o “Penélope” nos hicieron bailar sin parar acompañando en todo momento a Eli (que es un auténtico cañón encima de las tablas) y al resto del grupo que como siempre son musicalmente de lo mejorcito del actual panorama festivalero. Voy a omitir que fue uno de los conciertos con los que mejor me lo pase, porque creo que ha quedado claro… grande los Trashtu.

Tenía muchas ganas de escuchar y ver a Tremenda Jauría la verdad, ya que cuando vivía en Madrid me los perdí por dos veces, y aunque tampoco es un estilo musical que siga demasiado reconozco que no me defraudaron en absoluto, con un ritmo totalmente festivalero se marcaron un concierto que consiguió sacar hasta el último aliento a los presentes en el festival a esas intempestivas horas.

Tremenda Jauría no hacen para nada una música convencional de festival, y aun así tuvieron un público al que consiguieron arrancar esos últimos pasos de baile de la noche y hacerles disfrutar y marcharse a descansar con una sonrisa en la boca.

Una tercera jornada a la que yo la verdad era reacio pero que al final del día reconozco que me lo pase muy bien y disfrute bastante de todos los grupos, tocaba descansar que aún quedaba la traca final…