El pasado viernes 27 de octubre pudimos disfrutar de una buena dosis de Power Metal en la Urban Rock Concept de Vitoria a manos de tres bandas que lo dieron todo.  Los encargados de dar comienzo a la velada fueron los gallegos Atreides, que demostraron que con su directo son capaces de hacer que el público sude la gota gorda.

Empezaron su show con “Atreides”, seguido de “Caminante” y “Penitencia”. A partir de aquí la cosa empezó a calentarse  y el público cada vez más motivado, se animaba en cada canción a acompañar al grupo cantando las letras a pleno pulmón.  Siguieron metiendo caña con temas variados de sus dos álbumes, terminando agradeciendo a toda la gente que asistió y  a la organización, con el single de su último disco “Nueva Pangea”, que también le da nombre al álbum.

Dejando un buen sabor de boca, dieron paso a Sylvania, con un estilo algo más sinfónico.  Con una ejecución de los temas casi perfecta, los valencianos supieron como comerse al público, con temas de sus tres álbumes, “Lazos de Sangre”, “Recuerdos del mañana”, y su último trabajo, “Testigos de las estrellas”.

Cabe destacar la buena técnica que tienen todos los músicos, en especial el guitarra, Alberto.  Acabaron su show con la misma energía que con la que empezaron, y tras unos 40 minutos de concierto era hora de dejar paso al último grupo.

Rhapsody of Fire, unos clásicos del Power Sinfónico, han venido desde Italia presentando su último trabajo “The Eight Mountain”. Tras sus paradas en Vigo y Gijón, empezaron su show haciendo mención al épico nombre de la ciudad de Vitoria. Empezaron dando caña con “Distant Sky”, siguiendo con un tema del nuevo disco, “The Legend Goes On” y terminando su primer bloque de temas con el clásico “Dargor” del álbum “Dawn of Victory”, del cual están celebrando su 20º aniversario en esta gira.

Rhapsody of Fire se dieron el gusto de tocar unos clásicos de este álbum que cumple años, como “Dawn of Victory” o “Holy Thunderforce”. Lo que está claro, es que al ver a esta banda en directo, a uno le transmite el virtuosismo que esta gente lleva en las venas.  Los italianos terminaron después de hora y media de concierto con el clásico “Emeral Sword” y un tema de su último disco, “The Wind, The Rain and The Moon”. Una canción épica cuanto menos, prácticamente a capella con un piano, terminando con todos los músicos en un tremendo final lleno de aplausos. 

Al final del concierto, la banda estuvo haciéndose fotos  con el público y firmando autógrafos de una manera muy cercana, que ojalá se vean en más bandas de este nivel.