El dragón de komodo sabe ser paciente. Ha esperado largo tiempo a que llegue el momento de actuar, y ese momento se aproxima. La Caracol ha colgado su cartel de entradas agotadas, y la gente ya se agolpa para entrar o para pedir las primeras cervezas. Estamos expectantes, y confiados.
Es hacia las 21:20 cuando el dragón se abalanza sobre su presa con un apetito voraz. En sus fauces trae “Ser Eternos”, single de su segundo trabajo, “Grisú”, veneno que nos inyectan en sangre y que nos mantendrá en estado de euforia la próxima hora y media.
Son los NoProcede. Les gusta el sexo, la cerveza y la tortilla de patatas, nos desvela Beltrán, tras “Más Calibre” y “Mecha Corta”, temas que rápidamente ponen en movimiento a una sala que ya está abarrotada. Vienen a hacernos cantar, igual que cantamos con su disco en el reproductor del coche. Y parece que la mayoría de los presentes lo hace con ganas. La sala sabe bien qué ruido hace el komodo. “El komodo acojona”.
Noprocede
La primera colaboración de la noche vendría a cargo de Jesús de Versoix, con el tema “Mátame”. Tras su visita, el espectáculo continúa con fuerza. “No quedan valientes”, dice la canción, tema superviviente de su repertorio más temprano que dio nombre a su primer trabajo, allá por 2013. Aarón, de Atiro es el segundo visitante al escenario, con el tres por cuatro pausado de “Que se quite el frío”.
La parte tierna del concierto concluiría con “Baldosas”, para dar paso a “El karma de los gatos”, contundente y desgarrada. De lo mejor que ofrece su último trabajo. Vuelan los minutos, y las canciones. Es llamado a filas a un viejo amigo, Jose, guitarrista de Beluga, para acompañar con su SG “Vértigo el cielo” dando otro color al sonido de la noche.
Noprocede
Mi favorita y coreable, “Fuera de combate”, precede a “Miedo al miedo”. Otro de los temazos de “Morder y esperar” y probablemente uno de los mejores videoclips que haya visto últimamente, que afortunadamente proyectaron mientras interpretaban. No necesitan mucho más para tenernos impresionados. El evento está en su punto álgido y el tiempo se termina. Era un momento idóneo para revelarnos que el día 18 de Abril repetirán en Madrid acompañando a los Nadye, otra fecha que va en rojo al calendario.
Ya sólo quedaba la antesala, “La Antesala del Desastre”, y del final. “Bienvenidas y bienvenidos a la jodida antesala del desastre”. Nos conceden un par de temas de gracia para que asimilemos la idea de que esto se termina, y así, con la música de Nino Bravo de fondo nos echamos la última (foto) y partimos. Otro llenazo en casa de los compis de local. El dragón ya ha mordido. Ahora sólo toca esperar.